Gaby Rivera, presidenta de la AFDD: "Los DD.HH. deben ser la columna vertebral de Chile"
Al igual que su antecesora, Gaby Rivera es militante comunista, y en su adn también registra las huellas de un pasado imborrable que aún perdura en la historia de cada uno de los miembros de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
Hija de Juan Luis Rivera Matus, detenido en noviembre de 1975, asume en un momento en que la discusión sobre los Derechos Humanos posterior al estallido social, se ha tomado la agenda en el Congreso y también en la Convención Constitucional. Partidaria de liberar a los presos y presas políticas de la revuelta, asegura que muchos están detenidos aún sin comprobarse su eventual participación en los hechos. Y lo peor, agrega, es que "siguen existiendo los mismos montajes que en los tiempos de la dictadura".
-¿Qué te parece el nombramiento de alguien como Haydee Oberreuter en la Subsecretaría de Derechos Humanos?
Primero que todo saludo el nombramiento de Haydee Oberreuter, una compañera que conoce el tema de Derechos Humanos, ella siempre ha estado en esta larga lucha en contra de la impunidad. La conozco en calidad de dirigenta de una organización como son los exprisioneros y prisioneras políticas. Como AFDD (Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos) vamos a trabajar en conjunto con todas las organizaciones que tengan la voluntad política para hacer los cambios profundos en el tema, ya han pasado casi 50 años y aún no resolvemos los crímenes de lesa humanidad que cometió la dictadura, con nuestros familiares y que afectan a la sociedad en su conjunto. Nuestro rol como organización siempre será exigir verdad y justicia, como lo hemos hecho con todos los gobiernos desde el Presidente Aylwin hasta hoy. Tenemos que avanzar, sí o sí, en verdad, justicia y reparación para que de verdad podamos garantizar el nunca más.
- ¿En qué puede aportar hoy, a la construcción de un nuevo Chile, una organización como la AFDD?
Creo y estoy convencida que hoy, más que nunca, tenemos la responsabilidad de todo un país. No es sólo una tarea de la AFDD ni las organizaciones de DDHH asegurar el “nunca más”. La responsabilidad de todos y todas es garantizar que esta Nueva Constitución que estamos escribiendo de puño y letra del pueblo -porque así lo exigió un 18 de octubre y que dolorosamente se escribe con la sangre de los que cayeron en la revuelta popular- deje plenamente garantizado el irrestricto respeto a los Derechos Humanos, y que éstos sean la columna vertebral del nuevo Chile que estamos construyendo y que le vamos a legar a las nuevas generaciones.
- ¿Crees que en el gobierno de Gabriel Boric la AFDD debiera tener un rol más protagónico en materias de Derechos Humanos que en los últimos mandatos?
Esperamos que así sea. Además, el Presidente Gabriel Boric en sus discursos así lo ha planteado, por lo tanto, nuestro rol siempre será vigilar que así sea. Los Derechos Humanos son trasversales y siempre la AFDD los ha puesto en primer lugar. El derecho a la educación, salud, vivienda, a la felicidad, son todos Derechos Humanos, y nuestra lucha ha sido siempre por esos derechos que son la esencia de una sociedad más justa y humana. Pero, sin duda, lo más importante es que se juzgue y se haga justicia, y lleguemos a la verdad completa cada uno de nuestros familiares, eso es lo que nos tiene de pie y firmemente para asegurar el nunca más.
- ¿Qué opina sobre la amnistía para los presos del estallido social?
Liberar a los presos y presas políticas es un deber de nuestra sociedad, la libertad es un derecho que tienen todos los presos y presas de la revuelta popular, por su entrega para cambiar el modelo cruel e injusto que impera en nuestro país. Además, todos sus procesos han sido irregulares e injustos, estando aún detenidos sin comprobarse nada y lo peor es que siguen existiendo los mismos montajes que en los tiempos de la dictadura, montajes que hicieron con nuestros familiares detenidos desaparecidos y los ejecutados políticos. ¡De eso nosotras sí sabemos porque lo vivimos y lo denunciamos durante décadas, por lo tanto, estamos absolutamente de acuerdo con el indulto para ellos y ellas ahora!
- La senadora Campillai casi llega a un acuerdo con el senador Manuel José Ossandón para que votara a favor de la amnistía, pero éste pedía que Fabiola apoyara un indulto a los reos de Punta Peuco. ¿Qué le parece esta solicitud del parlamentario de derecha?
