Luego de la polémica que generó el funeral de Bernardino Piñera, ex sacerdote y tío del Presidente Sebastián Piñera, el organizador del evento entregó sus explicaciones.

Esto, porque las exequias fueron profundamente criticadas debido al número de asistentes (31) y, sobre todo, por la acción del mandatario de abrir la tapa del ataúd, pese a las sospechas de COVID-19 que había en el cuerpo del deudo.

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Ante esto, Herman Chadwick Piñera, primo mayor del gobernador y hermano del ex ministro del Interior, explicó lo sucedido y evidenció la molestia que existe en el clan por las repercusiones que tuvo lo sucedido.

Sobre los asistentes, fue rotundo. “Te puedo decir quiénes éramos: ocho Chadwick Piñera con sus señoras, son 16; Sebastián (y Cecilia Morel), 18; Pablo, 19, y Magdalena (Piñera), 20. Veinte personas. Y muchos quedaron con las ganas de ir y no pudieron”, partió en conversación con La Tercera.

Consultado sobre el resto de los presentes, todos trabajadores, entre los que aparecen tres sacerdotes, seis músicos y dos fotógrafos, dando un total de 31 concurrentes, Piñera Chadwick aseveró que “no, esos no se cuentan”.

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“El video cumple con todas las normas del protocolo. Los cajones se sellan, la tapa que se abre es una tapa que siempre se puede abrir; no se sella la tapa, se sella el vidrio. Por lo tanto, no hay ningún incumplimiento. Pero es algo familiar: no puede tener repercusión pública el entierro de un arzobispo de 104 años tan querido por su familia”, reafirmó.

Finalmente, quiso dejar claro que “este es un tema, en estricto sentido, familiar. Y se cumplió con todo. Y no queremos que sigan comentando cosas que no tienen ribetes familiares”.