Niegan aborto en tres causales a mujer en hospital de Carabineros
Hoy se conoció públicamente en Chilevisión la historia de Candy Jamett, una químico farmacéutica y funcionaria de la PDI, que denunció a los médicos y médicas del Hospital de Carabineros (HOSCAR) por no constituir la causal dos de aborto en tres causales por inviabilidad fetal extrauterina.
Además, denuncian que tampoco tomaron en cuenta la existencia de tres informes de especialistas, que constituían una malformación inviable incompatible con la vida.
Sin embargo, según denuncian desde la Corporación MILES, los médicos optaron por dilatar su caso hasta ahora, que tiene 25 semanas, haciéndola pasar por tratos vejatorios.
Mediante una carta, la organización que vela por los derechos sexuales y reproductivos, asegura que "los médicos, desde el principio, le dijeron que no estaban de acuerdo con interrumpir su embarazo. Si había al menos una esperanza de vida, no la interrumpirían. Hicieron caso omiso de la decisión de Candy que, en todo momento, fue de no continuar su embarazo al constituir causal 2 de la Ley IVE".
El texto además señala que "el comité médico del HOSCAR, presidido por el ginécologo Néstor Lagos Friz, en ningún caso, reconsideró su caso de manera seria. Tampoco pudo recurrir a otro hospital público o clínica, porque al ser funcionaria de la PDI su prestación de salud es Dipreca y pocos establecimientos tienen convenio con dicha institución o, simplemente, los que podían prefirieron no hacerse cargo de su caso, ya que no irían 'en contra' de su hospital de referencia".
En ese sentido, continúan explicando que "desde Corporación MILES, estamos entregando apoyo legal y psicológico a Candy. Creemos que claramente acá se le denegó el acceso a un derecho consagrado por ley y se configura una vulneración a sus derechos fundamentales, como el acceso a la salud, a la integridad física y psíquica entre otros".
También remarcan que "la normativa técnica del MINSAL es clara: no da para interpretaciones amplias que se ajusten a los cánones morales o éticos de los médicos de turno, ni mucho a menos a excluir informes médicos o considerar únicamente los de su staff privado de un hospital o clínica en particular".
"En este proceso, ella ha enfrentado tratos poco dignos que rayan, incluso, en la misoginia: Le han recomendado dar en adopción a su hijo cuando se sabe que es inviable con la vida o le han dicho que no se preocupe de interrumpir su embarazo bajo la ley 21.030 porque de todas maneras lo más probable es que su embarazo no llegue a término", agregan tajantemente.