La guía diseñada para los municipios también puede ser usada por miembros de la sociedad civil que trabajen en la temática.
Desde el
Ministerio de Medio Ambiente destacaron que la delimitación de humedales es un proceso científico de observación, recolección y sistematización de evidencias sobre la existencia de este ecosistema, que considera la definición de humedal como “
todas aquellas extensiones de marismas, pantanos y turberas, o superficies cubiertas de aguas, sean éstas de régimen natural o artificial, permanentes o temporales, estancadas o corrientes, dulces, salobres o saladas, incluidas las extensiones de agua marina, cuya profundidad en marea baja no exceda los seis metros y que se encuentren total o parcialmente dentro del límite urbano”. Para hacer el trabajo de delimitación se utilizan
tres pasos: 1) el trabajo previo, en gabinete, de delimitación a partir de información preexistente o procesamiento de información mediante sensores remotos; 2) una fase de campo, para la aplicación en terreno de los criterios que definen un humedal; y 3) una fase posterior para el desarrollo de la cartografía de los límites del humedal estudiado. Además la guía considera capítulos anexos con fichas de apoyo para el levantamiento de información en terreno y una sección de antecedentes complementarios.
“Esta guía es muy importante para avanzar en la ley de Humedales Urbanos y dejar claros los pasos de delimitación, especialmente a los municipios. Los humedales cumplen importantes funciones que resultan en servicios ambientales en beneficio para el ser humano, entre las que destacan: servir de hábitat para fauna acuática, terrestre y de aves; provisión de agua y regulación de los procesos ecológicos esenciales para la vida, como los ciclos hidrológicos y de carbono; además de servir de biombo para mitigar áreas de riesgos naturales, proclives a inundaciones, eventos aluvionales, y tsunamis”
, indicó
Daniela Manuschevich, jefa de la división de Biodiversidad y Áreas Protegidas del Ministerio del Medio Ambiente.