Se proyecta entrada de ocho nuevas centrales termoeléctricas en los próximos años
Durante esta semana la Comisión Nacional de Energía (CNE) publicó el informe sobre fijación de precio de nudo de corto plazo, en donde se incluye el Programa de Obras de generación del Sistema Interconectado Central (SIC).
En el documento, que se elabora cada año en abril y octubre, se mencionan las centrales termoeléctricas que actualmente en construcción, su tecnología utilizada y su potencia en megawatt (MW). Los Guindos, con tecnología diésel y 132 MW; Cordillera, de gas natural licuado (GNL) y 50 MW; Guacolda 05, a carbón y 138 MW; y Central Térmica Mejillones, de GNL y diésel, con un aporte de 243,2 MW.
Por otra parte, de las cuatro centrales en carpeta tres serían de carbón. Es decir, con tecnologías mucho más contaminantes y que son mucho más nocivas para la salud de la población.
Este hecho ha situación ha sido evidenciada por los investigadores Luz Neira y Ignacio Bellenger, de la Universidad Católica.
“Los óxidos de azufre son el resultado de la combustión del azufre contenido en los combustibles fósiles, como el carbón. Y tanto los óxidos de azufre como los ácidos derivados del SO2 causan muchos daños a la salud, ya que ingresan directamente al sistema circulatorio humano a través de las vías respiratorias”, sostienen los académicos en una página web.
De acuerdo a las cifras de la CNE, hasta el 2029 ingresarían 4.629 MW, siendo el 77 por ciento de ésta cifra a través de Energías Renovables No Convencionales (ERNC). Por otra parte, en relación a las centrales termoeléctricas descritas, éstas constituirían un aporte de 1.539,2 megawatt de potencia.
Si bien la iniciativa es valorada, nada asegura de que con el pasar de los años se adicionen más proyectos termoeléctricos al programa de obras. Este hecho da cuenta de la necesidad de crear un sistema que permita planificar de mejor manera la matriz energética de nuestro país, que actualmente depende exclusivamente de las voluntades y proyecciones del sector privado.
Si bien cada uno de estos proyectos deben ser evaluados ambientalmente, las señales que se están dando sobre sobre estas nuevas centrales termoeléctricas a carbón deja abierta la puerta para que el Gobierno continúe el camino de las energías renovables tradicionales.
De hecho, al revisar en detalle el Programa de Obras de la CNE, se estaría construyendo una hidroeléctrica de embalse, Los Cóndores, de 150 MW.
Ante esta situación, cabe señalar que en el informe se menciona la construcción de 19 hidroeléctricas de pasada, en contraposición con sólo tres centrales geotérmicas, las que aportarían un total de 120 MW.
Si bien el 50 por ciento de las obras planificadas en ERNC son aportes que se realizan a través de la llamada Ley 20/25, las mismas cifras sugieren que debido al bajo precio de estas tecnologías “verdes”, y por las condiciones naturales de nuestro país, el potencial de este tipo de energías es mucho mayor, y por ende, debiese ir al alza con el pasar de los años.