La excandidata constituyente Pilar Peña reconoce que el camino para la recolección de las firmas suficientes para formalizarse ante el Servicio Electoral ha sido “más difícil de lo que pensábamos” dada la desafección de la ciudadanía con la política partidista. Pero es optimista respecto a ese objetivo.

En entrevista con Manos Libres en El Desconcierto, Pilar Peña da cuenta de las razones por las cuales Amarillos y Demócratas no pudieron confluir en un solo movimiento pese a las evidentes semejanzas ideológicas de fondo, descartando versiones que apuntan a ciertos desencuentros e, incluso, choques de egos entre referentes de ambas coaliciones.

-¿Por qué no funcionó la invitación de Amarillos a Demócratas?

-Nosotros los invitamos a ser parte de Amarillos en su momento, y hay que recordar que, tanto Ximena Rincón como Matías Walker, estaban en ese tiempo en la Democracia Cristiana y ese partido estaba pasando por una profunda crisis. Nosotros tenemos bastantes similitudes con Demócratas y, por cierto, con algunos de sus dirigentes trayectorias políticas compartidas. Pero en el momento en que nosotros firmamos la escritura inicial con las 100 primeras firmas, que en nuestro caso fueron 140, a fines de septiembre, ellos estaban en la DC aún y había algunos que incluso pensaban que iban a dar, entrecomillas, una suerte de pelea a su interior. Como digo, nosotros los invitamos, pero ellos estaban con sus propios temas políticos… pero sí, hubo una invitación. Yo creo que en el futuro podemos converger en una alianza más amplia del centro, por ahora ambos movimientos somos partidos en formación, pero en ningún caso somos enemigos políticos ni nada por el estilo.

Aquí, un resumen de los temas más destacados de la entrevista:

Coqueteo de Chile Vamos

"Luego del trabajo de la mesa de diálogo, a la que fuimos invitados incluso sin ser partido, porque tenemos un diputado (Andrés Jouannet), después del cuatro de septiembre, nosotros establecimos que no íbamos a llevar candidatos y esa fue una definición fue bien clara desde el principio, otra cosa es lo que haya dicho la prensa que no siempre es muy precisa, pero nosotros establecimos eso es porque estamos realmente dedicados a la formación del partido, que se nos ha tornado algo más difícil de lo que pensábamos. Entonces, en esa lógica, plantearnos hacer una estrategia electoral y, en paralelo, estar en nuestra estrategia de poder juntar las firmas, la verdad es que se nos venía un poco cuesta arriba. Nosotros tenemos un compromiso con la ciudadanía desde que nació Amarillos y es tener una nueva y buena Constitución, pero consideramos que hemos contribuido bastante en ese trabajo. En primer lugar, creemos con convicción que aportamos en el triunfo del Rechazo sustantivamente, y luego con lo que hicimos en la mesa constitucional en que, realmente, fuimos un puente de diálogo entre las fuerzas del Rechazo y del Apruebo que estaban sentadas ahí. Es decir, harto ya hemos contribuido y no estamos en condiciones ahora de llevar candidatos, por lo tanto, este fracaso de conversaciones con la derecha no es así, otra cosa es que nos hayan ofrecido algo, pero nuestra posición fue siempre la misma”.

Convertirse en partido

“A Chile le va a hacer bien que exista el partido Amarillos como una fuerza política del reformismo democrático. En este momento vamos avanzando de acuerdo a lo planificado, pero más lento porque es muy distinto firmar por una causa que firmar por un partido. A mí hay gente que me dice ´pero, cómo no van a poder juntar las firmas si Boric para ser candidato las juntó en tres días!´, pero es muy diferente firmar por una causa que amarrarse con un partido. Como ustedes bien saben los partidos políticos, dentro de la institucionalidad, son los que están peor evaluados y en el contexto de una crisis de confianza brutal que existe, no solamente en Chile, sino que también a nivel mundial, se torna distinto, porque, además, hay una percepción como de lo que significa la antigua militancia… uno se metía en un partido y prácticamente ibas a morir ahí…hay mucho mito también. Sin embargo, estamos ya poniendo foco en aquellas regiones donde estamos mejor, cuando consigamos las firmas ahí, que es más bien en la zona sur, vamos a seguir trabajando en las regiones donde queremos llevar candidatos en el futuro y posicionándonos, pero sí, ¡Amarillos va a existir como partido en el mes de mayo!”.

