Hace menos de dos años, Sebastián Piñera le entregaba la banda presidencial a Gabriel Boric tras cuatro turbulentos años en que su figura fue fuertemente cuestionada por las violaciones a los derechos humanos cometidas por agentes policiales en el estallido social y el manejo de la pandemia.

En su punto más bajo, Piñera registró el nivel más bajo de aprobación de un Presidente tras el retorno a la democracia: 6%, según la encuesta CEP. Al momento de dejar La Moneda, de acuerdo a Cadem, 71% desaprobaba su gestión y solo un 24% tenía una mirada positiva respecto a su gobierno.

Ese escenario, provocó un alejamiento temporal de Piñera de la vida pública. Los primeros meses luego de finalizar su administración optó por adoptar un perfil bajo y fuera del ojo público, sin hacer balances de su cuestionado gobierno.

Esa tarea le fue dejada a sus colaboradores, quienes comenzaron a dar pistas sobre cómo se defendería el legado del segundo periodo de Piñera como mandatario: “El tiempo reivindicará el mandato del Presidente Piñera”, decían sus ministros en marzo de 2022 al dejar el poder.

Pero ya con el pasar del tiempo —tal como lo señaló Carlos Peña en su columna tras el fallecimiento del expresidente— Piñera comenzó “a sanar las heridas” a su figura que le fueron infringidas en su mandato.

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Así, poco a poco, comenzó a tener un rol más activo, no solo en los medios y a través de sus opiniones, sino que en la conducción del devenir político de Chile Vamos, coalición que lideró por más de 20 años.

Incluso, muchos personeros de su partido, Renovación Nacional, y del resto de la derecha, especulaban con la posibilidad de que Piñera se aventurara a una tercera carrera presidencial.

Entre darle curso al proceso constitucional, influir en los desafíos electorales de su coalición, y su rol como empresario y líder de la derecha internacional, transcurrieron los últimos meses de la vertiginosa vida de Sebastián Piñera.

Proceso constitucional

En su gobierno —y en cierta parte de manera forzada— se abrió el proceso constitucional. En su mandato, además, se instaló la Convención Constitucional, que redactó la primera propuesta de nueva Constitución rechazada por la ciudadanía, por lo que Piñera tuvo directa relación con el debate de la nueva carta magna.

Luego, en el segundo proceso, también jugó un rol fundamental, incluso proponiendo candidatos y levantando índices programáticos junto a su equipo de cara a la nueva discusión constitucional.

Por lo mismo, en sus últimos meses de vida, Piñera estuvo siempre atento al debate y campaña constitucional que precedió el plebiscito de salida del pasado 17 de diciembre en que el exmandatario se la jugó por el A favor.

“La propuesta de la Comisión Constitucional no solo es infinitamente mejor que la propuesta de la fallida Convención constitucional, sino también mejor que la actual Constitución. Primero, porque fortalece la libertad, la seguridad y la propiedad de los ciudadanos. Segundo, porque fortalece al Estado en su rol de resguardar el orden público, garantizar los derechos sociales y resguardar los equilibrios macroeconómicos”, dijo en la previa del plebiscito.

Tras el fracaso constitucional y el cierre del proceso que se abrió en su mandato, Piñera lamentó la falta de capacidad de la política para dar una respuesta a la ciudadanía en esa materia e hizo una fuerte autocrítica a su sector.

“No haber logrado aprovechar con sabiduría, con prudencia y con inteligencia la tremenda oportunidad de haber logrado un buen acuerdo constitucional, pero al mismo tiempo que fuera aprobable por la opinión pública, debilitó a la derecha”, dijo Piñera en entrevista con La Tercera el 14 de enero de este año.

Carrera presidencial

Lo repitió una y otra vez. Pero no se le creyó, incluso en su sector. “No voy a postular por tercera vez a la presidencia”, dijo Piñera en la última entrevista de su vida en Radio Duna.

“Mi decisión hoy día es que no. No voy a postular por tercera vez la presidencia, pero si voy a seguir muy activo, muy comprometido y muy apasionado en el debate”, aseguró el exmandatario, dejando en claro su intención de seguir activo políticamente.

Pero, una parte grande de su sector, anticipaba que el exmandatario iba a intentar de todas formas llegar al poder nuevamente. Así lo expresó su exministro de Defensa, Mario Desbordes, quien aseguró: “No le creo nada, porque estoy cien por ciento convencido de que quiere postularse nuevamente”.

Tras su muerte, en su velorio, Desbordes desclasificó la última conversación que tuvo con Piñera. “Me dijo, ‘usted no me cree, pero no quiero ser candidato nuevamente’”, dijo Desbordes sobre la conversación que describió como amena y fraterna.

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Incendios y exposición internacional

Además de su participación en el ámbito nacional, Piñera siempre marcó presencia a nivel internacional en su faceta de empresario y en su calidad de expresidente.

Para año nuevo, Piñera tuvo una celebración en Punta Cana, instancia en que se codeó con otros líderes mundiales como Bill Clinton —expresidente de EE.UU.— y Enrique Peña Nieto, exmandatario de México.

La intención de la reunión habría sido estrechar lazos y dialogar sobre el futuro de América Latina y su conexión con Estados Unidos.

El 29 de enero, en un viaje express, se trasladó a Brasil para exponer en el Latin American Investment Conference.Ahí, el exmandatario expuso sobre los desafíos de Latinoamérica en materia política, económic y medioambiental. Las imágenes del evento fueron compartidas en su Instagram, siendo la última publicación antes de perder la vida en el fatal accidente que tuvo en el Lago Ranco.

Pero sin duda, el último acto de Piñera en vida, de connotación y que ha tomado mayor relevancia, fue la coordinación que tuvo con sus exministros para prestar apoyo al gobierno en el combate de los incendios ocurridos en la Región de Valparaíso.

“El día antes de su muerte, el presidente quiso reunir a un equipo de personas que tenían experiencia en la reconstrucción del terremoto de 2010, para ver cómo podía esa experiencia ponerse al servicio de la tragedia que ocurrió en Valparaíso”, reveló el exvocero de gobierno de Piñera, Jaime Bellolio.

En esa línea, el excolaborador de Piñera también aseguró que este se había contactado con el Presidente Gabriel Boric para oficializar su ofrecimiento de ayuda.

“Ayer por la mañana estaba pidiéndonos esa información, hasta el último minuto pidiéndonos minutas. Creo que es una manera que refleja bien al expresidente Piñera, hasta el último instante pensando en poner por delante el interés de Chile”, dijo Bellolio.