Se prevé más lluvia para el inundado sur de Brasil: Ríos siguen creciendo y hay 150 fallecidos
Mientras cientos de miles de personas en el estado de Rio Grande do Sul en Brasil intentan volver a sus casas, buscar a las personas desaparecidas y comenzar la reconstrucción tras inundaciones devastadoras, la lluvia sigue y los ríos vuelven a crecer, causando más estragos y complicando las labores de rescate.
[Te puede interesar] Desesperanza científica: Climatólogos del mundo prevén catástrofe en las próximas décadas
El presidente Lula Da Silva suspendió su visita a Chile para enfocarse en la atención a los damnificados, y desde la Cruz Roja están recaudando US$ 8 millones de ayuda internacional para la tragedia sin precedentes en el futuro cercano del sur de Brasil. El número de fallecidos aumentó a 148 y hay más de 600 mil personas desplazadas.
[Te puede interesar] Paro de camioneros: Altísima congestión en Ruta 5 debido a bloqueo de varias pistas
El pronóstico para los próximos días no ayuda: se prevén más frentes de mal tiempo con lluvias y una reducción de la temperatura, aumentando el riesgo de hipotermia entre quienes están en albergues.
[Te puede interesar] Clases suspendidas por ratones: Basural asedia a población y jardín infantil en Huechuraba
El río Guaíba inundó gran parte del centro histórico de la capital regional, Porto Alegre y su caudal creció por sobre los 5 metros, superando su récord histórico. Tras haber disminuido en los últimos días, el río ha vuelto a crecer a los 4,78 metros. Si se cumplen los pronósticos de lluvia para los próximos días, se prevé que el río alcance la marca histórica de 5,5 metros, inundando aún más sectores.
Autoridades sanitarias también prevén un aumento en los casos de dengue en la zona, debido a que el mosquito vector Aedes Aegypti se beneficia de la presencia de agua estancada para reproducirse y Brasil ya está atravesando el mayor brote de su historia, superando los 4 millones de casos y las 2 mil muertes. Esto se complica debido a la falta de servicios básicos consecuencia de la destrucción. Cientos de personas no tienen acceso al agua potable o a medicamentos.
Cóctel desastroso
Según especialistas y climatólogos, la situación responde a una intensificación sin precedentes de los fenómenos meteorológicos usuales de la zona.
Se trata de los llamados “ríos voladores” que se cargan de humedad del océano y la Amazonía, y trasladan esa agua de forma atmosférica hasta encontrarse con los Andes, desviarse y provocar lluvias a varios kilómetros de distancia, en la cuenca del Río de la Plata.
Este año, aunque el fenómeno de El Niño está de retirada, especialistas habían advertido que los efectos se seguirían sintiendo en Latinoamérica hasta el invierno. Este fenómeno parece ser una muestra de ello, y se suma al calentamiento global, que aumenta la temperatura del océano al igual que El Niño.
Así, según explicó ante la agencia AFP el climatólogo Francisco Eliseu Aquino, se configura un “cóctel desastroso” que intensifica las lluvias hasta un nivel nunca antes visto en la zona, y que podría repetirse a futuro con el aumento de eventos extremos causado por el cambio climático.
Costo económico
Mientras la tragedia continúa, autoridades intentan medir el costo económico, ya que Rio Grande do Sul es un importante polo agropecuario y el mayor productor de arroz del país.
Según los cálculos preliminares de las autoridades, al menos se necesitarán US$ 3.600 millones para enfrentar la emergencia.
Según los datos de Defensa Civil, han participado 27 mil bomberos, militares y policías en la zona, usando 340 barcos, 41 aeronaves y 4 mil patrullas para rescatar a 76 mil personas y 10 mil animales.