Paraíso de las Islas Maldivas convertido en vertedero

Paraíso de las Islas Maldivas convertido en vertedero

Por: El Desconcierto | 05.11.2014

thilafushiLa República de la Maldivas es uno de los lugares más paradisiacos del planeta. El país asiático está formado por cerca de 1.200 islas agrupadas en 26 atolones, de las cuales sólo 203 están habitadas. Entre sus muchas particularidades, las Maldivas es la nación más baja del mundo, con un promedio de 1,5 metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m.) por lo que parece condenada a desaparecer con el cambio climático. Como si fuera poco, otro tema que preocupa hoy es la gran cantidad de basura acumulada en sus costas.

La isla artificial de Thilafushi, ubicada a pocos kilómetros al oeste de Malé, la capital de ese país, es hoy un vertedero municipal que “solucionó” el gran problema de los residuos de su vecina isla.

El área solía ser una laguna llamada “Thilafalhu”, con una longitud de unos siete kilómetros. Sin embargo en 1992, luego de un intenso debate para tratar el tema de los residuos, se convirtió en una isla artificial destinada como vertedero. Hoy el sector tiene una superficie de alrededor de 0,43 kilómetros cuadrados, y se ha consolidado como un impresionante sector industrial, aglomerando actividades de construcción de barcos, empaquetado de cemento, envasado de gas metano y diversos almacenes.

Uno de los problemas que han sido alertados por esta acción, es que durante los thilafushi 2primeros años de operación los residuos fueron acumulados sin una adecuada separación, lo que permitió la filtración de elementos tóxicos al mar, afectando la fauna y flora acuática del lugar.

El rápido crecimiento de los desechos en Thilafushi se debe al exponencial aumento
de la actividad turística, y se calcula que hoy el archipiélago asiático recibe unos 10 mil visitantes semanalmente, mientras que la población de Malé es de 104.403 habitantes.

Sin embargo, la zona donde se acumulan los residuos permanece escondida de los ojos de los visitantes, quienes no se percatan el daño que produce la actividad al ecosistema marino y a la salud de la población.