Cuando faltan exactos cuatro días para que un jurado integrado por nueve personas entregue su veredicto en el caso de la desaparición y presunto homicidio de Narumi Kurosaki, ilícitos que la justicia francesa le atribuye al chileno Nicolás Zepeda, varias son las declaraciones del acusado que resuenan por lo inesperadas que han resultado.

Entre ellas, destaca la explicación que dio el inculpado cuando le preguntaron qué hizo con los envases de los preservativos que usó la última vez que se encontró con la joven japonesa en su residencia universitaria en Besanzón, oportunidad en la que admitió tuvieron dos encuentros de carácter sexual.

Fue entonces cuando Zepeda dijo se los había llevado porque la tradición japonesa indica que no hay que dejar basura en las casas cuando se visita a alguien. La explicación no satisfizo a su interlocutor y, de hecho, este viernes su inesperada versión fue contrastada con la hermana de Narumi, presente en la sala junto a su madre, quien lo desmintió aseverando que cuando la gente en su país tiene algo para botar a la basura, simplemente lo hace.

Otra de las respuestas bastante insólitas que entregó Zepeda esta semana, tiene que ver con el bidón de cinco litros de combustible para estufas que compró en Francia, previo a su encuentro con Kurosaki en diciembre de 2016, justamente cuando desapareció. Consultado por la decisión de adquirirlo, dijo que lo hizo porque lo había encontrado "en oferta".

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"Me quedé en el auto leyendo, viendo series", fue otra de las intervenciones que llamaron la atención de los presentes en la sala del juicio, donde desde la semana pasada se han congregado todas las partes involucradas en el caso. La declaración de Zepeda responde a la pregunta alusiva a la razón que tuvo para viajar de Chile a Besanzón, para luego permanecer cuatro días en el auto que arrendó en Francia en el estacionamiento de la residencia universitaria de Kurosaki. ¿Viajó a Europa para estar cuatro días encerrado en un auto?

Sobre este mismo episodio, hubo otra declaración inesperada de Zepeda en el juicio. Específicamente esta tuvo que ver su relato de su encuentro con Narumi en su residencia. De acuerdo a su versión de los hechos, cuando estaba en el auto, en medio de esta dilatada permanencia en él, fue ella quien lo abordó tras "encontrarlo" casualmente en el lugar. Y lo hizo tocándole el vidrio del auto donde estaba. Según Nicolás, esta situación fue absolutamente casual.

Paralelamente, en otro momento del mediático juicio, al inculpado le preguntaron por qué compró 18 kilos de ropa en Francia, consulta que respondió asegurando que a su regreso a Chile tenía una entrevista de trabajo y que en nuestro país no encuentra su talla. Llamativo considerando que su contextura es normal y él mide un metro 75 centímetros.

Finalmente, y entre muchos otros detalles que se han expuesto en el juicio, le consultaron al chileno la razón que lo llevó a adquirir, junto con un bidón de combustible, fósforos. Inesperadamente, Zepeda dijo que los había comprado para adornar la cocina de su departamento.