Sofía González, delegada presidencial de Valparaíso: “El tren es una demanda social”
Cuando estudiaba fonoaudiología, la actual delegada presidencial de Valparaíso, Sofía González Cortés (PC), tenía que viajar diariamente desde Quillota hasta el puerto. Todos los días, desde su casa hasta la universidad, atravesaba al menos cinco ciudades. En esos largos trayectos, reconoce, cultivó su motivación para entrar en política, porque tomó conciencia “de lo que significa vivir en comunas que no están en el área metropolitana”.
Fue dirigenta estudiantil y ahora es la segunda mujer en ocupar el cargo de máxima representación del Ejecutivo en la zona. En conversación con El Desconcierto profundiza en recoger las reivindicaciones feministas, ecológicas y territoriales de una región que ha sufrido el "abandono" institucional.
-¿Sientes que tu experiencia te ha preparado para este cargo?
Absolutamente. Creo que la experiencia, no solo de lo profesional, desde el área de la fonoaudiología, sino que también experiencia dentro de los movimientos sociales, dentro del movimiento feminista, medioambiental que se levanta también desde la provincia de Quillota, y en particular dentro de la comuna, nos van integrando una temperatura de lo que se ve en el territorio, de las demandas y necesidades que hoy día estamos llamadas y llamados a responder, a encausar el camino, abriendo ventanas y que son parte de los compromisos que hemos asumido como gobierno.
Creo que eso marca la diferencia al momento de ser parte de estos cargos de responsabilidad del gobierno, porque podemos tener la mirada tanto desde lo técnico, lo político, pero también desde la violencia vital de nuestro territorio, y también desde las desigualdades que se viven.
-¿Y qué evaluación haces de los primeros meses en la delegación de Valparaíso?
Durante los primeros meses nos hemos tenido que hacer cargo, bastante, de un abandono que había en materia de institucionalidad aquí en la Región de Valparaíso, lo que se ve reflejado, directamente, en seguridad, transporte y crisis hídrica, que han sido las principales demandas que se levantan desde la ciudadanía en nuestro territorio. En ese sentido, lo primero que hicimos fue iniciar una gira en el territorio, con las seremías, en conversación con los distintos alcaldes y alcaldesas, organizaciones sociales de la región, para que juntos pudiésemos levantar una estrategia de trabajo en distintas materias. Una de ellas, es la estrategia de seguridad para la Región de Valparaíso, que es una de mis labores más importantes, cuya construcción y articulación deben tener un carácter público-privado, que tenga un enfoque de derecho, territorial, de género, que nos permita mejorar la calidad de vida de todas y todos los vecinos de la región.
Esta demanda es una necesidad, y así lo asumimos, desde una perspectiva de colaboración y encuentro con cada una de quienes hoy día estamos haciendo parte de este proceso que vivimos en el país. Lo elegimos bajo el lema “la seguridad es un derecho”, porque así lo asumimos. ¿De qué se trata? De poder complementar el trabajo que se desarrolla desde la delegación, con experiencia y estrategias que ya estén desarrolladas en los territorios, en las diversas comunas. Este trabajo no está en cero, son los alcaldes y alcaldesas, las organizaciones sociales, las comunidades que han llevado adelante distintas estrategias, logrando generar un banco de buenas prácticas que debe estar articulado, y que creemos es la forma de dar respuesta a esta problemática tan transversal, pero que necesariamente tienen que abrir su mirada, no solamente con respecto al abordaje directo de lo que es la delincuencia, la violencia que vivimos en nuestra región, sino que también desde la perspectiva de la recuperación del espacio público, la promoción del buen vivir, de la reinserción social, entre otras materias.
Esto lo hemos ido trabajando generando diálogos multisectoriales, desde la delegación, con el Ministerio Público, las policías, Gendarmería, parlamentarios, el Gobierno Regional, nuestros propios alcaldes y alcaldesas para que podamos sistematizar y ponerlo a disposición del buen vivir de todos y todas.
-Sobre ese punto, ¿de qué forma de va a abordar la violencia y delincuencia en la zona? Ya que se han reunido con autoridades y policías para tratar el tema...
Primero lo que planteamos fue esta estrategia de seguridad para Valparaíso, que es una mirada de largo aliento, porque tenemos que lograr responder a lo urgente y a lo inmediato, que es la necesidad de mayor seguridad en nuestras calles, y también hacerlo con una mirada de largo plazo. Sabemos que el aumento de las violencias y las delincuencias también tiene un fondo bastante complejo, que tiene que ver con la desigualdad. En lo inmediato, hemos logrado coordinar, por ejemplo, específicamente con ciertos sectores como son las universidades, el eje central de Brasil, donde hemos trabajado en conjunto con las policías y los centros de estudiantes, los colegios, las comunidades escolares, a propósito de lo que estamos viviendo en materia de violencia tanto en la calle como al interior de nuestros establecimientos educacionales.