Una vergüenza, una inmoralidad. Primero que todo, saludo la actitud de la senadora Campillai al decir que no somos moneda de cambio. Los DDHH no se transan, los asesinos de nuestros familiares no tienen derecho alguno a ningún indulto, los delitos de lesa humanidad son imprescriptibles e inamnistiables, y eso está ratificado en todos los tratados internacionales que Chile ha firmado. No me extraña, en todo caso, de un senador de derecha.
[Te puede interesar] Lorena Pizarro y su nuevo rol en el Congreso: "Daré cara ante la indolencia"
- ¿Está de acuerdo con las medidas que el gobierno ha tomado en materias de Seguridad Pública en la Macrozona Sur, la crisis migratoria en el norte y las manifestaciones en la denominada Plaza de la Dignidad?
Sí, de acuerdo, es lo que tiene que hacer, estar dispuesto a conversar con todas las partes involucradas de un conflicto que ya tiene muchos años y al que no se le ha dado una solución de parte del Estado.
Respecto al derecho a manifestarse, lo claro es que no se pueden seguir violando los Derechos Humanos, tenemos el derecho a protestar y defender nuestros derechos. El gobierno tiene que limpiar y sacar de sus filas a los que siguen violentando a un pueblo y a los jóvenes que hoy ya perdieron el miedo. La clave es, de una vez por todas, reformar las Fuerzas Armadas.
- ¿Qué solución propondría a la problemática de cómo desplegar a las fuerzas de orden sin caer en lo mismo que hacía la derecha?
La solución no pasa por nuestra organización, es una responsabilidad gubernamental, lo que el gobierno tiene que hacer es no permitir que se sigan violando los Derechos Humanos. Lo central es la reforma a las Fuerzas Armadas y a Carabineros, cuando eso ocurra, cuando de verdad se haga una limpieza profunda, los Derechos Humanos serán respetados. No podemos seguir permitiendo que Carabineros siga reprimiendo, violentando, sacando los ojos a los chilenos y chilenas.
- Si se logra avanzar en una nueva Constitución, ¿qué otro resabio de la dictadura quedaría por terminar?
Primero que todo, estamos trabajando y apoyando a la constituyente para que una nueva Constitución nazca el 4 de septiembre. Recuerden que esta Constitución, creada en dictadura, fue como anillo al dedo para que los violadores de Derechos Humanos se mantuvieran en la impunidad y nunca lográramos encontrar la verdad ni hacer justicia por nuestros familiares. Queda mucho por hacer aún. Eliminar el secreto de 50 años para los asesinos, por ejemplo, como también el negacionismo que aún impera en sus filas, porque hay un sector de la sociedad chilena que de manera inaceptable sigue negando el horror, la brutalidad y la crueldad que se instaló en nuestro país el 11 de septiembre de 1973.
Chile le debe a nuestros familiares una historia verdadera, que sea visible, como por ejemplo que sus calles lleven sus nombres, que las plazas lleven sus nombres, que la historia se haga carne desde lo más profundo.
- ¿Cómo ha visto el trabajo de la Convención en materia de Derechos Humanos hasta ahora?
Para nosotras como AFDD, los DDHH deben ser el eje. Estamos trabajando y presentamos nuestra propuesta para que quede consagrado en la nueva Constitución la defensa de los Derechos Humanos. Por esto saludamos, admiramos y defendemos el trabajo que han hecho los convencionales que se han jugado por un nueva Constitución, en medio de un permanente hostigamiento y descrédito que han impulsado los poderes fácticos, a través de los medios de comunicación pertenecientes a los grupos de poder que controlan Chile. Este proceso constituyente fue pedido a gritos por el pueblo de Chile, en todas las plazas y calles de nuestro país. ¡La nueva Constitución se defiende!
- ¿Qué le parece la aprobación de la sanción al negacionismo y la defensa de la derecha porque afectaría “su derecho a pensar distinto”?
El derecho a pensar distinto, por supuesto que es un derecho, pero ese no es el tema en discusión. El negacionismo es desconocer, hacer apología a la dictadura, levantar discursos de odio y negar que en Chile sí hubo ejecutados, desaparecidos, torturados y, lo peor, que se han seguido cometiendo violaciones a los DDHH, como sucedió en la revuelta popular de 2019. Nuestra posición, por lo tanto, es que se debe sancionar a los que niegan la historia. Por verdad, por justicia, por memoria, y por reparación, llegaremos a la no repetición. La agrupación siempre dijo que mientras no estén las voluntades políticas en los gobiernos -en los gobiernos anteriores no la hubo- no podremos decir que el "nunca más" esté asegurado y no se vuelvan a repetir los crímenes atroces en dictadura y democracia.