¿Inevitable o no?: Las contradicciones de Chile Vamos en el marco de los 50 años
Durante la mañana de este lunes 11 de septiembre la UDI emitió una declaración respecto a la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado que perpetraron las Fuerzas Armadas comandadas por Augusto Pinochet.
Sin mencionar las responsabilidades de los agentes de la dictadura en los crímenes de lesa humanidad, cometidos entre 1973 y 1989, o la complicidad de civiles en el régimen, la UDI optó por enfocar su declaración en las “responsabilidades” de la izquierda que habrían propiciado el Golpe de Estado.
“El Gobierno de la Unidad Popular accedió al quebrantamiento de la democracia, propiciando una confrontación con la Contraloría General de la República, la Corte Suprema y el Congreso Nacional, para imponer su proyecto político”, sostiene el comunicado de la UDI.
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¿Evitable o no?: La definición que enreda a la derecha
La declaración, en su aspecto más polémico, sostiene: “Entre 1970 y 1973 sobrevino un quiebre social, político e institucional respecto del cual el 11 de septiembre se transformó en algo inevitable”.
Precisamente esta definición, si era evitable o no el Golpe de Estado, ha enredado a la derecha en sus declaraciones con contradicciones entre sus representantes.
En la mañana de este lunes 11, mientras salía la carta de la UDI, el recientemente electo vicepresidente de RN, el senador José García Ruminot, señaló en Radio Concierto que “era posible evitar el pronunciamiento (golpe) militar”.
El también el senador RN, Manuel José Ossandón, aseguró hace pocos días que el Golpe “no era inevitable” como lo habían afirmado socios de su sector. “El Golpe de Estado es lo peor que puede pasar”, ahondó el senador en conversación con El Mostrador.
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Justificación del golpe
Otra línea de contradicción que se ha erigido al interior de las fuerzas de los partidos de oposición es la justificación al Golpe de Estado.
Las figuras del conglomerado de derecha han intentado “separar” el golpe mismo, con las posteriores violaciones a los derechos humanos, pese a que a partir del mismo 11 de septiembre de 1973 agentes de la dictadura cometieron crímenes contra la población.
Es por esto que al interior de los partidos de Chile Vamos se han encontrado las “dos visiones” sobre el golpe. Por un lado, están los que buscan “desmarcarse” de la figura de Pinochet y de la dictadura, y por otro quienes han apostado por enfocar las responsabilidades en la Unidad Popular y Salvador Allende.
En este disenso entre las fuerzas de la derecha, el Piñerismo tensionó el relato que buscó instalar Chile Vamos.
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Por su parte, el expresidente Sebastián Piñera firmó el acuerdo por la democracia impulsado por el gobierno junto a los otros expresidentes que ejercieron tras el retorno a la democracia.
Además, el ex vocero de gobierno, Jaime Bellolio, colaborador del círculo cercano de Piñera, condenó el Golpe de Estado marcando distancia de sus compañeros de militancia de la UDI.
“Yo entiendo que algunos quieran tratar de reivindicar el Golpe, pero me parece que es un absoluto despropósito, que conociendo lo que ocurrió después… eso simplemente no se puede hacer (…) Si tú te paras el 10 de septiembre de 1973, eso es una cosa que tú puedes decir: sí, se entiende en ese momento. Pero el 10 de septiembre de 2023 no. Porque tú sabes que el Golpe llevó a masivas violaciones a los derechos humanos. Por lo tanto, no se puede justificar el Golpe a continuación”, dijo Bellolio.
