Siempre locuaz, entusiasta y con un cigarrillo en la mano, Vidal hizo un amplio análisis de la actualidad nacional en Manos Libres en El Desconcierto, partiendo por el despliegue de las Fuerzas Armadas en el norte del país para contener la inmigración ilegal, punto en el que recalcó que lo verdaderamente importante -en su opinión-, será el punto de quiebre en las relaciones entre Chile y Bolivia.

“Aquí tenemos un tema enorme: el 80% de los chilenos sostiene que el principal problema es la inseguridad, nunca se había dado un porcentaje tan alto y hay que preguntarse cuáles son las condiciones que han generado. Yo diría que son cuatro: la delincuencia tradicional, pero multiplicada; el narcotráfico y el crimen organizado; la violencia en la Macrozona Sur; y la inmigración ilegal en el norte", dice.

Evolución del delito

"Lo que tenemos, de acuerdo con el alcalde de Colchane (Javier García), es el ingreso de entre 200 y 400 migrantes ilegales al día, y lo que tenemos también es que la tipología de los delitos en el país ha ido cambiando, con más violencia y con prácticas no conocidas hasta ahora en la tradición criminalística de Chile como el secuestro, la amputación de miembros, etc. Frente a ese cuadro y en el marco de la Ley de Infraestructura Crítica -que se demoró una barbaridad porque la ley original estaba pensada en hospitales, recintos educacionales, plantas eléctricas, de gas, etc.-, la ministra Tohá vio en esto la oportunidad de desplegar al Ejército en las regiones de Arica, Iquique y Antofagasta porque es un territorio con una frontera brutalmente larga y grande, y Carabineros, que tiene la misión de controlar esa frontera, es derechamente insuficiente para eso”.

Sin embargo, para el exvocero, no basta con ello.

“Yo espero y creo que este despliegue militar va a ser un elemento de disuasión frente al migrante ilegal, por una parte, pero el tema no son los militares, ¡el tema es Bolivia! porque el militar puede frenar al migrante ilegal, detenerlo, no dejarlo pasar, pero ese ciudadano tiene que dar marcha atrás y al hacerlo, la policía boliviana no lo deja entrar de vuelta, sobre todo si es colombiano, venezolano o haitiano, solo dejar pasar al boliviano de vuelta. Por lo tanto, aquí hay dos componentes de la solución, ¡la presencia militar y la negociación política con el gobierno boliviano para que acepte de regreso al que no es de esa nacionalidad! Es, claramente, una situación en desarrollo, yo creo que la presencia armada que va a materializar la detención de ese flujo va a llevar a que esa negociación (con Bolivia) tenga un punto de quiebre, eso está en curso…porque si entran 300 personas al día y no hay capacidad de devolverlos, ahora vamos a tener la capacidad de hacerlo y va a obligar a Bolivia a aceptarlo. Ahora, en esto el gobierno tiene que ponerse bien rígido porque de lo contrario da lo mismo tener a los militares en la frontera, ¿qué vas a hacer con 300 o 400 ciudadanos al día instalados a 50 metros tuyo que Bolivia no los deja entrar de vuelta? ¿van a vivir ahí? ¡imposible!”

Al gobierno le pongo un 4

“Como soy profesor hasta el día de hoy, al gobierno le pongo un 4 porque hay muchas cosas que espero -que para los tres años que vienen- mejoren”, para luego agregar que “el primer problema que tiene el presidente y que es inédito en Chile es que gobierna con dos coaliciones, nunca había ocurrido eso. Segundo, estas coaliciones sumadas dan ¡10 partidos! ¡Si para nosotros en la Concertación, gobernar con cuatro (partidos políticos) era difícil, me imagino lo que debe ser con 10! Tercero, el triunfo de Boric con el apoyo del Socialismo Democrático y del mundo independiente que permitió ganarle a Kast en segunda vuelta, no tuvo consideraciones en su fuerza original."

"Creo que el Frente Amplio en particular (porque el Partido Comunista es un partido histórico con más de 100 años), pensó que podía hacerlo (gobernar) solito y eso ha llevado a muchos errores en este primer año. Voy a poner dos ejemplos simbólicos, uno es Izkia Siches… ¿qué hay detrás de la cabeza de ella cuando parte a Temucuicui?, esta es la idea que tengo yo (reflexiona), ´nosotros sí podemos´, ´yo puedo entrar a Temucuicui´, ´somos la nueva generación´. Bueno, ¡la recibieron a balazos! Y lo segundo es el descriterio de Jackson cuando dice que tiene superioridad moral sobre el centro izquierda, ¡centro izquierda que les permitió el triunfo en segunda vuelta! Y hay muchas cosas más, por ejemplo, el rechazo original a decretar Estado de Excepción en la Macrozona Sur hasta que finalmente la realidad se impuso, el prejuicio y la tranca con respecto al orden público porque el orden público -en mi opinión-, es de las políticas más progresistas que puede haber, ya que el desorden público y la inseguridad ciudadana afectan al mundo popular y a las capas medias, obviamente que también a los sectores de mayores ingresos, pero estos últimos sectores tienen capacidad para protegerse."

"Lo que quiero decir es que este tema se nos escapó de las manos porque existía y todavía existe ese prejuicio, ese complejo, ¡cuando lo que la ciudadanía necesita de un gobierno es precisamente seguridad! Claro que todo esto requiere de una agenda legislativa y estos muchachos, cuando estaban en la oposición, siempre dijeron que no, pero como tienen buena inspiración, la realidad les ha dicho que la realidad es más compleja…” señaló."

