Falta de capacitación, indumentaria y bajos sueldos: Las precarias condiciones de los brigadistas de la Conaf

Falta de capacitación, indumentaria y bajos sueldos: Las precarias condiciones de los brigadistas de la Conaf

Por: Paula Aguilera | 10.01.2019
Los trabajadores reciben un sueldo cercano a los $380 mil, entre la remuneración base ($299 mil), horas extra (reciben $1.400 por cada una), y un bono de movilización de aproximadamente $40 mil. Además de esto, las principales críticas apuntan a lo breve de las capacitaciones y a la falta de individuos con larga trayectoria en el combate de incendios.

Este miércoles recién pasado, el ministro del Interior, Andrés Chadwick (UDI), lideró una reunión en la que también estuvieron presentes el subsecretario de la misma cartera, Rodrigo Ubilla, y los altos mandos de Carabineros, para abordar las estrategias de prevención de los incendios forestales que cada verano afectan principalmente a la zona entre la región de Valparaíso y la del Maule.

En lo que va de esta temporada se han registrado hasta 12 focos simultáneos en el país, y de acuerdo al último reporte de la Onemi, hasta el momento existen cuatro que se mantienen activos. En la última década, entre los casos más dramáticos se encuentran los incendios que en enero y febrero de 2017 afectaron múltiples puntos del país, especialmente entre las regiones de O'Higgins, Maule y Biobío, y con otros brotes también en las de Coquimbo, Valparaíso, La Araucanía y Los Lagos.

Sin embargo, pese a la relevancia que han cobrado este tipo de emergencias durante los últimos años, la Corporación Nacional Forestal (Conaf), una de las principales encargadas de su combate, presenta una serie de falencias que no han sido aún resueltas por las autoridades, y quienes sufren las consecuencias son sus brigadistas, quienes se encargan del combate del fuego en terreno en precarias condiciones.

[caption id="attachment_265582" align="alignnone" width="1024"] / Agencia Uno[/caption]

Falencias en la preparación

La falta de personal con experiencia, carencias en la indumentaria y los bajos sueldos son las principales falencias que denuncian los brigadistas que se desempeñan dentro de la institución bajo el rótulo de "trabajadores transitorios". Esto debido a que firman un contrato que se extiende entre los meses de diciembre y abril, la temporada en que se presentan principalmente los siniestros, y luego finaliza el vínculo laboral.

Uno de los brigadistas que trabaja en la región de Valparaíso, quien pidió mantener su identidad en reserva, explica que actualmente los trabajadores reciben un sueldo cercano a los $380 mil, entre la remuneración base ($299 mil), horas extra (reciben $1.400 por cada una), y un bono de movilización de aproximadamente $40 mil.

Durante los meses en que dura el vínculo con Conaf, los brigadistas funcionan bajo el régimen de 10 días de trabajo y 4 libres, mientras que cada jornada se extiende por entre 10 y 12 horas. El personal de la región está integrado en esta temporada por 28 brigadas, y cada una está integrada por entre ocho y nueve personas, lo que equivale a cerca de 250 individuos en terreno.

Sumado a eso, una de las principales críticas apunta hacia la preparación que reciben los nuevos integrantes: se trata de una capacitación de cinco días en un horario de 9 a 18 horas, donde se combinan contenidos teóricos, reglamentos y protocolos, pero no profundiza en los asuntos prácticos.

En tanto, la indumentaria es otro de los asuntos que les juega en contra. Como explica el mismo trabajador, si bien no tiene reparos con respecto a las herramientas de combate ni la alimentación, una de las principales falencias son las mochilas de carga, que solo tienen una capacidad de 3 litros, y les impide llevar la totalidad de las raciones de combate, para jornadas que pueden extenderse incluso por 12 horas.

"Todo esto repercute en que nos vemos sobrepasados. Por ejemplo, hace cinco días atrás declararon Alerta Roja, hubo 14 incendios y hubo algunos que no los trabajamos, no pudimos porque no dimos abasto", señala.

"Excluyen a brigadistas con mucha experiencia"

La falta de personal que esté capacitado es uno de los principales puntos en cuestión, y según asegura el mismo trabajador, han comunicado a las autoridades de la región sobre esta necesidad y sus solicitudes han sido desestimadas.

Uno de las razones que explica esta falencia se remonta a abril de 2015, cuando el Sindicato de Trabajadores Transitorios de Conaf inició una huelga que se desarrolló en tres regiones, y que buscaba asuntos como regular el carácter transitorio de los contratos, mejoras salariales, herramientas para mejorar la formación, obtener una categoría profesional, normar la sobrecarga de trabajo y el control de las horas extra.

La movilización finalizó sin los resultados esperados y, a los pocos meses, a 281 brigadistas no se les renovó su contrato. Además a muchos de ellos se les registró una amonestación en su hoja de vida, que les impide volver a tener un vínculo laboral con Conaf durante cuatro años.

"Entre ellos se encontraban, principalmente, quienes tenían mayor antigüedad y experiencia en las labores de combate de emergencias. La idea siempre fue disolver al sindicato", explica Felipe Peña, ex presidente de la colectividad.

"A la gente que llevaba dos o tres temporadas la subieron a jefe de brigada, entonces no nos da mucha confianza dejar gente de tan poca experiencia al mando de diez personas porque al final la responsabilidad es tremenda", agrega el brigadista de Conaf.

Debido a esto, gran parte de los integrantes de este grupo formaron la Cooperativa de Brigadistas, en que cada uno de sus trabajadores es un socio propietario, y que ha conseguido financiamiento a través de fondos como, por ejemplo, Sercotec. Principalmente realizan trabajos voluntarios como desmalezado, manejo de arbolado nativo y construcción de cortafuegos.

Sin embargo, Peña denuncia que desde la organización han presentado proyectos en reiteradas ocasiones a la Onemi para apoyarlos en las labores y que no han recibido ninguna respuesta, y que por esa razón incluso han acudido a las emergencias de forma voluntaria.

"En la última Alerta Roja trajeron gente del sur, de Osorno, de Chiloé, pidieron una brigada de Punta Arenas también que llegó cuando los incendios ya estaban todos apagados. Entonces excluyen a gente con mucha experiencia, teniendo acá una brigada operativa traen gente de afuera, son más recursos, gastan más dinero en movilización, más tiempo, siendo que la experiencia está acá", agrega Peña.

El Desconcierto intentó comunicarse con el Departamento de Manejo del Fuego de la región de Valparaíso pero no recibió respuesta a las solicitudes.