CGR rechaza interpretación de Vivienda que permitía proyectos en áreas de preservación

CGR rechaza interpretación de Vivienda que permitía proyectos en áreas de preservación

Por: Luciano Badal | 05.11.2021
La resolución de la Seremi de Vivienda Metropolitana buscaba considerar las áreas de preservación ecológica como “zonas de transición” que admiten el desarrollo de proyectos.

La ciudad de Santiago está rodeada de áreas naturales, que no solo permiten a las personas salir de paseo y conectarse con la naturaleza, sino que son lugares que conservan ecosistemas nativos e importantes reservas de agua de la ciudad. Dichas zonas están protegidas por el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS), que las considera “Áreas de Preservación Ecológica”. 

Pero la protección efectiva de estas áreas no ha sido fácil de garantizar. Ciudadanos y ambientalistas denuncian el fuerte lobby inmobiliario para instalar proyectos en esas zonas, así como la dificultad de enterarse y denunciar los intentos de disminuir el nivel de protección que tienen. 

El último caso que ilustra este conflicto surgió en una resolución de la Seremi de Vivienda Metropolitana, donde se interpretaba que las Áreas de Preservación Ecológica son “zonas de transición” entre el área urbana y las montañas prístinas, y que por lo tanto permiten desarrollar ciertos proyectos. 

A fines del pasado mes, la Contraloría rechazó esta interpretación en un oficio, a partir de una solicitud de pronunciamiento que hizo el ambientalista Gonzalo Prieto. “No se advierte fundamento para lo indicado por la SEREMI. Esto teniendo en cuenta que las Áreas de Preservación Ecológica corresponden a esas áreas que serán mantenidas en su estado natural, lo que se ha omitido consignar en la resolución que se analiza”, se puede leer en el dictamen de Contraloría.

“Yo hice la solicitud a Contraloría porque me enteré de esta resolución de la Seremi de casualidad. Pero se trata de oficios internos que se hacen y después pueden generar una jurisprudencia antes que nadie se de cuenta. No hay mecanismos accesibles para enterarse de este tipo de resoluciones como la tomada por Seremi de Vivienda”, advierte Gonzalo Prieto, ambientalista que ha trabajado por las Áreas de Preservación Ecológica.

Interés inmobiliario en Áreas de Preservación Ecológica

Gonzalo Prieto lleva al menos dos años buscando frenar el avance inmobiliario en las Áreas de Preservación Ecológica. “Hay 4 proyectos grandes que a mi juicio son ilegales y ahora están todos paralizados por los procesos que hemos iniciado. Pero en eso me he encontrado con un lobby inmobiliario feroz, que a mi parecer está intentando llegar a instituciones como el Servicio de Evaluación Ambiental o la Seremi para buscar la interpretación que les permita desafectar estas Áreas de Preservación Ecológica ”, denuncia. 

El año pasado, Gonzalo celebró cuando la Contraloría se pronunció aclarando que las Áreas de Preservación Ecológica deberán ser consideradas como “áreas bajo protección oficial” y que por ende todo proyecto futuro en la zona deberá someterse al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA). 

En el proceso que culminó con esta pronunciación del órgano contralor, representantes de los proyectos “Chaguay”, “Hacienda Guay Guay” y “Mirador Pie Andino” que se están construyendo en estas áreas protegidas entre Lo Barnechea y Colina, se habían incluido como partes interesadas, argumentando que las Áreas de Preservación Ecológica no deberían considerarse bajo protección oficial. 

A pesar de los avances en jurisprudencia que establecen la protección de las Áreas de Preservación Ecológica, Gonzalo advierte que el interés por desarrollar proyectos en estas zonas continúa. “Es importante que más personas denuncien estos hechos. Es muy difícil enterarse de estos oficios internos pero si una persona ve que se está vendiendo o instalando un proyecto en una de estas zonas, yo estoy más que disponible para recibir la información o ayudar a presentar denuncias. Es importante sumar esfuerzos para proteger esta zona que es donde está el bosque esclerófilo con especies endémicas de aquí, donde vive el zorro, el cóndor. Es el jardín de Santiago”, concluye.

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