Cumbre Mundial de Biodiversidad: Chile al debe con sus compromisos
Entre el 9 al 15 de diciembre de 2022 se realizó en Montreal, Canadá, la 15° Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica (CDB), que tiene 196 países miembros, entre ellos Chile.
Esta convención fue firmada en la Cumbre de Medio Ambiente en Río de Janeiro en 1992. Sus objetivos son la conservación de la diversidad biológica, el uso sustentable de sus componentes y la distribución justa y equitativa de los beneficios derivados del uso de recursos genéticos. Este convenio fue acordado debido a la preocupación de los países por la acelerada pérdida de biodiversidad a nivel mundial. El reciente informe Planeta Vivo 2022, de WWF, indica que la situación ha empeorado y que la abundancia poblacional mundial de mamíferos, reptiles, aves, peces y anfibios cayó en promedio un 69% entre 1970 y 2018. América Latina y el Caribe, una de las regiones más ricas en biodiversidad, experimentó los mayores declives de vertebrados, con una disminución de 94% en las poblaciones monitoreadas.
El informe además señala que el planeta enfrenta una doble crisis inducida por el ser humano: la pérdida de biodiversidad y la crisis climática, ambas amenazan la supervivencia y el bienestar de la humanidad, y las soluciones a ambas crisis están entrelazadas. Una crisis no se puede solucionar sin la otra.
En esta Cumbre N°15 de la Biodiversidad los temas prioritarios a tratar fueron establecer un Marco Global para la Biodiversidad con nuevas metas para frenar la pérdida de biodiversidad global en la próxima década. Entre ellas se propone conservar de manera efectiva al menos 30% de la tierra y 30% del mar para el año 2030, lo que se ha llamado 30x30, como asimismo prevenir la extinción de especies, recuperar la vida silvestre y mantener y restaurar sus hábitats, entre otros.
La recuperación de la biodiversidad es esencial para el combate al cambio climático mundial, por lo que la COP15 intentara acelerar las soluciones basadas en la naturaleza como parte de las metas del Marco Global para la Biodiversidad.
Chile, como país miembro de la Convención sobre la Diversidad Biológica, aún no tiene una ley nacional de conservación de la biodiversidad que le permita implementar los compromisos adquiridos. Se encuentra en el Congreso hace 8 años el Proyecto de Ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas(SBAP). Sus objetivos son: 1) crear una institución pública, el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, radicado en el Ministerio de Medio Ambiente, con lo cual se completa la institucionalidad ambiental del país; 2) establecer regulaciones nacionales para la conservación de la biodiversidad; y 3) crear un Sistema Nacional de Áreas Protegidas públicas y privadas, terrestres, marinas y acuáticas. El actual Sistema Nacional de Áreas Protegidas del Estado (SNASPE), radicado en CONAF, sería trasladado al Servicio de Biodiversidad.
Se hace urgente poder promulgar esta ley que está en su segundo trámite en la Cámara de Diputados. La biodiversidad de Chile es muy valiosa pues, por ser el país una isla ecológica, la mayoría de sus especies son únicas en el mundo. Lamentablemente, 6 de cada 10 especies están amenazadas (en peligro de extinción, en peligro o vulnerables). Asimismo, las áreas protegidas están siendo deterioradas por actividades industriales en su interior. En un estudio de 2011, de 173 áreas estudiadas de diversas categorías (Parque Nacional, Reserva Forestal, Reserva Nacional, Monumento Natural, Santuario de la Naturaleza, Reserva de la Biosfera, sitio Ramsar, Área Marina y Costera Protegida, Reserva Marina y Parque Marino), en 73 de ellas (42%) se ha desarrollado o ha habido intenciones de desarrollar actividades industriales en su interior (minería, proyectos hidroeléctricos, concesión eléctrica, otorgamiento de derechos de agua, gasoductos, entre otros).
El proyecto de ley, en su paso por la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara, cerró la puerta a dichas actividades industriales dentro de áreas protegidas. Sin embargo, en la Comisión de Agricultura este avance se revirtió pues primaron los intereses económicos y el texto permite concesiones industriales en áreas protegidas, como por ejemplo para salmonicultura o minería.
Sabemos que Chile es un país muy vulnerable al cambio climático y por lo tanto requiere de conservar su valiosa naturaleza para poder combatir la mega sequía que enfrentamos hace una década.
Chile se comprometió ante la Convención de Cambio Climático en Egipto, en noviembre de 2022, a aumentar la superficie de áreas protegidas en un millón de hectáreas y a que todas las áreas públicas cuenten con un plan de manejo. Para poder cumplir este compromiso y poder implementar las nuevas metas de la COP 15 de la Convención sobre la Diversidad Biológica, necesitamos promulgar la Ley de Biodiversidad.