ADELANTO| “Indócil”: Lanzan obras completas de la poesía de Eugenia Brito

ADELANTO| “Indócil”: Lanzan obras completas de la poesía de Eugenia Brito

Por: Matías Humberto Rojas Pérez | 07.12.2023
Temas como el cuerpo como lugar de disputa, las violencias de la ciudad bajo dictadura, imaginarios latinoamericanos y el deseo forman parte del corpus, una edición revisada y corregida por la propia autora. Una obra editada bajo el sello de Ediciones Los Libros del Cardo que se presentará el próximo 8 de diciembre en el contexto de la Furia del Libro y reúne las publicaciones que van de 1984 al 2021, de las que El Desconcierto presenta un adelanto en exclusiva.

DE “VÍA PÚBLICA” [1984]

Proposiciones

Huir del útero y sus multiplicaciones

El espíritu sopla sobre las aguas.

A mí me dejaron una gran piedra redonda en el estómago.

 

(El espíritu sopla sobre las aguas)

 

Esta gran piedra redonda solitaria de la tierra

tiembla como ella y se estremece

También sabe alzarse y reclamarme la vida.

 

DE “FILIACONES” [1986]

Se desnuda la máquina se acaricia se palpa

ella está sin saber agujereando Santiago.

Por eso la erigen como altar estos parias

es a ella a quien narran su epístola las calles

por ella se acarician se desnudan se palpan.

 

DE EMPLEZAMIENTOS [1991]

Haber estado intacta entre dos polos de carne

y carecer de habla

 

Las aguas como siempre tan suciamente sabias

afirmaron mis pies

 

Plataforma fui en la cicatriz del uno

dicen arrodilladas

 

Ahora somos dos y la ciudad, pantalla.

 

DE DÓNDE VAS [1998]

COMO MANCHAS APARECEN TORCIENDO LA MAÑANA.

 

Ellas

totales

simbióticas

mudas

 

bailando la danza más antigua del mundo

alquilando mi ojo para su corazón

 

Pues no existen más allá de ese pétalo que se abre carnal

y mudo.

 

Es un lecho, es el jardín en donde se cita el oráculo con

el bosque más verde de la noche.

 

Y si baila la noche, si baila la dulce y clara noche, es para

que tú permanezcas, la plácida enamorada que habla con

voces de color violeta.

 

Será su permanencia la luz que determina ese fulgor de

vetas en la piedra lejana o sólo un brillo en la luz de la

aurora?

 

Tiempo, tiempo que emanas tus laureles sobre nosotras,

y nos detienes, nos desvistes y nos cedes para una marca

cruenta.

 

DE EXTRAÑA PERMANENCIA [2004]

El viaje se hará aquí.

 

El tren deriva en una hilera de ladrillos rojos y cemento, adobe, tiza.

 

Ella es portadora, la que carga el cuerpo.

 

Conectada a los ladrillos hacen una recta, cerca de su estómago que

carga el bulto, y el material que ellos congregan.

 

Pero los muertos no están.

Sólo hay el cuero y el revés de esta curvada, a recta que insiste en no

caer.

 

DE “OFICIO DE VIVIR” (2008)

 

En América

toda esquina lleva la canción de un nombre:

devoración.

 

Instalo mi sombra bajo esa marca,

vive.

 

Pero mis pies se cansan y me caigo

uso, entonces, mi cola de reptil.

 

Aquí estoy

inclemente,

fui usada para el oro

estoy gastada, y ya en el final

 

Nadie me vio cuando salí de la espada

huí allí de los ojos de los hombres

(nunca vi en su mirada tanto horror)

 

ahora sobrevuelo la tierra americana

no parí hombres en esta tierra áspera

no enterré hijos en el jardín.

Sólo asesoré la mantis religiosa

para sembrar el fuego sobre la fuga astral.

 

DE “A CONTRAPELO” (2012)

 

Flores de plástico cubren las encementadas calles.

La música en alta voz de los cuerpos militares

proclaman el triunfo del fusil,

los gases lacrimógenos

inundan los establecimientos educacionales

en la gran ciudad

dejando una estela sin nombre,

una gasa inmóvil,

un viaje, una memoria

en la serpiente

de metal

que vuela

por las cadenas exhaustas del valle.

