Un pequeño ejercicio de escritura sobre cine, amistad y comunismo
La mirada de los comunes es el fruto de un ejercicio de amistad y del diálogo que genera el cine. Con dibujos de Victor Espinoza, se iba a presentar originalmente en enero en el Cine Arte Alameda, pero tras el incendio el evento de lanzamiento se convirtió en una fiesta a beneficio de dicho espacio cultural. Esto es lo que conversamos con sus autores, quienes respondieron como una sola voz y al unísono, borrando –tal como en sus críticas–, la idea de un autor individual.
[caption id="attachment_354726" align="alignnone" width="384"] Nicolás Ried e Ivana Peric, autores del libro[/caption]
-¿En qué periodo fueron publicadas originalmente las críticas incluidas en el libro La mirada de los comunes y cómo fueron producidas?
-Fueron escritas entre julio de 2017 y septiembre de 2018, siempre pensadas como una crítica del individualismo: pretendemos mostrar que más de dos manos pueden compartir un solo nombre. Por eso no nos parece relevante quién escribe cada cual, dado que todas las ideas e imágenes que escribimos forman parte de un modo de producción colectivo, que tiene en cuenta todas nuestras conversaciones. Esto no significa que pensemos igual, o que percibamos lo mismo, sino que compartimos un método, una forma de ejercitarnos. Lo que de algún modo subyace a la revuelta iniciada el 18 de octubre pasado: es un acontecimiento que nos ha obligado a todos y todas a repensar el modo en el que realizamos nuestras prácticas.
-¿Cómo es que dos egresados de Derecho terminan haciendo crítica de cine como un ejercicio de amistad?
-Nos conocimos estudiando Derecho, lo cual nos enseñó que crítica y juicio van muy unidos, pero también nos mostró que se podía pensar la crítica de manera diferente, es decir, como forma de sospecha y asociación de ideas. De la crítica como el arte de presentar amigos. Las películas son amigos y amigas que quieren conocerse, no pupilos a los que hay que ponerles nota.
[caption id="attachment_354729" align="alignnone" width="1324"] © Victor Espinoza[/caption]
-¿Bajo que criterio hicieron la selección que incluyen en el libro, y en qué medida este ejercicio lo vinculan con una mirada del espectador común y corriente?
-No creemos que exista algo así como un “espectador común y corriente”, porque eso daría lugar a que haya un espectador que no es común ni corriente, que es especial, privilegiado, experto. De ahí nuestro nombre, La mirada de los comunes. Nos interesa el momento en que se reúnen los ojos de muchos sobre un mismo objeto, que finalmente es un mismo mundo. La mirada de los comunes es el momento en que producimos un mundo con otros.
Para diseñar el libro también tuvimos que producir un mundo. Nos dimos cuenta que había una constelación, breves colecciones sobre cine, amor y comunismo. El método fue inverso al de quien hace crítica como juez: no escribimos en función de una idea, sino que la idea se mostró en la escritura.