Alzas superiores a los $150 mil: Los cálculos del gobierno que proyectan mejoras en pensiones de mujeres
La reforma de pensiones ya entró a tierra derecha. Si todo sale bien, según los cálculos del Ejecutivo, el proyecto debería ser aprobado esta semana en el Senado. Y la próxima, el Presidente Gabriel Boric podría hacer uso de su facultad presidencial para citar a la Cámara de Diputados con el fin de que se concluya el último trámite constitucional y así promulgar la ley antes del receso legislativo.
Esta posibilidad, en todo caso, aún es incierta. Hoy lunes la reforma debería salir de la Comisión del Trabajo, entre mañana y el jueves debería sesionar la Comisión de Hacienda, y el viernes y sábado la Sala del Senado podría despachar el proyecto a la Cámara.
En ese sentido, el proyecto debería pasar por las comisiones correspondientes y la sala de la Cámara en sólo una semana para lograr una rápida promulgación. Sin tomar en consideración la posibilidad de que se establezca una comisión mixta en el caso eventual de que haya diferencias entre el Senado y la Cámara, lo que retrasaría aún más la promulgación.
Sin perjuicio de los plazos, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara y su par de Hacienda, Mario Marcel, se han desplegado no sólo en el Congreso, sino que también en los medios para socializar la reforma y lograr el apoyo ciudadano.
Uno de los énfasis que se han hecho —y que responde a que es parte del corazón del proyecto— es cuanto crecerían las pensiones de las mujeres en caso de que la reforma se apruebe.
Para lograr ese objetivo, la reforma contempla dos mecanismos: uno general que dice relación con el préstamo reembolsable transitorio para mejorar las pensiones de los actuales pensionados por años cotizados; y otro que está dirigido directamente a igualar las pensiones entre hombres y mujeres.
¿De qué manera operan estos mecanismos? El primero, que se desprende el 6% de cotización extra que va a cuentas individuales, funciona de la siguiente manera: un 1,5 de los seis puntos irán al mecanismo que tendrá como objetivo compensar por años cotizados a los actuales jubilados.
En cuanto al bono tabla para mujeres, según lo explicado por el gobierno, el diferencial de expectativas de vida de hombres y mujeres se compensará con un beneficio determinado a partir de la brecha en el valor de la pensión por la mayor sobrevida de las mujeres. Este beneficio debe resultar en que una mujer y un hombre que se jubilan a los 65 años con el mismo ahorro e igual grupo familiar obtengan la misma pensión, con un valor mínimo de 0,25 UF mensuales.
En lo práctico, la ministra Jeannette Jara lo ejemplifica con dos casos en Mesa Central.
El primero, en caso de una mujer que cotizó por 10 años por un sueldo de $800 mil, actualmente se le estaría pagando un monto de $287.041. En el desglose, la pensión autofinanciada corresponde a $72.745 y $214.296 de la PGU.
Con la reforma de pensiones, dicha jubilación aumentaría a $332.349. La PGU aumentaría a $250 mil y con la compensación a mujeres se sumaría a $9.604.
Un caso más beneficioso sería para las mujeres que cotizaron por más de 13 años, piso mínimo para la compensación por años de cotizaciones.
En el caso del mismo sueldo, pero por 20 años de cotización, el monto pasaría de los $396.159 a $542.853. Además del alza a la PGU, también se sumaría —en este caso específico, un aumento de 96.042 por años cotizados y 14.948 por concepto de bono a las mujeres.
Otros beneficios
Al momento de ingresar la reforma, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, también anticipó otros alcances de la reforma, más allá de las mejoras a las mujeres.
“En términos cuantitativos, esta reforma beneficiará a aproximadamente 2,8 millones de adultos mayores, aumentando sus pensiones entre un 14% y un 35%. Para contextualizar, la reforma de 2008, que creó el Pilar Solidario, benefició a cerca de 480.000 pensionados con un máximo de 60.000 pesos”, detalló el ministro.
En esa línea, con la reforma aprobada, el aumento de la PGU beneficiaría, según Marcel, a “900.000 afiliados que han cotizado con mayor regularidad recibirán el beneficio por tiempo cotizado, y aproximadamente 800.000 mujeres obtendrán la compensación por diferencial de expectativa de vida”.