Paulina Mellado, coreógrafa: "Siempre hemos estado en una situación crítica"
El pasado 6 de octubre se inició el Seminario de Prácticas Coreográficas, impartido por el Departamento de Danza de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile. El seminario, que se extenderá hasta finales de noviembre, está a cargo de la coreógrafa Paulina Mellado, y el dramaturgo de ópera y danza Rolando Jara.
Debido a la pandemia por COVID-19, el seminario se está realizando de manera online durante octubre y noviembre. Sobre esta nuevo formato para una actividad formativa, la coreógrafa señala que “no deja de ser interesante la posibilidad de conectar con otras regiones y el alcance de llegar a otros lugares que la presencialidad no hace posible, es bastante emocionante. Esta situación sirve mucho para el contexto del Seminario Prácticas Coreográficas, ya que todo influye al momento de ponerse a trabajar. En ese sentido esta relación virtual nos permite igualmente generar una conexión y armar grupos de trabajo”.
De ser uno a ser varios
-¿Cómo se han preparado para dar estas clases en forma online?
-La pandemia nos obligó a cambiar los formatos de trabajo. Durante todo este año hemos estado en eso y naturalmente hemos encontrado un vínculo interesante que por momentos da la posibilidad de generar cosas nuevas, distintas. También reconociendo que se pierden otras cosas y relaciones, pero tratando de tener una posición positiva y a su vez reconocer cada momento de este proceso y estar lo más atento posible, ya que es cambiante y que influyen aspectos emocionales, reales, contextos muy distintos entre unos y otros.
-¿Cuál es la relevancia de este curso?
-Es un curso que además de estar en función de crear y acompañar los diversos modos de producción y prácticas coreográficas y escénicas, quiere visibilizar el potencial de trabajo en creación e investigación. En el Departamento de Danza hay muchas voces que se dedican a la creación.
-¿En qué consiste el Magíster en el que están trabajando?
-El Magíster en Prácticas Coreográficas es de carácter mixto, ya que desarrolla los ámbitos académico
y profesional, con una orientación interdisciplinaria, para desarrollar creación artística a través de la
exploración de diversas prácticas y a su vez, generar reflexión crítica sustentada en diferentes corrientes “contemporáneas” del campo.
El Magíster aún no ha salido a la luz pública, pensamos que será posible el 2022, es por eso que estamos
creando cursos de extensión en los cuales se despliegue parte del trabajo que se realizará de manera
sistematizada en el Magíster, en relación a las diversas prácticas que se realizan al interior del
Departamento de Danza con sus profesores –parte de ellos se dedica a la creación tanto
coreográfica, como a la composición musical, dramaturgia.
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-¿Por qué es importante contar con coreógrafo/as con experiencia y conocimiento?
-Un coreógrafo, como cualquier creador, es alguien que creará mundos y tendrá la posibilidad de expresarlos y los que lo vean tendrán a su vez la posibilidad de experimentar algo novedoso, algo fuera de lo normal o fuera de los parámetros habituales. Lo que se juega ahí en la creación de algo es poder compartirlo, es “algo” que va de lo “propio” de una particularidad a un espacio social. Entonces ese camino es el que importa, cómo se va desarrollando ese agenciamiento, ese modo de pasar de ser uno a ser varios.
El cuerpo de todos
Paulina Mellado reflexiona también sobre el rol que ha jugado el arte durante este 2020 marcado por la pandemia de COVID-19. Además, comenta su visión por la critica situación que están viviendo las y los trabajadores de su área.
-¿Cuál es el rol que ha jugado para ustedes el arte en esta pandemia?
-Concretamente el rol que juega el arte en esta pandemia es la posibilidad de crear y generar encuentros. El arte para nosotros está en constante conexión con la realidad. En este contexto la realidad es el desamparo, la soledad, no encontrarse fisicamente, el aislamiento, el miedo. Todas son sensaciones y emociones que pueden condensarse en un trabajo desarrollado a partir de la experiencia de estar juntos acompañándonos en los procesos y los distintos modos de producción o instauración en la creación. En este momento lo significativo es crear las condiciones para que en el encuentro con otros se desplieguen las distintas prácticas, otorgándole sentido y peso a este momento a través del trabajo artístico.
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-¿Qué piensan de la situación que se está viviendo con los y las trabajadoras del arte por la pandemia?
-Siempre hemos estado en una situación crítica. Es difícil porque hay cultura y hay arte, ¿y dónde están las diferencias, alguna vez se habla de eso? ¿Qué significa ser trabajador del arte? El problema está en que si no estás amparado por una institución, no existes. Es como en la Edad Media: si no tienes familia estás solo.
-Creo que hubo una explosión de movimiento en formato virtual y muy creativo al mismo tiempo. La danza tiene mucha energía, es su característica: hay cuerpo, tiempo, espacio, y no puede detenerse. Aunque
sea efímera, es potencia, por lo tanto es visible y eso genera una realidad muy concreta. Un cuerpo
danzando es sugerente, significativo, embelesador, es belleza, de mucho contenido en sí mismo, porque
es un cuerpo, pero al mismo tiempo es el cuerpo de otros o de todos.