Luego de un corte de 17 horas de las rutas B-1 y B-24, el intendente de la Región de Antofagasta, Valentín Volta, llegará finalmente a reunirse con los trabajadores movilizados en Tocopilla, impulsando demandas de distintos gremios y el cumplimiento de promesas hechas en el marco de las protestas de 2013 como, por ejemplo, la dotación de más especialistas en el Hospital Marcos Macuada o alternativas de educación superior.

Los manifestantes están agrupados en el movimiento Fuerza Laboral, que une a trabajadores de los gremios pesquero, minero y de transporte del sector. Mientras los pirquineros, de la pequeña minería, tienen un problema generado por sus deudas con la Tesorería, los pescadores y buzos se quejan porque ahora tendrán que pagar por el uso de zonas de manejo y extracción. Además, piden una prórroga para la postulación al Fondo concursable de Administración Pesquera.

"Tocopilla tiene problemas históricos que no han sido resueltos por ningún Gobierno de turno. El Estado chileno tiene una deuda con Tocopilla, los compromisos que el 2013 suscribimos con el Gobierno de la época y que después siguió el Gobierno actual se han ido cumpliendo y se han ido respetando", aseguró el alcalde Fernando San Román (PRO) en Radio Cooperativa.

Ante los cortes de ruta, la Gobernación de Tocopilla había dicho que ya tenían reuniones agendadas con los dirigentes para tratar ambos casos esta semana. El punto de mayor discordia era con el gremio de transporte, ya que los taxistas de Fuerza Laboral se oponen a la instalación de una planta de revisión técnica automatizada en el sector.

El alcalde San Román, de todas formas, aseguró que lo ocurrido ayer no puede compararse con el movimiento social de 2013. "Esto no es una movilización social de toda la comuna de Tocopilla, donde estén todas las fuerzas vivas, se trata de algunos gremios en puntual", aseguró.