Simularon su ejecución y le pusieron corriente: La denuncia por torturas que complica a un cuartel militar en Iquique
El sábado 19 de octubre, un día después del estallido social que desató movilizaciones por todo el país, el estudiante psicología Juan Francisco Alarcón Clementi asistió a una multitudinaria marcha que comenzó en la plaza Condell y que llegó hasta la avenida Arturo Prat, en Iquique, con el fin de grabar la manifestación.
Al llegar frente al Cuartel de la VI División del Ejército, ubicado en avenida Arturo Prat N°2250, se iniciaron enfrentamientos entre los manifestantes y Carabineros. Juan se desplazó hacia la puerta de acceso del recinto militar para grabar lo que estaba sucediendo. Según su versión, en ese momento fue derribado por un funcionario del Ejército de Chile, quien lo redujo y lo metió a la fuerza al interior del recinto. El militar lo agarró del pelo y le rompió sus lentes ópticos con un golpe. Luego de esto se habrían sumado otros ocho funcionarios militares a la golpiza. Recuerda que los asfixiaron con su chaqueta y le pusieron fusiles de guerra en su cabeza para simular su ejecución.
Juan cree que lo llevaron hacia el casino de oficiales ,donde lo pusieron boca abajo y lo patearon en el suelo. En aquel lugar lo golpearon en su zona genital con un fierro y, por momentos, sintió como le aplicaban electricidad en sus piernas. En al menos dos ocasiones asegura que perdió la conciencia producto de las torturas. No puede afirmar con certeza cuanto duró la sesión de tormentos, pero asegura que los militares lo fotografiaron para tenerlo "identificado" y también amenazaron con matar a su familia.
Mientras era golpeado escuchó que llegó un efectivo policial que le dijo a un funcionario militar que se pusieran de acuerdo para ver qué hechos pondrían en el parte para que las versiones fueran coincidentes. Una vez que acordaron esto, lo llevaron esposado en un vehículo policial al Consultorio Guzmán. En aquel recinto le suturaron una herida que tenía al costado del ojo derecho. Luego fue ingresado a la Comisaría ubicada en la calle Salvador Allende, donde no le leyeron sus derechos ni le permitieron comunicarse con sus familiares. El día 20 de octubre fue pasado a control de detención ante el Juzgado de Garantía de Iquique, donde fue formalizado por ingreso a recinto militar. En aquella audiencia también fue interpuesta una denuncia en contra de los funcionarios militares por las torturas que recibió.
Este miércoles se presentó una querella contra el Ejército de Chile ante el Juzgado de Garantía de Iquique por las torturas que recibió Alarcón. Su abogado, Matías Ramírez, indicó: "Todas las lesiones fueron constatadas el lunes 28 por el Servicio Médico Legal y dan cuenta de la credibilidad del relato de Juan Francisco. Además, las lesiones serían atribuibles a torturas por parte de funcionarios militares".
"Nosotros hemos solicitado al Ministerio Público que, con la mayor rapidez y celeridad, se pueda individualizar a los funcionarios militares e incautar sus teléfonos celulares", agregó.
Desde El Desconcierto nos comunicamos con el Ejército para conocer su versión de los hechos, sin embargo hasta el cierre de esta edición no recibimos una respuesta.