Doctor en Territorio por RR.EE.: "Da la impresión que el canciller tiene poco que decir"
Esta semana se dio a conocer que Argentina impidió el paso de 80 toneladas de comida en cuatro camiones nacionales que viajaban hacia Magallanes.
Esto, a raíz de la aplicación, este miércoles 19 de junio, de una antigua normativa respecto del tamaño de los medios de transporte por el paso Cardenal Samoré a la altura de Osorno, todo esto luego del impasse por los paneles solares trasandinos ubicados en territorio chileno a tres metros de la frontera.
La situación se suma a la polémica encabezada por el embajador de Chile en España, Javier Velasco, por el ofrecimiento del también militante de Convergencia Social a los españoles para utilizar el puesto que dejó Israel en el mercado armamentístico después de su participación en la guerra de Gaza.
Otros frentes
Pero eso no es todo. Otra de las dificultades en este frente fue con el régimen de Venezuela después de los dichos del diputado bolivariano oficialista, Diosdado Cabello, en donde insulta al Presidente Gabriel Boric llamándole “bobo” y “flojo”.
Una ofensa que motivó el repudio transversal, de izquierdas a derechas, entre las autoridades en Chile y abrió otro flanco de cuestionamientos en torno a la continuidad de las relaciones diplomáticas con el país caribeño.
Un contexto que para el profesor de conflictos y seguridad internacional de la Universidad del Desarrollo y doctor en territorio y desarrollo local de la Universitat Jaume I, Jorge Sanz, tiene efectos políticos.
Como que las autoridades pueden ver la situación con Venezuela desde la perspectiva de mantener las relaciones diplomáticas para no generar un problema con el PC, o en función de lograr un objetivo en específico.
Sin embargo, para el experto en política internacional la vía que recomienda es la de no romper relaciones con nadie.
"Lo que haría es mandar a llamar al embajador y dejarlo acá. Esas son medidas duras, que manifiestan una acción y un malestar en términos diplomáticos”, enfatiza.
Y agrega: “El PC opina dentro de Chile y genera ruido, pero las relaciones internacionales las lleva el Presidente. Las relaciones con Venezuela siempre han sido difíciles (...) pero la incursión en Chile para asesinar a una persona que había pedido asilo no es razonable ni permitida entre países que se dicen amigos y hermanos”, sostiene.
En esa línea, Sanz es duro respecto del rol de la Cancillería.
“El Presidente lleva las relaciones tal y como él las siente. Da la impresión que el canciller tiene poco que decir en esto (...) que o no propone, o no tiene peso”, comenta.
Para Sanz, lo destacable son los esfuerzos de Boric por posicionarse en materia internacional, especialmente luego de su participación activa en la Cumbre por la Paz en Ucrania:
“Él tiene dos nortes: uno son los derechos humanos y dos, la paz (...) Está bien que haya estado. Tiene que ver con esta necesidad de mostrar a Chile en todas estas alternativas y oportunidades y eso está bien hecho. Si hay una conferencia por la paz en Rusia, también hay que ir”.
Foto: Ministerio de Relaciones Exteriores
Fuente: Agencia Uno/El Desconcierto