Por otro lado, también hemos logrado llevar adelante una mesa de seguridad con conductores de microbuses del Gran Valparaíso, donde hemos hecho seguimiento para identificar puntos críticos, mejorar procesos de denuncia, levantar también campañas para articular con los distintos estamentos que deben hacerse parte. También hemos incorporado una mesa de seguridad de transporte de cargas para el eje La Pólvora, comprendiendo lo importante que es esto para nuestra región. Hemos priorizado territorios con fuerzas de tarea, por ejemplo, en la subida Cumming, donde hemos trabajado con organizaciones sociales, la Mesa Territorial de Seguridad de Placilla, y un sinnúmero de organizaciones que son parte de la estas instancias de conversación y definición de estrategia.
Además hemos querido poner un énfasis particular también a la seguridad con enfoque de género. Sabemos que nuestra región es considerada zona roja para la comunidad LGBTIQ+, y por tanto es necesario que también podamos fortalecer programas, por ejemplo, de denuncias, que estén orientados hacia ellos, y que tengan una expresión que les permita sentirse seguras, seguros y segures al momento de poder hacerlo. Todo esto busca coordinar a la organización social, a los gobiernos locales, al gobierno regional, con las policías, tanto Carabineros como la PDI. En particular, eso nos ha permitido abrir la mirada respecto de la importancia de recuperar los espacios públicos, para que efectivamente podamos recuperar nuestras calles y barios para los niños, las niñas, las mujeres adultas y adultas mayores, quienes son las que sienten mayores grados de inseguridad al momento de caminar por las calles.
Por otro lado, hay una bajada concreta por el comercio ilícito y los espacios públicos. Estamos trabajando en una fuerza de tarea que nos permitan llevar a cabo mesas de trabajo particularmente en relación a la persecución penal del comercio ilícito, de la fiscalización regional, y por otro lado ser un aporte en regularizar y dar una alternativa de reconversión laboral para quienes son obligados y obligadas a estar en la calle, porque entendemos que muchas veces se transforma en una necesidad. Eso se incorpora a la bajada regional de control de armas, estamos trabajando en una estrategia junto a Carabineros y la PDI para que podamos, efectivamente, disminuir el poder de fuego que tenemos en nuestra región, que es muy preocupante a propósito del aumento de estos crímenes de alta connotación social, que son altamente violentos.
-¿Cómo se trabajará desde la delegación para promover la descentralización?
Como lo planteaba nuestro Presidente Gabriel Boric, para avanzar en este proceso de descentralización, ya se ha comenzado, liderado por la Subdere, y los gobernadores regionales, el traspaso de competencias a los gobiernos regionales. Estos primeros meses de gobierno se ha definido al menos seis que están en la evaluación interministerial, evaluación que ha sido solicitada por los gobernadores, pero además estamos trabajando con mucha intensidad en conjunto con la Dipres y Contraloría, para que ese traspaso incorpore también la facilitación de la ejecución presupuestaria. Es necesario traspasar estas competencias, que además cuenten con todos los mecanismos necesarios para que puedan ser llevados a cabo de manera efectiva, dinámica, y lo más rápido posible.
Esto es algo que hemos planteado desde el principio de nuestra llegada a la delegación, nos hemos puesto a disposición del trabajo del gobierno regional, y del gobernador Rodrigo Mundaca, y así lo hemos hecho saber.
-¿Cómo se hará frente a la crisis hídrica en la zona? ¿Tienen alguna postura o medida definida?
Es importante que no olvidemos que el problema que vivimos es consecuencia de un modelo de gestión de agua que se nos impuso, durante la dictadura, el cual se basa en establecer un mercado. El agua es algo que se tranza, como algo que puedo comprar, y que incluso ha separado al agua de la tierra, una discusión que es bastante larga de abordar. Sin embargo, hoy creemos que es muy importante que, como Estado y gobierno, podamos dotar de mejores herramientas de fiscalización y de planificación en tanto a cómo se va a gobernar el agua, en nuestra región y en nuestro país.
