"Se reflota un tema que ya fue noticia en la prensa. Asumo (…) que se trata de desviar los debates importantes del país, de llevarme a mí que hoy en día lidero un proyecto sustantivo y competitivo a un terreno incómodo que ha sido duro, difícil”, dice Marco Enríquez Ominami por el polémico uso que hizo de un jet privado de la empresa brasilera OAS durante la campaña electoral de 2013, empresa que está siendo investigada por corrupción.

MEO aseguró que desconoce a quién pertenece el avión privado que usó en la campaña de 2013 y que los gastos fueron declarados en el ítem de publicidad. Además, hizo un llamado a todos los políticos que alguna vez fueron candidatos a levantar la mano quienes no se hayan subido a un jet.

Las declaraciones fueron dadas esta mañana en entrevista con Radio Agricultura, en la que el ex candidato presidencial y líder del PRO explicó que el avión fue utilizado como medio propagandístico, por lo que nunca se pretendió esconderlo, como algunos han dicho. "Ese avión, al igual que Michelle Bachelet, al igual que Salvador Allende, al igual que Ricardo Lagos, fue utilizado en el caso nuestro no solo para recorrer Chile, sino que fue la pieza publicitaria principal de nuestra campaña”, dice MEO. Añade que es "rídiculo e indignante" sostener que lo escondió ya que apareció 30 días antes de la elección todas las noches en la franja electoral.

En referencia a quienes hablan de que existían instrucciones al comando de no exhibir la placa extranjera del jet, señala que “eso es una fuente en off que la desmiento, no hay como en esto hacerse cargo de rumores (…) Tanto es así que aterrizamos en todas las lozas de Chile, había prensa y es imposible esconder un avión en Chile”.

El pago del avión fue hecho por el partido y la factura de la operación corresponde a 370 millones. Enríquez Ominami dice que, si no se equivoca, ese corresponde al gasto más grande de la campaña. Aunque reconoce que quizás no fue adecuado gastarlo en un avión, hace hincapié en que esa campaña gastó diez veces menos que la de Michelle Bachelet o Evelyn Matthei.

“Me interpela la clase política. Quiero decirle al señor Pizarro, que el señor Tarud y que el señor que tiene la mitad de su gabinete estacionado en Fiscalía no pertenecen a una democracia, pertenecen a una mafia ocracia porque tener el descaro de transformar esto en un caso único cuando la misma Evelyn Matthei tiene un avión no declarado (…) Cualquiera que revise las cuentas mías o de otras candidatos se van a encontrar con sapos y culebras porque son un gran desorden”, sostuvo al respecto.

Finalmente, aseguró que desconoce a quién pertenece el avión privado que usó en la campaña de 2013 y que los gastos fueron declarados en el ítem de publicidad. Además, hizo un llamado a todos los políticos que alguna vez fueron candidatos a levantar la mano quienes no se hayan subido a un jet.