Daniel Andrade, Frente Amplio y el... ¿Marketing Político?
El día 4 de agosto Daniel Andrade Schwarze realizó la siguiente declaración en Chilevisión “lo del Frente Amplio es una imagen que se ha construido con marketing y, algunas cosas yo he sido parte y otras cosas no he sido parte de eso”.
En la literatura especializada se pueden encontrar manuales disciplinarios en el cual se conceptualizan a candidatos como “productos”, votantes como “clientes” y el costo de oportunidad al ir a votar como un “precio”, ahora bien, cabría preguntarse si una coalición con representación de concejales, alcaldes, consejeros regionales, gobernadores, diputados, senadores y el presidente de la república puede ser reducida, o de manera más amable, simplificada, a un concepto que viene del sector privado, cuando lo que se analiza, por su naturaleza política, sobrepasa dicho concepto al tratarse de la “cosa pública”.
Otra cosa relevante de la cual no se puede escapar del análisis es la advertencia que hacía en su libro de 1990 Nicholas J. O’Shaughnessy, quien decía que “concebir la política como un producto es investirla de una banalidad que perjudica el idealismo y el parentesco del ciudadano con el Estado”.
Los académicos Alberto Mayol y Andrés Cabrera en su libro de 2018 donde analizan el nacimiento de esta coalición de partidos establecen lo siguiente:
“La denuncia central del bloque emergente es el fracaso del poder en tanto ejercicio ético y responsable con mandato democrático, ubicando a la sociedad como el objeto de abuso de la élite económica y política. La estructura de esta denuncia es triple: a la derecha política por ser simplemente el brazo político de intereses económicos, al centro por haber pactado con la izquierda para hacer justo lo contrario, defender los ideales e intereses de la derecha, y a la izquierda por ser excesivamente complaciente al momento de aceptar los elementos estructurales de la sociedad neoliberal”.
Lo que llama la atención de este análisis es el rol central del idealismo de una generación impugnadora hacia las anteriores, representadas en ese momento en la Nueva Mayoría, ex Concertación, y Chile Vamos, ex Alianza, en donde el principal punto de discordia es la relación de parentesco entre el ciudadano y el Estado, el cual, debido a la Dictadura Civil-Militar y 30 años de administraciones neoliberales, reducían al ciudadano a un cliente, en el cual, por ejemplo, salud, educación, vivienda, y pensiones dependen casi únicamente de su nivel de ingresos autónomos.
Teniendo lo anteriormente mencionado en cuenta, pareciera que no es el Frente Amplio un producto de Marketing Político, sino lo contrario, precisamente la impugnación del modelo neoliberal que convierte a los ciudadanos factualmente en clientes, no en métricas de análisis electoral, sino en compradores de bienes y servicios. Podría realizarse el análisis del personaje Daniel Andrade Schwarze como un producto de marketing a raíz de su fallida candidatura para constituyente, utilización de demandas ciudadanas para establecer una plataforma de la cual posicionar su candidatura y demás, pero se escapa del propósito de este escrito.
Para cerrar quisiera recordar unos breves pasajes de la canción “La Maza” de Silvio Rodríguez, escrita en 1979 y lanzada en 1982, la cual utiliza la metáfora de la maza y la cantera para elaborar sobre el sinsentido de una vida en la cual no estuviera orientada hacia un propósito.
“¿Qué cosa fuera? / ¿Qué cosa fuera de la maza sin cantera? / Un amasijo de cuerdas y tendones / Un instrumento sin mejores resplandores / Que lucecitas montadas para escena”