La crisis hídrica no solo afecta a la comuna de Petorca, La Ligua, Cabildo, que son emblemas del mal uso que se ha dado, sino que ya está en muchas comunas del borde costero, que también están siendo afectadas por esta situación. Por ello, creemos que debemos trabajar en conjunto con los municipios, los APR, los vecinos y vecinas de esta zona, para generar las medidas que nos permitan afrontar de mejor manera la sequía y la escasez hídrica. Para eso se están haciendo evaluaciones con los distintos ministerios, para tener distintas propuestas. Por ejemplo, se ha hablado de las plantas desalinizadoras, y de una redistribución del agua, hacia dónde van, cuándo van y para qué van. Contamos con un nuevo Código de Aguas que nos va a permitir tener mayores posibilidades de buscar nuevas alternativas.
Además, estamos generando mesas de conversación con las distintas APR para que puedan levantar cuáles son las necesidades respecto de obras, por ejemplo, que están al debe, estamos muy atrasados en llevar a delante, y será parte de nuestra gestión abrir esos caminos y dinamizar esas soluciones.
“El tren es una demanda social”
El miércoles pasado, el Presidente Gabriel Boric entregó su primera Cuenta Pública, haciendo énfasis en una serie de anuncios destinados a solucionar las problemáticas más urgentes del país. Una de las propuestas más aplaudidas en el Congreso Nacional, y comentadas a través de las redes sociales, fue la de impulsar el Plan Nacional de Desarrollo Ferroviario, que plantea una ambiciosa meta: un tren que una a Valparaíso y Santiago.
-¿Cuáles hitos o anuncios destacas de la Cuenta Pública?
A propósito de la realidad de nuestra región, primero uno de los hitos es la promulgación de la Ley Marco de Cambio Climático. Tenemos una serie de conflictos medioambientales que están en desarrollo y que creemos esta ley nos puede ayudar a transformar la forma en que vemos el desarrollo de nuestro país, que nos podamos enfocar en una acción climática diferente, y que nos permita ocuparnos de quienes viven en las mal llamadas ‘zonas de sacrificio’. No pueden seguir existiendo ‘zonas de sacrificio’ en nuestra región y en nuestro país, por tanto la promulgación de esta ley nos puede abrir muchas oportunidades para poder avanzar en esta materia.
Otro de los hitos de la Cuenta que planteó nuestro Presidente es el tren de Valparaíso a Santiago. Estamos muy contentos por este anuncio, ya que la región tiene una historia ferroviaria muy arraigada en diversos sectores, y por ello esperamos que se pueda concretar este anhelado proyecto, al igual que la extensión del servicio de Metro hacia las zonas interiores como Calera y Quillota, como la zona de Aconcagua, ya que hoy día el tren es un medio de transporte fundamental para la región. En este sentido, creemos que es muy importante, no solamente anunciarlo, nos hemos comprometido a trabajar por esto para que sea posible lo antes posible.
-¿Y crees que será factible la idea? Porque el ministro de Transportes mencionó que es un proyecto “difícil” de realizar por la pendiente en la zona
Es parte de lo que los mismos equipos van a tener que ver, al realizar los estudios. Creo que lo importante es reafirmar el compromiso y la convicción de que es necesario. En ese sentido, sabemos que son estudios que no son de rápida resolución, son de largo alcance, pero que necesariamente tenemos que fortalecer para dar respuestas a la necesidad de, por ejemplo, conectividad que tenemos en toda la región.
-También habló de la necesidad que haya rentabilidad social para la idea ¿Se unirán fuerzas para que el proyecto logre ser competitivo y pertinente?
Absolutamente. Creo que, hoy día, el tren es una demanda social y una demanda ciudadana que nosotros y nosotras estamos disponibles a atender.
-Por otro lado, te convertiste en la segunda mujer en ocupar el cargo de máxima representatividad del Ejecutivo en Valparaíso, ¿Cómo recibes esta responsabilidad?
Creo que eso da cuenta del sello con perspectiva de género de nuestro gobierno. Hoy día las mujeres hemos ido asumiendo mayores responsabilidades, mayores espacios de visibilidad, porque siempre hemos estado en la organización social, en la organización política, en la organización pública, lo que pasa es que hoy día nos toca asumir estos cargos de representación de gobierno, de representación pública, y por supuesto lo asumo con mucho orgullo. No solamente desde lo personal, sino por todas aquellas mujeres que, históricamente, han luchado porque estos espacios de representación se nos sean también permitidos.
Digo permitidos porque, efectivamente, vivimos en una sociedad donde eso no es tan fácil, o no era tan fácil. Hoy día creemos que el hecho de plantearnos como gobierno feminista tiene que ver también con aquello, porque cuando nosotras utilizamos este espacio también podemos entregar distintas miradas con respecto a la política pública, y a su ejecución concreta, con relación a nosotras las mujeres y las disidencias sexuales.