La nueva izquierda que pone presión al oficialismo y al PC en el Colegio de Profesores
El prolongado paro de los profesores que se inició en junio viene a confirmar que el movimiento docente está revitalizado. Ya el 2014, la denominada "rebelión de las bases" daba cuenta de un despertar dentro del profesorado, que en dicha ocasión luchaba por la llamada agenda corta, y que sorprendió tanto al Mineduc como el mismo Colegio de Profesores.
El actual conflicto en el marco de la lucha por una carrera docente que cuente con el apoyo de los profesores, ha puesto nuevamente en evidencia la masividad del movimiento, además de la adherencia ciudadana. Sólo basta recordar que un sondeo de opinión cifró en más de 60% el apoyo ciudadano a la movilización del profesorado, el cual aún no concluye.
Y aunque el paro de este año cuenta desde el primer día con el Colegio de Profesores como protagonista, otros actores que ocupan espacios tanto dentro como fuera de la instancia gremial han ido adquiriendo notoriedad. Se trata de grupos de profesores militantes, pertenecientes a los tres grupos y movimientos político de izquierda que hoy controlan el bloque de conducción de la Confech.
Dichos colectivos son el Movimiento por la Unidad Docente, proveniente de la Unión Nacional Estudiantil (UNE); el Frente de Profesores de Izquierda Libertaria, originario de la corriente que integra el Frente de Estudiantes Libertarios (FEL); y de su simil en la Izquierda Autónoma (IA), el también Frente de Profesores IA.
Las tres colectividades, con distinto nivel de penetración en el gremio, hoy cuentan con una importante base generacional que se formó en la movilización social desde el año 2006 con las tomas de los pingüinos, y siguió también presente en el despertar del Movimiento Social por la Educación del año 2011.
Hoy, con la cabeza puesta en las modificaciones al proyecto de carrera docente, dicen no pensar aún en alianzas electorales con los grupos disidentes del Colegio de Profesores, pero sí reconocen estar abiertos a la disputa de la conducción del Magisterio para 2016.
Acá, las definiciones de cada grupo.
MUD, EL DE MAYOR PRESENCIA A NIVEL NACIONAL
El Movimiento por la Unidad Docente trabaja ya hace 3 años y medios, tanto fuera como dentro del Colegio de Profesores. Su presencia a nivel sindical en liceos particular subvencionados, esfera mayoritaria ajena al control del Magisterio, les permite visualizar el panorama que caracteriza al periodo de movilizaciones por la educación.
Eduardo González, vocero nacional del MUD, asegura que el proceso en curso es de "formación de nuevos luchadores sociales" y que con la presencia en distintos frentes han dado continuidad a las movilizaciones de 2006 y 2011.
"La primera eclosión fue en el mundo universitario, y ahora se está repitiendo con las mismas generaciones en que muchos participamos del movimiento estudiantil, y ahora participamos como trabajadores de la docencia", describe González.
El docente asegura que en dicha labor, comparten con "organizaciones hermanas que también forman parte de este proceso mayor, de ir formando organización desde las bases", y agregó que aspiran a desarrollar "sujetos que asumen una idea de organización y de lucha anticapitalista y antineoliberal" dentro del Movimiento Social por la Educación.
El vocero del MUD reconoce que como colectivo docente deben "disputar los espacios dentro del Colegio de Profesores", sin dejar de lado al sector mayoritario del profesorado que labora en liceos particular subvencionados, donde se desarrolla también una diversa actividad sindical.
"Sí, estamos por llegar a los espacios de conducción y forjar desde ahí un proceso de mayor activación del conjunto del profesorado. Ahora, también debemos ser humildes y sabemos que llevamos muy poco tiempo trabajando al interior del Magisterio", advirtió el representante del MUD.
Sobre las cercanías al bloque disidente del Magisterio, conformado por Fuerza Social y el Movimiento Refundación (Darío Vásquez y Mario Aguilar forman parte de estos, respectivamente), González reconoció compartir sus criticas hacia la conducción oficialista, pero "eso no significa asumir todos sus planteamientos".
"Nosotros nos diferenciamos en eso y queremos constituir una organización de carácter nacional, y no lo vemos de forma tan clara en los grupos de la disidencia", reflexionó.
FRENTE DE PROFESORES DE LA IZQUIERDA LIBERTARIA
La instancia de profesores militantes de la Izquierda Libertaria (IL) está en pleno período de conformación, pero en términos prácticos vienen funcionando desde hace tiempo. Si bien ya cuentan con presencia dentro del Magisterio, reconocen que ello ha sido en base a la articulación con los bloques disidentes del Colegio de Profesores.
Sebastián Henríquez, coordinador de la instancia de la IL, afirma que la experiencia hasta ahora ha sido "enriquecedora" y que en poco tiempo ya cuentan con una gran cantidad de militantes que actualmente se desarrollan como profesores de aula, lo que les da presencia en las bases comunales.
