Las fricciones en la oposición suman y siguen. Luego de que la UDI tomara la decisión de restarse de la mesa de la reforma previsional si es que el Presidente Boric no sacaba al ministro Giorgio Jackson de su puesto, sus compañeros de coalición eligieron quedarse en las conversaciones, esbozando que un tema no tenía nada que ver el otro. Esta situación crispó aún más los ánimos en Chile Vamos, coalición que ha tenido un par de semanas bastante complejas. 

El robo de 23 computadores y una caja fuerte desde las dependencias del Ministerio de Desarrollo Social puso en la palestra a la figura del ministro Jackson, timonel de dicha cartera. No obstante, desde La Moneda optaron por esperar a ver cómo progresaba la investigación antes de tomar cualquier decisión o medida respecto al secretario de Estado.

Pero lo anterior se produjo completamente a contrapelo de las intenciones de la UDI, quienes mandaron una carta al Presidente Boric dándole un plazo de 48 horas para sacar al ministro, o si no se bajarían de la mesa de pensiones comandada por Jeanette Jara. Finalmente, los gremialistas cumplieron lo prometido y se restaron. No obstante, ni RN ni Evópoli los siguieron y cuestionaron esta definición. 

El secretario general de RN, Diego Schalper, comentó que “no logro entender por qué los adultos mayores de Chile y sus pensiones indignas tienen que ´pagar el pato´. Nosotros cuando nos planteamos a discutir sobre el tema de pensiones no lo hacemos por simpatía o antipatía con un gobierno, lo hacemos porque tenemos la convicción que esto es un tema prioritario en el país si queremos restablecer la confianza con el sistema político”. 

Desde Evópoli, el diputado Jorge Guzmán, apuntó a que “no podemos restarnos del diálogo con el Gobierno para poder avanzar en reformas que son sumamente importantes para Chile. Desde Evópoli no nos vamos a restar a participar en todas las mesas donde podamos construir acuerdos en beneficio del país", puntualizó el parlamentario.

Incluso, desde el Partido Republicano (PR) se desmarcaron de la UDI. El diputado José Meza cuestionó la carta enviada por los gremialistas y aseguró que "la UDI se equivoca profundamente al imputar delitos a Giorgio Jackson sin tener las pruebas necesarias".

Punto de quiebre 

Las fricciones en la oposición comenzaron con la fallida Acusación Constitucional contra el ministro de Educación, Marco Antonio Avila. En las horas previas a la sesión varios parlamentarios de Chile Vamos anunciaron que no apoyarían el libelo acusatorio contra el secretario de Estado. 

Finalmente la acusación no prosperó pero, en contraste, salieron a la luz diversas diferencias al interior de la oposición. Diego Schalper (RN) comentó tras el fracaso que fue "una puñalada al corazón de ChileVamos". Y en paralelo surgieron varias voces dentro del partido, quienes que pedían repensar la alianza o derechamente no continuar teniendo una relación tan cercana con Evópoli, quienes decidieron no impugnar al ministro.

A pesar de esto la situación parecía haberse enfriado luego de una reunión entre las dirigencias de las colectividades, en donde se sinceraron y plantearon forjar el camino para ser una “oposición 2.0". 

Sin embargo esto no duró mucho, ya que la carta de la UDI interrumpió este avance y llevó una vez más la situación a un escenario de tensión, separando nuevamente las aguas en la oposición. Por un lado los gremialistas endurecieron el discurso, en busca de una ofensiva que pudiera asestar un golpe directo al corazón del gobierno y que, a su vez, les permitiera no seguir perdiendo electorado en favor del PR, quienes acogen la parte más “dura” de la derecha que se decepcionó de Chile Vamos. 

Por el otro lado están Evópoli y RN, que viven momentos complejos en su interna. Según algunos parlamentarios justamente el objetivo actual de estas colectividades es ordenar la situación en sus propias casas antes de delinear una estrategia para reformar a la oposición. 

La carta sin autor

Durante la jornada del martes en el Congreso Nacional los diputados UDI comentaron que la carta pudo haber tenido “una mejor redacción”. Esto a consecuencia del anuncio oficialista de que llevarán a la Comisión de Ética y Transparencia a los jefes y subjefe de bancada de la UDI, Guillermo Ramírez y Juan Antonio Coloma por imputar delitos al ministro Jackson sin tener pruebas. 

Sumado a esto aun no se sabe quién fue el encargado de redactar dicha carta, lo que desató una serie de recriminaciones cruzadas. En la UDI además aseguraron que la carta fue coordinada entre los propios diputados y encargada al personal del comité de asesores, por lo tanto la misiva debió ser escrita por el jefe de asesores, quien niega esta versión.