
Hito en conservación: Parque Cerro Castillo se suma a la élite mundial de áreas protegidas de la prestigiosa Lista Verde
Chile, con el Parque Nacional Cerro Castillo, ubicado en la Región de Aysén, ingresó por primera vez a la Lista Verde de Áreas Protegidas y Conservadas de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN).
Esto es todo un logro para la conservación de la biodiversidad del país, ubicando a Chule dentro de los 18 países del mundo que han demostrado tener una gestión efectiva y, por lo tanto, cumplir con sus objetivos de conservación de la biodiversidad y desarrollo local.
De acuerdo al director ejecutivo de Conaf, Rodrigo Illesca, “nos sentimos orgullosos del trabajo realizado por nuestros profesionales, pero especialmente por el equipo de guardaparques del Parque Nacional Cerro Castillo, quienes con gran esfuerzo y compromiso demostraron que sí es posible implementar medidas y sistemas para elevar la gestión de las áreas a estándares internacionales”,
Esto se consiguió gracias al trabajo en conjunto de la Conaf, la ONG Pew y el Programa Austral Patagonia de la Universidad Austral de Chile.
¿Qué es la Lista Verde de la UICN?
Funciona como un sistema que permite a las áreas postulantes identificar sus falencias en gestión y gobernanza, y las acompaña en el desarrollo de las mejoras necesarias para lograr la conservación efectiva de la naturaleza y sus diversos beneficios ecológicos, socioeconómicos, culturales y espirituales.
La gestión óptima es medida por un estándar que cuenta con 4 macro componentes, 17 criterios y 50 indicadores desarrollados y aprobados por los miembros de la UICN. Cumpliendo con este estándar, el área protegida puede integrar la Lista Verde de Áreas Protegidas y Conservadas a nivel mundial.
En el caso particular del Parque Nacional Cerro Castillo, esta área postuló al sistema Lista Verde en 2022, año desde el cual han ocurrido diversos hitos y avances marcados por el desarrollo de una gobernanza participativa e inclusiva, la implementación de planes de manejo y la obtención de resultados positivos en la conservación de su biodiversidad, entre otros indicadores de gestión efectiva.