La relación entre Benjamín Vicuña y su expareja, María Eugenia “China” Suárez, vuelve a estar en el foco público debido a tensiones en torno a la crianza compartida de sus hijos, Magnolia y Amancio.

Según revelaciones de medios argentinos, Suárez habría propuesto trasladarse a Turquía junto a los niños para vivir con su actual pareja, el futbolista Mauro Icardi, lo que generó el rechazo absoluto del actor chileno.

De acuerdo con la periodista Yanina Latorre, Suárez ofreció a Vicuña un acuerdo inusual: renunciar a los 4.000 dólares de pensión alimenticia que el actor paga mensualmente, además de asumir los costos educativos, a cambio de llevarse a los menores al extranjero.

“Si me dejás llevar a los nenes, mi novio se va a hacer cargo, no me pasás más los 4.000 dólares y te ahorrás los colegios”, habría sido la propuesta de la actriz.

Vicuña, quien no está convencido de la idea, habría respondido con una negativa, planteando como alternativa un esquema de tiempo compartido con los niños.

Según Latorre, Suárez habría sugerido un arreglo de “15 días cada uno” con los menores, lo que también generó controversia sobre la estabilidad educativa y emocional de los niños.

En otro punto, el periodista Guido Zaffora, panelista del programa Intrusos, añadió que Vicuña estaría profundamente molesto no solo por la propuesta, sino también por detalles que considera inaceptables, como el hecho de que uno de sus hijos estaría durmiendo en una habitación de servicio en la casa de Suárez.

Según Zaffora, este hecho habría marcado un quiebre definitivo en la relación entre los expareja, con Vicuña declarando: “Hasta acá llegué”.