Su malla de sal se enrolla en mi garganta

No hables, pide, calla

Voy a surgir de dentro del silencio.

Y la manta se refugia en mi pecho izquierdo

Bebe de mi pezón

su leche envenenada

cruza mi cuerpo y se hunde en mi cadera

Desde allí me empuja sin piedad hasta las negras rocas

Minerales suburbios indígenas

Bebe, me obliga,

bebe del polvo y de la hendidura de la piedra

Sabrás lo que es vivir en coma y siempre seca

Yo cubriré tu cuerpo con mi propia baba

Te daré mis anillos

Mi forma de matar y de morir.

Haz de saber

Que mis escamas son

Hablas trasplantadas e implacables neblinas

Estigma de otra historia

haces de radio que claman desde el cuerpo que enrollan

su inasible verdad

para que mueras desde y a partir de ella

una vez nada más y para siempre

 

 DE “VEINTE PÁJAROS” (2021)

 

Veinte pájaros vuelan

atormentados en el cielo

Veinte pájaros blancos

sobresalen entre las altas nubes

 

Graznan y agitan sus alas

en sonidos agudos y compactos

Cuando la máquina cae sobre su lomo

y su arista

corta los tendones y las garras

Una mirada abre una recta por ellos,

Un foco imperial y genocida

divide la carne

y el hambre

cae sobre los glóbulos blancos.

 

El hambre brusco del caos y la siembra

el latido y la sombra del latido

un ardor buscan

El cuerpo y su siembra

la roca en que se juntan

labio y hombre

Veinte cuerpos forman un avión

Planifican abiertas sus grandes alas

letras de aire escrutan el metal

zumban y el sonido de las horas

baja y sube sube y baja

sobre los hielos los mapas las ciudades

 

4

Veinte cuerpos ermitaños

alterados por las mutaciones

por el grito amargo de los refugiados y los migrantes

en la balsa de la medusa

ululan

Acompañando su paso y su gemido

rectangular

el cuerpo de un ave grande.

Carnicera,

se planta ante las otras desafiante.

Es un ave rapaz

astuta y traicionera

Mira a su alrededor

Y lentamente deja caer sus plumas

Y grazna

Melancólico canto de sirenas

Practican el horror

la seducción del mal y

sus embrujos

 

Despiertan al convulso animal que duerme

bajo la carne


Una versión modificada y corregida por la autora. Una mirada a la propia trayectoria poética, a los momentos en los que se situó su creación. Este fue el ejercicio que tuvo que desarrollar la poeta, ensayista, investigadora, crítica cultural y docente Eugenia Brito, para su más reciente volumen “Indócil. Poesía reunida (1984-2021)”, publicado por Ediciones Los Libros del Cardo. Obra completa que tiene la particularidad de ser la versión definitiva, corregida y en retrospectiva de su poesía.

Referente de la poesía política, urbana y feminista del siglo XX, Eugenia Brito reformuló el género desde un lenguaje experimental, mutable y constantemente en afrenta con la violencia, el poder y la marginación, abriendo los espacios de la metrópolis para ubicar a la mujer como protagonista. Violencia que parece permanecer en versos que no pierden vigencia: “‘Perforarán tu rostro, cegarán tus ojos’. Por ellos miro, contesté” (El rostro, 1984).

“‘La ardiente sed de un cuerpo por llegar a ser signo’. Ese es el verso que define mi poética. La búsqueda de un signo, un signo político desde mi cuerpo. Y lo hago desde la poesía”, señala Eugenia Brito, a lo que suma que “una búsqueda que es muy propiamente mía, es cuál es el cuerpo verdadero de una, que encuentro que es una pregunta enigmática; porque hay un sitio más domesticado que otro”.

Sobre el contexto de producción de sus primeras obras, recuerda, “escribí en un momento en que no se podía hablar de las cosas, que estaba prohibido, que realmente te podían tomar presa, ser torturada o muerta. No, no podía hablar exactamente lo que pasaba, entonces había un lenguaje un poco cifrado y velado”.

“Indócil. Poesía reunida (1984-2021)” será presentado este viernes 8 de diciembre a las 19:00 hrs. en la Furia del Libro, a cargo de la crítica literaria Patricia Espinosa y de la docente e investigadora Malva Vásquez.