Cosa buenas

Sin embargo y en contrapartida a dichas críticas, el también profesor de historia apuntó a ciertos logros que sí ha obtenido la actual administración: “El 4 que yo pongo, que significa pasar de curso, también tiene cosas buenas, y es que ha habido un programa de transformación sustantiva. El gobierno ya envió su Reforma Tributaria, logró su aprobación en la Comisión de Hacienda con el rechazo de la derecha, lo que era obvio, en unos días más se vota en la Cámara de Diputados y va a pasar al Senado. Por otra parte, (el gobierno) inició su Reforma Previsional, la ministra  sigue avanzando con las 40 horas (laborales), ¡el salario mínimo nunca había crecido tanto como bajo este gobierno! Cuando se empezó con esto estaba en $350 mil pesos, hoy día está en 410 y en mayo, lo más probable, es que salté a 450. Entonces, es un gobierno que ha tenido cierta inexperiencia y voluntarismo, pero que se ha ido ajustando”.

En este punto, Francisco Vidal apunta al inminente cambio de gabinete:

“Creo que el ingreso de Tohá y Uriarte, después del fracaso de septiembre (la derrota del Apruebo), ha ayudado a este reequilibrio, a esta consolidación, y veo que esto se va a manifestar en los próximos días cuando en el nuevo equipo las dos coaliciones estén equitativamente representadas. En definitiva, pienso que, si el cambio se produce antes del 11 de marzo, va a notar en la segunda línea, en las subsecretarías más que en el primer nivel, aunque también haya cambios de ministros.”

Correlación o fracaso

Consultado por la perdurabilidad de la relación entre el Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad, Vidal advirtió que, si no existe conciencia en torno a la correlación de fuerzas, en las próximas elecciones presidenciales puede ganar la extrema derecha:

“Lo que tenemos ahora es una derecha fuerte, la mejor demostración es el 44% de los votos en la segunda vuelta. Es una derecha fuerte que, además, sin tener mayoría en el parlamento puede impedir, sin negociar, el programa de gobierno. Por otro lado, cuenta con los llamados poderes fácticos desplegados, la Confederación de la Producción y el Comercio, la Sofofa, los medios de comunicación escrita, etc. Y cuando tú tienes una derecha de esa magnitud, al frente tienes que lograr la coordinación entre la izquierda y la centro izquierda. En ese sentido, Apruebo Dignidad por sí mismo no gobierna, el Socialismo Democrático por sí mismo tampoco gobierno, solo somos capaces de gobernar con ambas coaliciones coordinadas en torno a un liderazgo, que hoy es Boric”.

“Lo que a mí me tranquiliza es la experiencia comparada… en Portugal ha habido un gobierno largo, donde el Socialismo Democrático está en ´La Moneda ´portuguesa, pero es apoyado por la izquierda en el parlamento; en España hoy gobierna el PSOE, pero también tiene su izquierda con Juntos Podemos. Ese es el modelo que hay que seguir, lo que va a estar en disputa es la hegemonía, que hoy la tiene AD porque el presidente es de AD, pero puede cambiar después como nos ocurrió con la Concertación. ¡Esto no es de gustitos, si tú no tienes conciencia de la correlación de fuerzas vas al fracaso! Ahora, la aspiración del presidente de hace unos meses en Cerro Castillo, diciendo que él espera una sola coalición es algo imposible, porque son dos historias".

"En el momento actual lo que hay que tener es una buena convivencia entre ambas coaliciones, pero no por buena onda, sino por una necesidad estratégica, el FA y el PC ¿cuánto sacaron en primera vuelta? 26 por ciento… a estos muchachos (de AD) les recomiendo que estudien los últimos diez años de Portugal, España y Grecia, en este último país ganó el Syriza, que es como el Frente Amplio de acá, arrasó con el Pasok, que es el partido socialista griego, ¿y quién gobierna ahora ahí? La ultraderecha. O sea, quedan tres años para rectificar los errores, pero si el objetivo del Frente Amplio no es la derecha, sino que es liquidar al Socialismo Democrático, el próximo presidente va a ser (José Antonio) Kast”.

PDG es la derecha populista

Finalmente, consultado por la irrupción de un partido nuevo en la escena política nacional, como lo es el PDG, Francisco Vidal fue tajante en su pronóstico:

“El Partido de la Gente es un partido de derecha, populista y voy a dar un ejemplo. Resulta que ese partido toma decisiones a través de una encuesta digital a sus militantes para competir en la Convención Constituyente, y el 50 por ciento dijo ´vamos solitos´, pero nadie sabe que el 43 por ciento dijo ¡´nooo, vamos acompañados, pero con los Republicanos´! ¿qué tal? Lo que ha pasado en su bancada de diputados es que fueron seis los elegidos, se les pegaron tres que venían de otros lados, ¡y hoy quedan apenas dos diputados ahí! Yo creo que la derecha poderosa, la derecha empresarial se va a comer al Partido de la Gente, y lo vamos a ver incluso en la elección que viene. Como van en tres listas, vamos a ver cuál es el equilibrio que se da en la derecha entre Chile Vamos, la derecha tradicional; los Republicanos, la ultraderecha; y el PDG, le derecha populista”.