Una compleja situación se vive al interior de la Universidad del Desarrollo (UDD), como consecuencia de los hechos que quedaron al descubierto hace algunas semanas y que apuntan al reconocimiento de uno de los herederos del grupo Said de haber violado a una joven, un caso que no ha pasado inadvertido en esta casa de estudios.

Lo anterior porque, de acuerdo a lo que publica este lunes Interferencia, alumnos de Publicidad de la UDD reconocieron al condenado por abuso sexual, Juan Cristóbal Said Amunátegui, quien es uno de sus compañeros de clases.

Específicamente, el alumno es uno de los hijos de Salvador Said Somavía, quien está a la cabeza del grupo dueño de Parque Arauco, Embotelladora Andina y Scotiabank, estudia en esta universidad y una vez transparentada su situación en los medios, alumnas y alumnos manifestaron su molestia frente a la falta de sanción a Said, además de la situación de desprotección en la que se sienten las mujeres al compartir espacios -en este momento virtuales por la pandemia-, con el joven que en marzo fue condenado “a un tratamiento de control de impulsos", luego de la decisión de la fiscalía de modificar el delito de violación a abuso sexual.

“En Publicidad casi todos los trabajos son en grupo, todo se hace entre compañeros, porque te preparan para trabajar en una agencia, donde hay equipos. Y de las compañeras, nadie quiere trabajar con él, según comentan, les da miedo. Y algunos compañeros de curso también están molestos y les incomoda”, asegura una estudiante de la carrera al medio citado.

Y agrega que los comentarios de pasillo entre los alumnos se incrementaron tras la publicación de una transcripción del audio en el que Said reconoce a un grupo de amigos de la víctima, el año 2018, que violó a la joven.

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Con posterioridad a esta revelación, desde una cuenta de Instagram se empezó a exigir la salida de Said de la UDD, iniciativa que se adiciona a la elaboración de una carta pública abierta para que estudiantes y ex alumnos adhieran a la expulsión de Juan Cristóbal Said, documento que ya tiene más de 1.601 firmas de respaldo, excediendo el 10% del estudiantado de la casa de estudios, que suma un poco más de 14.000 matriculados.

En la misiva, estudiantes apelan a la salida de Said de la universidad. “Como alumnas de la carrera de Publicidad pedimos a la Facultad de Comunicaciones de la Universidad del Desarrollo, la expulsión inmediata del estudiante de nuestra carrera Juan Cristóbal Said Amunátegui. Said fue juzgado por abuso sexual y recibió como castigo solo un tratamiento para el 'control de impulsos', incluso tras haber confesado la violación en un audio. La presencia de Said en nuestra Universidad es una amenaza constante, no solo a la seguridad de las alumnas, pero igualmente a la reputación de nuestra institución”, se lee en ella.

Para las alumnas, además, la mantención de su compañero en la casa de estudios, obedece a una decisión improcedente de parte de su administración, un hecho que las expone y las hace sentir amenazadas. “La presencia de Said en el aula nos comunica fuerte y claro una falta de cuidado por parte de la universidad hacia sus alumnas, una negligencia que duele de parte de una institución de la que deberíamos estar orgullosas de ser parte y sobre todo una falta de apoyo con todas las otras víctimas de abuso que ahora se ven forzadas a compartir ambiente con Said. Priorizar a Said sobre el cuerpo estudiantil, es una cachetada en la cara a todos los valores que creímos que nuestra universidad compartía con nosotras”, detalla el escrito.

De acuerdo al mismo documento, Said estaría incumpliendo el reglamento interno de la universidad que todos los alumnos firman al ingresar a ella. Entre las infracciones que estipula la casa de estudios se encuentran “realizar actos que menoscaben de cualquier modo los principios o la imagen de la Universidad” y “ser imputado por hechos constitutivos de delitos comunes cuando estos incidan en la integridad de sus miembros, en el descrédito de la imagen de la Universidad, en el adecuado desenvolvimiento de sus actividades”.

Paralelamente, el escrito asegura que los egresados de la UDD también representan los valores y la ética de la institución en los espacios de trabajo, por lo que “dejar que Said se gradúe de nuestra universidad es un paso en la dirección equivocada, en especial en un mundo donde la nueva generación de profesionales tiene más acceso que nunca al pasado de alguien y no perdona delitos de esta índole”.

Una de las responsables de la redacción de la carta cuenta que esta ha logrado representar el sentimiento masivo de mujeres y hombres que estudian en la universidad, por lo que en pocos días esta concitó una gran adhesión.

Las alumnas involucradas en esta iniciativa que promueve la salida del estudiante, cuentan que la carta ya llegó a manos de la decana de la Facultad de Comunicaciones, la periodista Carolina Mardones, quien acogió la denuncia. Sin embargo, le dijo a un grupo de estudiantes que no podían expulsar a Said, ya que no se podía juzgar en dos oportunidades veces al joven.

Adicionalmente, el documento también fue remitido al rector de la universidad, Federico Valdés, aunque hasta el momento no han recibido respuesta y desconocen si lo leyó.

“Lo que me motivó a firmar la carta es que me parece indignante que la universidad haga oídos sordos. Aunque yo no tengo clases con él (Said), esto es por la seguridad de las mujeres de la UDD”, dice otra alumna.

Los responsables del reportaje citado contactaron a la casa de estudios el 29 de abril para consultar si Said cumple el reglamento de disciplina de la UDD y las medidas que se adoptarían para proteger a las estudiantes, sin embargo, no hubo respuesta a la inquietud planteada por el medio.

El vínculo de la familia Said con la UDD

Actualmente el grupo empresarial mantiene un importante vínculo con la UDD, donde varios del clan familiar han estudiado o trabajado. Sin embargo, la relación se hizo más estrecha todavía en mayo de 2014, cuando la universidad firmó un acuerdo con los Said Handal para crear una cátedra en reconocimiento a uno de sus patriarcas, Jaime Said Demaría.

Esta sería impartida por el Centro de Familias Empresarias (CEFAE) de la universidad. En la firma, aparecen integrantes de la familia Said junto a uno de los fundadores de la universidad, el alcalde Joaquín Lavín, junto a su rector, Federico Valdés. Jaime Said Demaría fue fundador de Rayón Said, del Banco Panamericano, y compró junto a José Said el Banco BHIF, además de Embotelladora Andina.

En la foto de una nota institucional del acuerdo, se aprecia a Gonzalo Said Handal firmando. Una de sus hijas, Sophia Said, es ex alumna de la UDD y como tal, también ha sido destacada en la página de esta casa de estudios.

De acuerdo al relato de estudiantes de la universidad, un primo de Juan Cristóbal Said también fue procesado por abuso sexual a una menor de edad, un caso publicado hace un par de semanas por El Mostrador sobre un alumno que actualmente también es estudiante de la UDD.

Pero hay más. Uno de los tíos políticos de Juan Cristóbal Said, quien estuvo casado con una hermana de la madre de Said, Pedro Pellegrini Ripamonti, actualmente es docente de la facultad de Derecho de la UDD.

Pellegrini fue además gerente corporativo de Embotelladora Andina, una de las empresas del Grupo Said y en la actualidad es miembro del consejo asesor del Centro de Derecho Regulatorio y Empresa de la UDD.

Por su parte, Hernán Büchi, actual presidente del consejo directivo de la UDD, y uno de sus socios desde sus inicios, fue integrante del directorio de Parque Arauco, una de las empresas más grandes del Grupo Said.