La obra más relevante de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) en el último tiempo es el proyecto de tren de pasajeros a Melipilla que contempla un servicio de transporte para 8 comunas de la Región Metropolitana: Estación Central, Cerrillos, Maipú, Padre Hurtado, Peñaflor, Talagante, El Monte y Melipilla. La iniciativa ya está dando sus primeros pasos con la expropiación de 22 hectáreas de terreno para cocheras y talleres que respaldarán a los más de 61 kilómetros de vías y 11 estaciones que, según las estimaciones más optimistas, recibiría a sus primeros pasajeros en 2025.

Se estima que el nuevo trazado tendrá una demanda aproximada de 50 millones de pasajeros por año, para un área de influencia de más de un millón 100 mil habitantes, que serán transportados por 22 trenes nuevos y contará con tarifa integrada a Transantiago mediante la tarjeta BIP entre Santiago y Maipú (Estación Ciudad Satélite) y entre Melipilla y Ciudad Satélite; el pago se realizará por tramo recorrido, tal como ocurre en Metro Valparaíso y Metrotrén Rancagua. Y es aquí donde presenciamos una integración de transporte a través de la infraestructura, pero también una seria discriminación a estas comunas pertenecientes a la Región Metropolitana, que quedan fuera de la integración tarifaria del Transantiago. Los usuarios deberán pagar 2 pasajes de ida, pago por tramo y pasaje BIP, para utilizar el servicio que en la mayoría de los casos les permitirá ir a sus trabajos, universidades, colegios, centros de salud de mayor complejidad y acceder a servicios que sólo se encuentran en la urbe de Santiago. En ir y volver a sus hogares, nuestras vecinas y vecinos gastarán 4 pasajes, lo que en momentos de profunda crisis económica y desempleo se hace imposible para cualquier bolsillo. Tendremos un elefante blanco que veremos circular por las vías sin poder utilizarlo por su alto costo, lo que habla de una ciudad segregada más que de una inversión inclusiva para la región.

Las autoridades (en especial los nuevos alcaldes que asuman este año y que se ven involucrados en este proyecto, el nuevo cargo de gobernador y el próximo Presidente de la República) deberán sentarse a la mesa, escuchar a los vecinos de estas 8 comunas y lograr integrar el pago por tramo a la tarjeta BIP, para que realmente sea un beneficio para nuestros habitantes. Son más de 1.500 millones de dólares de inversión por parte de EFE y, por una decisión de carácter marginal, pagaremos un alto costo por este nuevo medio de transporte.