Mujeres temporeras marchan hasta el Congreso en Valparaíso para exigir sus derechos
Una delegación de mujeres trabajadoras del sector agroexportador, provenientes de distintas regiones del país, se congregaron hoy en la Plaza Sotomayor de Valparaíso y marcharon hasta el Congreso Nacional, en donde entregaron un Petitorio exigiendo sus derechos.
A lo largo del trayecto entregaron volantes a las porteñas y porteños donde, entre otras demandas, piden terminar con los contratistas y hacer un contrato directo con las empresas; que el trabajo de la asalariada de la agroexportación sea calificado como “trabajo de alto riesgo”; sueldos acordes a las ganancias del sector agroexportador en Chile. En el mismo volante explicaban que “en los años 80’ la agricultura en Chile exportaba menos de 300 millones de dólares, en 1990 más de 2.000 millones. En esta línea, para 20111 se alcanzaron 14.171 millones de dólares, lo que implicó un crecimiento de seis veces en veinte años los envíos al exterior. Para el año 2016 las exportaciones del sector agrícola ascendían a 30.800 millones de dólares. Y para el año 2017 se elevaba a 40 mil millones de dólares”. Y esta riqueza es producto del esfuerzo y trabajo llevado adelante a lo largo de todos estos años por las Temporeras.
Con lienzos, pancartas y banderas de ANAMURI (Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas), se desplazaron por las calles del Puerto gritando consignas, tales como: “¡Escucha Piñera, aquí está la Temporera!, y precisamente el día de hoy, Sebastián Piñera se encontraba en una actividad oficial en el sector del Muelle Barón.
La marcha con las banderas lilas de ANAMURI enarboladas al viento por las mujeres en lucha, continuó adelante por las calles céntricas de Valparaíso coreando otras consignas durante el trayecto : ¡Globalicemos la lucha, globalicemos la esperanza”; “No más contratistas, no más plaguicidas!”; “Manzanas y peras, aquí están las Temporeras”.
Cabe destacar asimismo un cartel que portaba una de las manifestantes, denunciando que al cumplirse el 22 de agosto dos años del asesinato de Macarena Valdés, el proceso sigue estancado y no se observan avances por parte de la Fiscalía. En un primer momento el Servicio Médico Legal definió la muerte de Macarena Valdés como un suicidio, pero los familiares aportaron nuevos antecedentes con un peritaje particular realizado por el Perito Forense, Dr. Luis Ravanal, quien determinó la intervención de terceros en este hecho.
Mientras se avanzaba hacia el Congreso Nacional, conversé con Francisca Rodríguez, Vice Presidenta de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (ANAMURI).
Compañera Francisca, quisiera que me contara cuál es el motivo de esta movilización.
“Bueno, porque en el Parlamento va a entrar el “Estatuto del Temporero”, y lo ponen en masculino cuando la mayoría somos Temporeras. Hay un primer Estatuto que se puso en el gobierno anterior de Piñera, que se está reviviendo, un segundo Estatuto que se hizo en el gobierno de la Michelle, y nosotras lo que hemos hecho es juntar ambos aspectos, para sacar los elementos que puedan servir para mejorar la condición de las trabajadoras en el Estatuto, pero no podemos aceptar el Estatuto a puertas cerradas como se está discutiendo, porque forma parte de los intereses de los empresarios y no de las trabajadoras. Entonces, vamos a entregar un documento, a las Parlamentarias mujeres, para decirles de que quienes están en el Parlamento tienen que legislar en función y en pos de la gente, de los trabajadores y las trabajadoras, no en función de los intereses que hoy día representan los empresarios.
Por eso estamos aquí en el Puerto, donde está el Parlamento y es simbólico además, porque por aquí por Valparaíso también sale el fruto de nuestro trabajo. La fruta se va en los barcos y eso le genera grandes ganancias a los dueños de las empresas que transfieren el país a las transnacionales y a las mujeres les dejan el sabor amargo, muchas enfermedades y la miseria durante largos meses, que son los meses a fines del invierno. Entonces estamos viendo que se garanticen nuestros derechos, salarios dignos y, sobretodo, que se reconozca el tremendo aporte que las mujeres hacemos para el país, con nuestro trabajo, con nuestro sacrificio, por eso estamos acá".
