En febrero del año 2021, el país completo se conmocionó por la desaparición de Tomás Bravo, un pequeño niño de sólo 3 años, en la localidad de Caripilún en la comuna de Arauco.

Fueron semanas de intensa búsqueda sin resultados, con equipos especializados, Bomberos, Carabineros, PDI, Fuerzas Armadas y gente de la Región del Biobío que peinaron toda zona cercana desde donde desapareció, cuando salió a acarrear animales con su tío-abuelo.

Tras varios días, el 26 de febrero fue encontrado el cuerpo sin vida de Tomasito, con signos de participación de terceras personas y en una zona que ya había sido revisada.

Sin embargo, a casi 4 años, sólo su tío abuelo, Jorge Eduardo Escobar Escobar, ha sido único imputado por su muerte, pero por el delito de abandono de menor, pero no hay pistas sobre el autor.

Desde ese día, la madre del menor Estefanía Gutiérrez ha comenzado una larga lucha por obtener justicia, una que se ha dificultado por groseros errores en la investigación que han impedido dar con el culpable de su muerte.

“Tomas Bravo Gutiérrez era solo un bebé de 3 años y 7 meses. No quisiéramos recordar la fecha en la que apagaron esa dulce voz, pero a veces es necesario, ya que a la fecha aún no hay nada, cero respuestas ante el dolor de una madre”, escribió este jueves en sus redes sociales.

“Llevamos 3 años y casi 10 meses y su caso sigue en la incertidumbre, sin responsables y culpables, pero seguimos con la misma esperanza y la misma fuerza que más temprano que tarde, lograremos nuestra tan anhelada justicia para Tomasito”, añadió de forma desgarradora. 

En otro posteo, escribió que “no entiendo como luego de tanto tiempo, no se haya resuelto nada de su caso. Me decepciona y entristece tanto ver como a la gente le importa otras cosas que no sea nuestros niños”.

“Lamentablemente, Tomas ya no está en este plano físico, y nosotros tenemos que soportar que la justicia sea tan mala y lenta. Como puede ser que en 3 años aún no se pueda saber nada, absolutamente nada”, añadió.

Para cerrar, la madre de Tomasito se preguntó “¿Quién fue?, ¿por qué pasó?, ¿cómo pasó?, ¿por qué lo hicieron?, ¿qué le pasó a Tomas? Tantas preguntas sin respuestas, veo como pasa el tiempo, como cada vez la justicia me decepciona cada vez más en este caso. Esto no debería de estar ocurriendo”.