Una de las aristas del multimillonario fraude en Carabineros que la justicia aún no investiga tiene que ver con una serie de homologaciones ilegales o pagadas en exceso a civiles que podrían llegar a los $16.000.000.000 en los últimos 20 años.

Según informa Interferencia, estas malversaciones tienen su origen en en diciembre de 1988, cuando comenzó a regir la Ley 18.961 Orgánica Constitucional de Carabineros de Chile (LOC), que equipaba las remuneraciones entre el personal uniformado y civil de la institución.

Sin embargo, los cuestionados pagos no se realizaron hasta después de 1998, cuando se actualizó el D.F.L N°2 de Carabineros de Chile. Allí se consolidó el equilibrio de sueldos que buscaba la ley de 1988.

De ahí en adelante, más de 1.100 funcionarios civiles de Carabineros exigieron de manera retroactiva -mediante recursos de protección- el pago de dichas homologaciones. Estos empleados recibieron el pago a pesar de ya estar jubilados en la mayoría de los casos.

Tampoco se aplicó la prescripción de cinco años establecida en el Código Civil y ratificada en diversos dictámenes de la Contraloría General de la República.

Estos millonarios pagos fueron aceptados y firmados por los altos mandos de Carabineros, a pesar de que algunos eran ilegales y otros excedían evidentemente los montos permitidos. Varios de los beneficiados son familiares de otrora máximos representantes de la institución. 

Para conseguir estos pagos se presentaron 62 recursos de protección entre los 1.100 demandantes. Así se logró que Carabineros pagara un monto total de $ 29.220.036.702. Sin embargo, expertos indican que al no aplicarse la prescripción del beneficio se produjo la entrega en exceso de aproximadamente $16.000.000.000.