En las últimas semanas, la carta presidenciable y rostro más emblemático del Partido Republicano, José Antonio Kast, ha ido perdiendo terreno en las encuestas que proyectan la elección de fin de año para suceder a Gabriel Boric en La Moneda.

Un panorama que contrasta con la arremetida del rostro y presidente del en formación Partido Nacional Libertario, Johannes Kaiser. De hecho, el diputado también ultraderechista, amenaza con amagar las opciones del Republicano, quien no exhibe buenos números en los sondeos de opinión pública.

Específicamente, en la entrega de Criteria oficializada el fin de semana del 11 de enero, Kast se posiciona detrás de Michelle Bachelet (11%), con una adhesión del 10%.

Índice que contrasta con el panorama de Kaiser, quien sube 3% respecto de la medición anterior, capitalizando el 7% de respaldo como presidenciable. Un panorama similar al que evidenció Cadem el domingo 12, donde por primera vez el diputado se impone al nuevamente presidenciable de ultraderecha.

Específicamente, en "Preferencia presidencial espontánea", Evelyn Matthei se ubicó en el primer lugar con 23%, siendo secundada por Kaiser que alcanzó 10% de respaldo, dejando a Kast en tercer lugar, con 9%. 

Lleva demasiados años atacando

Cómo se ve aspectada la carrera presidencial de la ultraderecha, con esta arremetida del parlamentario en desmedro del exdiputado, es lo que conversamos con el politólogo Felipe Vergara Madonado, docente de la Universidad Andrés Bello (UNAB).

“En el caso de Kast, lo que sucede es que los nombres se desgastan. Es muy difícil mantenerse arriba tanto tiempo en este país con la proliferación de nombres que surgen, y Kast lleva muchos años en la palestra, concentrando todos sus esfuerzos en la crítica, el ataque y la destrucción de su opositor”, asegura el experto.

Una tribuna en la que ha permanecido, releva nuestro entrevistado, “no generando propuestas, ni ofertas o atractivos para la sociedad”.

“Entonces, el ataque destructivo sin propuestas constructivas, a la ciudadanía ya la empezó también a cansar", complementa.

"Hoy, quienes son afines a esa corriente, miran otras alternativas que sean más novedosas y que cumplan un poco con esta diferenciación a lo que se plantea, lo que se propone tradicionalmente", advierte.

Kaiser, más de lo mismo

Para Vergara, paradójicamente, el caso de Kaiser es un poco más de lo mismo porque "es alguien que venía del mundo de republicanos y decide crear su partido enfocado y concentrado fuertemente en el ataque y la destrucción de quien no piensa como como él. El ataque destructivo, sin propuestas, cansó".

En este sentido, Vergara ofrece un matiz: “Es un rostro nuevo, entonces, ante el agotamiento de los rostros tradicionales, lo nuevo pasa a ser atractivo. Kaiser no tiene nada que no tenga Kast, a diferencia de él, Kast es profesional, tiene más trayectoria política y tiene ya un partido consolidado".

-¿Diferencias entre ambos, entonces?

-Kaiser es un personaje nuevo como hemos tenido muchos, que afloran y, a veces, desaparecen con bastante facilidad; u otros que afloran y se mantienen. La única diferencia entre Kaiser y Kast hoy, es que Kaiser se ha mostrado más llano a generar alianza con Chile Vamos y eso de buscar afinidades y acuerdos, en un momento de un país extremadamente dividido, es un activo.

Otra ventaja para Kaiser, es que no ha competido en elecciones como partido, salvo la vez que salió electo, pero como parte de Republicanos. Y a Kast le han pegado las últimas elecciones, entonces, es un partido mermado, dañado, con un candidato muy intransigente, con nula disposición alguna de generar acuerdos. Mientras que Kaiser, en eso, ha sido un poco más astuto.

-¿Qué piensa de él?

-Creo que es un candidato demasiado incipiente para darle las ínfulas que hoy le están entregando. No tiene partido, no tiene equipo, no se le conoce en grandes proyectos. Lo que ha hecho en el Parlamento, en la mayoría de los casos, son ataques destemplados o propuestas de acusaciones constitucionales que han sido hasta atacadas por su mismo sector.

Amaneza a Kast

En consecuencia, asegura Vergara, “no es hoy día un personaje que destaque, pero sí hace ruido, y como hoy el ruido pareciera ser muy atractivo, atacar sin contenido, sin profundidad, y colgarse del ataque al cambio climático, del ataque a la Agenda 2030, pareciera que es algo que a ciertos sectores les genera empatía”.

-¿Y a nivel internacional?

-A nivel internacional algo de éxito han tenido este tipo de ataque a través de Donald Trump, el mismo Elon Musk, Javier Milei... se cuelgan un poco de eso. Pero la realidad de Chile no necesariamente es la misma que se ve en Argentina, ni tampoco en Estados Unidos.

-Kaiser representa un riesgo real para Kast?

-Es una amenaza para Kast, de todas maneras. O sea, no es que Kast haya bajado por sí solo en las encuestas, sino que Kast baja y Kaiser, que es su otro yo, su alter ego, sube, pero suma cero.

-¿Y el futuro de Kast?

-En el caso de Kast, creo que va a tener una elección en que va a fracasar, o sea, va a tener un resultado muy, muy débil, bastante perjudicial para el Partido Republicano, y para él en particular. No va a estar ni cerca en esta primera vuelta, porque no va a pasar, deduzco yo, a segunda vuelta. No lo veo ni cerca de lo que estuvo con ese 26%, 27% que obtuvo en la primera vuelta anterior.

No es más que el reflejo de lo que se viene viendo en las distintas elecciones: en las de constituyentes le fue muy bien, pero después, en la elección de apruebo/rechazo, le fue pésimo.

-¿Responsables?

-El Partido Republicano”, a quien en las elecciones de alcalde y concejales le fue muy mal; y en la segunda vuelta de gobernadores, a los dos candidatos que tenían, también les fue pésimo. Hoy día su representatividad no supera los límites anteriores, no llegan ni al 10% como una representatividad relevante, entonces, hoy el Partido Republicano es un partido más dentro del abanico.