Factor Cristián Warnken

“Lo que pasa es que Cristián no es un político, otra cosa es que haya tenido opinión política durante toda su trayectoria como intelectual y escritor porque el concepto de los “amarillos” nace a partir de una serie de columnas que él escribió desde el estallido social en adelante, en que relevaba el concepto, decía cosas como que ´no tengan miedo a ser amarillos´, etc., y mucha gente se sintió identificada con eso. A Cristián no se le identifica como un político y eso es una ventaja porque es un líder natural que ha podido encabezar este proyecto con mucha sinceridad, la gente percibe su sensatez, su moderación, como una persona que tiene un amplio conocimiento de la historia del país y, además, él se apoya mucho en nuestro Comité Político que tiene a personas con vasta experiencia en la política, entonces, ese complemento ha sido bueno. Ahora, si le genera anticuerpos a la izquierda…yo creo que todos los amarillos les generamos lo mismo (sonríe)… somos un grupo que le incomodamos a muchos y de eso nos dimos cuenta. O sea, a nosotros muchas veces nos han tratado de lo peor, a mí hasta una vez me amenazaron de muerte, a Cristián le hicieron una funa en su casa bien terrible estando su hijo ahí, en fin. No somos un grupo que les gustemos a muchas personas, a muchas les incomodamos, hay como tres hitos en que a la gente más de izquierda les sacamos roncha. Primero que todo cuando en febrero del año pasado salió el primer manifiesto, que firmamos 74 personas, respecto del diálogo que se estaba dando en la Convención Constituyente, que era una cuestión de locos y nadie estaba diciendo absolutamente nada, ahí recibimos los primeros golpes… me acuerdo de la señora Marta Lagos diciendo ´y quiénes son este grupúsculo? ´, y yo le decía ´este grupúsculo en tres días ya tiene seis mil adherentes! ´. Ahí fue el primer remezón y nosotros aguantando firmes las patadas”. Y luego Peña prosiguió “después, cuando optamos por el Rechazo, eso fue algo que nos costó bastante, hubo una deliberación importante dentro de los amarillos…fue (difícil) ponernos en la vereda del Rechazo, y después recibimos hartos golpes cuando en la mesa de diálogo constitucional nosotros nos fuimos a una posición bastante extrema que fue decir ´ ¿saben qué? Esto lo tienen que redactar expertos´. Entonces, los amarillos estamos acostumbrados a incomodarles a algunas personas, pero tenemos muchas convicciones y realmente representamos a mucha gente. Y les diría que Amarillos se conforma, la mitad con personas que han tenido una trayectoria política, hay mucho exdemócratacristiano, ex socialismo democrático, algunos que vienen de la centro derecha, pero hay mucha gente que jamás en su vida militó en un partido y eso se da porque sintieron un remezón importante y dijeron ´¡aquí hay un grupo que me representa y algo hay que hacer, ya no se puede seguir sin tener posición respecto a algunas cosas!, ¡basta de seguir entregándole las herramientas a las mismas personas!´, ¡y eso yo lo veo todos los días!”.

Centro o PDG

"A mí me cuesta mucho descifrar al PDG, hay personas con las que tú conversas y te dicen ´sí, el Partido de la Gente es esto y esto, este es el perfil, etc.´, pero para mí no es tan fácil leerlos. Entonces, en ese contexto nosotros no hemos tenido conversaciones más formales con ellos. Si bien conversamos con todo el mundo, tenemos buena comunicación con todos, en realidad estamos más preocupados de formar nuestro propio y cada día más por las dificultades que comentaba antes. Por lo tanto, yo no me atrevería a decir si vamos a tener una alianza con el Partido de la Gente porque no logro descifrarlos y creo que, en general, a los amarillos les pasa un poco eso también. Y respecto a un bloque de centro, siento que hay que ir viendo como se va a ir desarrollando el escenario político durante este año porque lo que ha pasado, por ejemplo, con las dos listas (oficialistas para el nuevo proceso constituyente), te deja una puerta abierta a algo que pueda pasar ahí muy gatillante y evidente respecto a las dos almas que tiene el gobierno. Por lo tanto, yo creo que hay que estar muy expectantes sobre lo que pueda ocurrir en términos de coaliciones políticas”.