Universidad de Chile fortalece su apoyo a los procesos de participación ciudadana a través de la Tercera Escuela de Ciudadanía para dirigentes sociales
A propósito del proceso de participación que vive nuestro país, encaminado al desarrollo de una nueva constitución, ciudadanos y ciudadanas han buscado ser parte de distintos debates al respecto. Se han generado expectativas y, al mismo tiempo, se ha constatado el déficit de espacios y de herramientas de participación, que era parte del diagnóstico que desde hace un tiempo ha surgido a nivel nacional, pero que cobra fuerza a nivel local en el marco de otros temas relevantes para discutir el avance de la democracia y el desarrollo del país.
Como señaló el abogado Fernando Atria en la conferencia inaugural de la Tercera Escuela de Ciudadanía para dirigentes sociales, “hoy la participación ciudadana suena o es recibida con escepticismo. Se habla, además, de participación y representación como si fueran ideas alternativas, y eso es un error. No puede haber acción política sin representación. Si la participación es en algún sentido relevante, no puede estar disociada de algún modo de representación”.
Esta tercera versión se basa en la premisa de que el ejercicio de participación se alza como una dimensión fundamental del aprendizaje vivencial del ejercicio de la Ciudadanía Democrática Activa, contemplando asimismo, que la participación emerge como uno de los derechos y habilidades que deben impulsarse como prioridad en el barrio, en la medida que “sólo participando se aprende a participar”.
Los y las dirigentes que participan en la iniciativa buscan reforzar sus capacidades y herramientas de participación y tener una mayor participación e incidencia en los procesos que se realizan no sólo en su comuna, sino también a nivel regional y nacional. Se trata de personas que integran organizaciones de la sociedad civil o que buscan organizarse con otros para mejorar su calidad de vida o generar iniciativas sociales de manera colaborativa.
“Queremos que nuestras organizaciones sean más fuertes y potentes. En Providencia estamos haciendo historia, estamos cambiando la forma de hacer política. Queremos contribuir con ideas y sueños”, señaló la alcaldesa de Providencia Josefa Errázuriz.
En esta versión de la Escuela, la Municipalidad recibió más de 100 postulaciones, lo que demuestra el alto interés de la ciudadanía por ejercitar una participación efectiva y resolutiva.
“Para nuestra Facultad esta iniciativa es una inmensa oportunidad para seguir fortaleciendo la participación ciudadana. Esta colaboración entre la Universidad y la Municipalidad busca instalar competencias en base a propuestas formativas, con profesores de nuestra Facultad y de otras unidades académicas que enriquecen nuestro trabajo”, dijo Eugenio Chahuán, Director de Extensión de la Facultad de Filosofía y Humanidades.
El Programa de Educación Continua para el Magisterio (PEC) trabaja con distintas comunas de la Región Metropolitana, tanto en sus establecimientos educacionales como en este tipo de experiencias que apuntan al fortalecimiento de liderazgos sociales.
“La escuela es una muestra de nuestro compromiso con la sociedad civil. Providencia pasó de ser una comuna donde los vecinos no teníamos voz a una donde los liderazgos florecen día a día”, explicó la alcaldesa Errázuriz.
Álvaro Ramis, doctor en Ética y Democracia de la Universidad de Valencia, es uno de los profesores de esta Escuela y en la primera jornada de trabajo desplegó ejercicios donde los y las dirigentes pudieran argumentar la importancia de la participación ciudadana.
Como parte del curso, Ramis dictó la clase “Derechos Humanos y participación ciudadana: elementos para una fundamentación”, donde se refirió a la nación de ciudadanía, de poder constituyente y de pacto constitucional, entre otros temas.
El curso, que se dictará en 10 sesiones presenciales, busca entregar conocimientos relativos al funcionamiento del gobierno local, democracia, liderazgo social, comunicación, multiculturalidad y otras herramientas que promuevan la participación ciudadana, así como promover y generar redes de vinculación entre los y las participantes de la Escuela, de manera de incentivar el trabajo colectivo y coordinado entre los dirigentes de la comuna.