¿De qué parte vienen las distintas delegaciones?
“De Copiapó, de Vallenar, de Illapel, de acá de toda la V Región, de Petorca, de Calera, de La Ligua, de Curicó, de Linares, y de la Región Metropolitana.”
¿Han tenido alguna participación en la elaboración de los Estatutos?
“ No, ninguna. Las Leyes se discuten a puertas cerradas, con muy poca información incluso y creo que hay una dejación de muchos Parlamentarios que están en las Comisiones de compenetrarse verdaderamente cuál es la vida y la situación de los trabajadores y las trabajadoras.”
¿Qué puntos plantean ustedes en el Petitorio?
“ Estamos en desacuerdo en agregar más horas extras, lo que nosotros pedimos son salarios dignos, tres turnos de trabajo, pero no se puede seguir explotándonos y haciéndonos exigencias, porque después de 20 años de trabajo somos trabajadoras desechables. Estamos planteando el Derecho a la Organización, para que haya una negociación justa, como corresponde, y que haya un reparto equitativo desde el punto de vista, no solamente de las responsabilidades de los trabajadores, sino también de los empresarios hacia los trabajadoras, porque nosotras somos las que amasamos y generamos su riqueza.”
Y respecto a los plaguicidas ¿qué plantean?
“Esa es una lucha muy fuerte. Estamos pidiendo que todo el problema de la salud sea regulado, porque todos los trabajadores están expuestos al uso impresionante de agrotóxicos, las mayores consecuencias las tienen las mujeres, afecta a la familia, al nacimiento de hijos deformes, pérdidas de los embarazos. Además están todas las enfermedades nuevas que se adquieren en un trabajo que es monótono, que tiene que ver con la limpieza de la uva, con el empaque, con el embalaje, y las que trabajan en el campo reciben los tóxicos de los plaguicidas. Las que trabajan en los paking no están libres tampoco de recibir los residuos de los tóxicos, como tampoco están libres los consumidores. Entonces pensamos que ahí tiene que haber una conciencia general de que lo que garantiza “esa fruta perfecta” que se vende en el extranjero, es el veneno que nosotras estamos consumiendo diariamente".
En relación con la incorporación de trabajadores extranjeros, inmigrantes, ¿cuál es vuestra opinión?
“ Si no hay una regulación seria y responsable, con la tecnificación y la incorporación de trabajadores extranjeros es evidente que puede haber una baja de puestos de trabajo, pero afortunadamente, ellos están más claros que nosotras respecto de sus derechos y, por lo tanto, creo que va a ser una fortaleza para la construcción orgánica del Movimiento. A lo mejor va a ser a la inversa, nosotras que tenemos tanto miedo a los inmigrantes, los inmigrantes van a ser un aporte importante para tener otra mirada, particularmente nosotras las mujeres que no tenemos la historia sindical que tienen los hombres. Entonces eso ha significado la destrucción de las relaciones contractuales, que ha ido arrojando una masa competitiva que está cuidando el trabajo y que el consumo nos mata, por lo tanto no importa las horas que trabajemos, lo importante es tener el dinero para pagar las tarjetas de crédito que nos tienen acogotados. Entonces, nosotras no estamos en contra del trabajo inmigrante, estamos por un buen trato, estamos por una relación de unidad entre los trabajadores de acá y los que vienen de afuera, pero lo que no podemos aceptar es que a costa de ellos, se vayan rebajando aún más las malas condiciones laborales que hoy día tenemos”.
La marcha continuó hasta el Congreso Nacional, donde una delegación ingresó para entregar el Petitorio con sus demandas a los Parlamentarios, mientras en las afueras del edificio legislativo las mujeres en lucha seguían manifestándose a viva voz:
“SEÑOR PARLAMENTARIO, VENIMOS A DEMANDAR, UN TRABAJO JUSTO Y EL DERECHO A NEGOCIAR”
“ALERTA, ALERTA, ALERTA QUE CAMINA, LA LUCHA CAMPESINA POR AMÉRICA LATINA”