Actualmente el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, se encuentra bajo investigación, acusado de presuntos delitos de violación y abuso sexual contra una subalterna de La Moneda, contexto en el que perdió su cargo, mientras este martes 19 de noviembre enfrenta la reanudación de su formalización, interrumpida el jueves último, a solicitud de su defensa.

En su caso, no se le permitió retornar a su domicilio y se estableció una detención en tránsito, que lo mantuvo hasta hoy en un calabozo de la PDI en la comuna de Ñuñoa.

Cómo debiera continuar el proceso de mantenerse privado de libertad, lo que está sujeto a cómo evolucione la indagatoria judicial, es lo que le consultamos a Eduardo Labarca Lucero, prefecto (R) de la PDI y asesor en seguridad, quien entrega detalles de las condiciones en que podría continuar preso.

“Hay que diferenciar dos cosas, la primera es el período que puede estar privado libertad, en espera del juicio, allí siempre va a estar... como está, en un cuartel de la policía, o en un anexo, como Capitán Yáber", explica el experto.

Considerando que en estos momentos, aclara, “está en espera del juicio oral, en esos lugares no hay ningún tipo de peligro para su integridad, dado que son lugares que están acondicionados para el tránsito de este tipo de personas, en virtud a su condición, a su calidad, o al delito que se está cometiendo”.

De ser condenado estará lejos de la población penal normal

“Cuando hablamos de qué medidas de seguridad demanda una persona como él para permanecer privado libertad, ya dado el segundo paso, si es que el exsubsecretario fuera condenado y tuviese que ser trasladado a un recinto penitenciario, lo que hace Gendarmería en estos casos, es mantenerlo alejado de la población normal, y cuando hablamos de la población normal, es esa población que de una otra manera está en el ámbito de Gendarmería, está rematada”.

Qué significa rematado, el mismo Labarca lo explica recalcando que se llega a ese estado cuando "la condena ya está ejecutada, la mayoría de ellos son personas que están con algún tipo de delito bastante grave".

"Si Gendarmería enviara al exsubsecretario a la población normal, claramente, primero producto de la naturaleza del delito que se le acusa y, segundo, también por su condición... obviamente, Gendarmería no hará eso, sino que lo enviará, si es condenado, a un módulo donde están primerizos o personas que tienen delitos especiales".

De hecho, según comenta nuestro entrevistado, "hay un lugar especial también que tiene Gendarmería para personal como del Ejército, que no están en condición para irse a Punta Peuco".

"Gendarmería tiene, en todos los penales, módulos especiales para personas primerizas, o lugares especiales para personas que, de una u otra manera", pueden estar expuestos a que su vida puede peligre, explica.

Familia debe tener acceso a él

Ahora bien, recalca Labarca, "si hablamos de un penal especial, tendríamos que hablar solamente de Capitán Yáber, que es una unidad de paso, el otro sería Punta Peuco, pero no están las condiciones del delito para que sea ahí cumplida su pena”, de ser condenado.

“Cuando ya se genere la pena", de ser así, y Monsalve tenga "que ser trasladado a un centro penitenciario, lo que tiene que hacer ahí Gendarmería es ponderar, primeramente por sus derechos, dónde está el domicilio de su familia", comenta el expolicía.

Porque, complementa, "según el domicilio de su familia es también a qué penal va a ser trasladado el exsubsecretario" de ser encontrado culpable de los delitos que se le imputan.

Y en este caso, dice, "si su familia tiene domicilio en Concepción, se buscará un penal que esté cerca de su familia, dado que los derechos humanos dicen que se le tiene que dar la facilidad para que la familia pueda ir a visitarlo”.

“Es complejo determinarlo, porque no sería cualquier reo (entendiendo que estamos suponiendo que va a ser condenado), y Gendarmería tiene claramente un mínimo de seguridad, que es no mantenerlo en la población normal, sino que siempre va a tener personas primerizas que no sean de corte violento, ni tampoco (vinculadas) a armas”, dice nuestro entrevistado.

En el calabozo no puede estar con cordones ni cinturón

Respecto de su condición actual, Labarca recuerda que "hoy día el exsubsecretario está en un calabozo, es un calabozo de la PDI que tiene ciertas características, casi siempre las mismas características a nivel nacional y también internacional, de cierto metraje, ciertos barrotes, dentro del calabozo no puede estar con ningún tipo de cordones, o su cinturón, porque puede atentar contra su vida".

“Hay algunos calabozos que tienen baños en el interior, hay otros" en que el detenido tiene "que pedirle el permiso al custodio para salir" al WC, "pero claramente Gendarmería va a tener que tomar precauciones al momento de trasladarlo a un centro penitenciario en el tiempo que esté en prisión preventiva", recalca.

Yo creo, complementa, "que va a ser trasladado al Anexo Capitán Yáber, que reúne las características necesarias para mantener a este tipo de imputados”.

Justamente respecto de Gendarmería, Labarca recalca que "cuenta con personal altamente calificado para los traslados de los detenidos, y este no sería un imputado peligroso, entonces claramente no debería tener problemas en el en el traslado del imputado”.

Atendiendo el cargo que tenía, cómo debe relacionarse personal de Gendarmería o las policías con él, es la última pregunta que le formulamos, contexto en el que advierte que no se considera un trato especial.

“Según el protocolo, se tienen que relacionar (con él) como cualquier otro imputado, como cualquier otro reo", aclara al tiempo que alude al médico de profesión como "un exfuncionario".

Dicho esto, recalca que "siempre Gendarmería, la policía, Carabineros”, se vincula con “las personas por su condición de ser humano, no por el cargo que ostenta, por tal motivo, no hay un protocolo que apunte a él, que se le tenga que tratar de señor, subsecretario o exsubsecretario, simplemente se le llama por su apellido, manteniendo siempre el respeto a los derechos humanos”.