Este domingo, tras el fallecimiento de una persona que supuestamente había contraído coronavirus, se desató una seria polémica entre el ministro de Salud, Jaime Mañalich y la alcaldesa de Maipú, Cathy Barriga.

Por un lado, la líder comunal aseguró que existía un nuevo caso de COVID-19 en su comuna, revelando la noticia a través de su perfil de Instagram. Mañalich, con quien ya se había confrontado en la semana, le respondió tratándola de mentirosa, lo que hizo públicamente a través del punto de prensa que todos los días se efectúa en La Moneda para entregar los últimos reportes alusivos a la pandemia en nuestro país.

Molesta con la autoridad sanitaria, la nuera de Joaquín Lavín se justificó asegurando tener en su poder, el certificado de defunción de la persona fallecida, documento en el que, de acuerdo a su relato, se especificaba que la muerte habría sido por coronavirus, lo que habría corroborado un test rápido de COVID-19.

Lo que vino con el transcurso de las horas fue una una entrevista con CNN, ofrecida por Gustavo Huerta, jefe del servicio de pacientes críticos del Hospital de Carabineros,  quien desmintió la versión de la alcaldesa, declarando que el test rápido inicial habría dado positivo a la presencia de coronavirus, pero la muestra PCR que se tomó posteriormente, fue negativa.

De esta manera, dijo el facultativo, se concluyó que la paciente, una mujer de 64 años, habría fallecido de una insuficiencia respiratoria multifactorial.

Sin embargo, Barriga insistió en su versión y mostró el certificado de defunción de la persona aludida a través de su cuenta de Instagram, documento en el que se evidenciaría (el nombre aparece borrado por un plumón) que la causa de la muerte sí quedó registrada como COVID-19.