La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó con 58 votos a favor, 44 en contra, y ocho abstenciones, un proyecto  presentado por la UDI para que el Ejecutivo no pueda negociar o mantener algún diálogo con "grupos terroristas que operan en el sur del país", apuntando principalmente a la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM).

Luego de las declaraciones de la exjefa de campaña de Gabriel Boric, Izkia Siches, manifestando estar disponible para dialogar con "todos los actores, incluso con la CAM", para resolver el conflicto territorial en la Región de La Araucanía, los diputados UDI, Juan Antonio Coloma y Sergio Bobadilla, lideraron un oficio para que el "gobierno del Presidente Piñera y a los sucesivos gobiernos que establezcan una política clara y nítida frente a estos grupos" se les aplique el máximo rigor que la ley contempla "para este tipo de conductas criminales".

Esta coyuntura redundó en una división en la actual oposición al momento de votar. Lo anterior porque, a pesar de que 15 diputados de Apruebo Dignidad votaron en contra, cinco frenteamplistas (Miguel Crispi, Jorge Brito, Marcela Sandoval, Maite Orsini y Catalina Pérez), dos DC (Matías Walker y Gabriel Silber), el PPD Rodrigo González y el liberal Alejandro Bernales, la aprobaron.

Uno de los que reaccionó ante esta contingencia fue el diputado Leonardo Soto (PS), quien votó contra el proyecto, lamentando los resultados y catalogando de "política fracasada"  el despliegue del gobierno para frenar a los grupos violentos.

Por otro lado, Luciano Cruz-Coke (Evópoli), lamentó la actitud de algunos sectores que buscaban el diálogo con la Coordinadora. "¿Qué señal les estamos dando a las personas de La Araucanía cuando lzkia Siches señala que van a dialogar con la CAM? ¿Cómo dialogamos con personas que no quieren diálogo y que, por la fuerza, con una pistola sobre la mesa, establecen arbitrariamente actos unilaterales a través de la violencia y del terrorismo? ¿Con ellos vamos a dialogar?", cuestionó al tiempo que valoró el avance del oficio.