"Con la coyuntura de la agenda corta del año pasado, nos dimos cuenta de que disponíamos de una gran cantidad de militantes que estaban trabajando en liceos públicos y particulares subvencionados, con lo que tomamos la decisión de generar un referente de profesores", relata el también docente de aula.
Henríquez describió la irrupción de profesores jóvenes en el movimiento docente significa "la irrupción de un nuevo movimiento docente, y en ese sentido es importante que nuestro espacio de referencia tenga pilares robustos en torno a las lecturas y los marcos reivindicativos que permitan generar adherencia de otros profesores", explicó.
El coordinador del Frente de Profesores de la IL aseguró que en pocos meses se han extendido a lo largo de los comunales en diversas localidades del pais, como Iquique, Copiapó, Arica, Valparaíso, Santiago, Concepción, Talcahuano, y Tomé.
Henríquez afirmó que el movimiento docente está experimentando "un proceso de crecimiento de las orgánicas políticas de izquierda a su interior" y que se erige como alternativa a la presencia del Partido Comunista, con fuerte presencia especialmente en el Magisterio.
En ese sentido, el docente afirmó compartir las críticas de la disidencia y explicó que sus diferencias con la cabeza del Magisterio "no se produce porque sean comunistas, sino porque han sido muy oficialistas y han cuidado una relación muy cercana con el ministerio de Educación, cumpliendo un rol de forzar diálogos en circunstancias donde no existen puntos de encuentro entre los profesores y el ministerio".
Henríquez agregó que como referente de la IL buscan "superar la crítica personalista a la figura de Gajardo, porque finalmente eso despolitiza la discusión".
"Muchos profesores asumen equivocadamente que si sale Gajardo y asume otro, las cosas van a cambiar. El Colegio de Profesores requiere de una reestructuración orgánica, que sus dirigentes rindan cuentas de las decisiones en el devenir cotidiano del gremio", argumentó Henríquez.
El coordinador explicó que como referente "buscan centrar el debate en una perspectiva pedagógica" y ejemplifica con una de las demandas en contra del actual proyecto de carrera docente. "Para nosotros, el 50/50 y el fin del agobio laboral, van directamente relacionados con mejorar los aprendizajes de los estudiantes, y no para subirnos el sueldo o para mejorar nuestra estabilidad laboral", detalló.
El docente defendió la presencia en espacios ajenos al control del Colegio de Profesores. "Para nosotros es importante salir al mundo de los particulares subvencionados, porque al final son ellos los más precarizados en sus condiciones laborales", explicó.
FRENTE DE PROFESORES DE IZQUIERDA AUTÓNOMA
Romina Maragaño, profesora de aula en Valparaíso y miembro de la instancia autonomista, reconoció que el espacio "es emergente y lleva un mes" y que por el momento han aportado "con insumos para fortalecer el trabajo del gremio".
Sin embargo, plantea que dentro del mediano o largo plazo, esperan " poder entrar a disputar el espacio del Colegio de Profesores, donde se tienen que rescatar los espacios democráticos para que el gremio se vea representado realmente".
Maragaño explica que la cercanía entre las tres organizaciones de izquierda "se da principalmente porque la mayoría somos profesores jóvenes, somos ex pingüinos del 2006, muchos incluso desde las universidades en ese tiempo, y también estuvimos el año 2011, que tenían lógicas de espacios mucho más democráticos".
Ante ello, Maragaño admite la intención de "transformar" al Colegio de Profesores, y aunque cuentan con un militante que es dirigente nacional en Tomé (Aníbal Navarrete), siguen en periodo de constitución.
"Nuestro aporte ha sido entregar insumos para la discusión a través de redes sociales y también en nuestros espacios desde las bases, es decir, desde los comunales", explicó la miembro del Frente de Profesores de IA.
La docente de aula explicó que la distancia con sectores como el Partido Comunista a nivel de la nueva generación de profesores se produce ante una crítica a nivel de discusión política, pero que como referentes de izquierda "no somos anticomunistas".
"El PC no es el enemigo que tenemos que enfrentar dentro del Colegio de Profesores. Como espacio de Izquierda Autónoma, queremos proponer algo distinto. Esta no es una crítica al PC porque sí, porque muchas veces se intenta instalar que fuésemos anticomunistas, y no se trata de eso", defendió Maragaño.
La representante asegura que las cercanías a los otros colectivos políticos se da porque "son aliados siempre" y agrega que "al como lo vemos en el espacio universitario, lo podemos hacer en el espacio de los profesores".
Finalmente, sobre las posibilidades de pactar con sectores disidentes, Maragaño asegura que "en la coyuntura se ven muchas coincidencias porque estamos todos remando para el mismo lado, que es cómo hacer que ésta sea una carrera docente digna, pero creo que los marcos de alianza se deben analizar post movilización”, concluyó.