El efecto Silber: Las cartas que baraja la DC para la presidencia de la Cámara

El efecto Silber: Las cartas que baraja la DC para la presidencia de la Cámara

Por: El Desconcierto | 13.03.2019
Antes de terminar la semana la colectividad espera manejar un nuevo nombre de consenso para reemplazar a Silber, según informó el jefe de la bancada, Gabriel Ascencio. Al interior de la Falange ya resuenan algunos nombres, entre ellos el diputado Víctor Torres, quien genera más consensos para el acuerdo con el Frente Amplio, y su par Pablo Lorenzini, más cercano al oficialismo.

Tras conocerse una denuncia anónima por violencia familiar que involucró al diputado Gabriel Silber, el parlamentario de la Democracia Cristiana (DC) terminó por dar un paso al costado en su carrera por presidir la Cámara de Diputados y acusó una “operación política deleznable”.

Ni en entre sus cercanos se esperaba que Silber dejara la candidatura después de interponer una denuncia en la PDI por la difusión de la carta. La situación de violencia ya era conocida entre los militantes del partido y tomó fuerza durante el lunes por la tarde. El caso terminó por explotar y Silber desmintió cualquier tipo de maltrato en contra de su esposa y ex vicepresidenta de la Falange, Cristina Orellana.

El parlamentario era la carta del acuerdo que tenían la Nueva Mayoría y el Frente Amplio (FA) para la presidencia de la Cámara, aunque este último sector había puesto en duda su nombramiento, considerando que las votaciones de la DC se alineaban con el oficialismo. Esto complica aún más el acuerdo al que tendrán que llegar entre la oposición que ya había mostrado signos de fractura.

[caption id="attachment_278164" align="alignnone" width="900"]diputados DC / Agencia Uno[/caption]

Se esperaría que entre este miércoles y jueves la colectividad manejara una nueva figura de consenso para reemplazar a Silber, según informó el nuevo jefe de la bancada Gabriel Ascencio. Las únicas pistas que dio es que debe ser alguien que tenga el máximo apoyo posible y que lo decidirán antes de que finalice la semana. Aún así, ya resuenan algunos nombres interior de la DC para disputar el cargo.

Una de las cartas que podría asumir la competencia sería el diputado por Valparaíso, Víctor Torres. El parlamentario genera mayores consensos en la oposición y entregaría más garantías a la hora de evaluar los acuerdos que se puedan alcanzar con el FA, pese a que el Partido Humanista (PH) ya ha anunciado que dejará caer el acuerdo administrativo. Entre cinco y cuatro votos del FA no estarían comprometidos, más allá del nombre que elija la DC.

Torres mostró esas garantías cuando mostró su posición en el debate sobre el aborto en tres causales que se inició en 2015 y que integró una de las iniciativas emblemáticas de la agenda valórica de Michelle Bachelet. Siendo integrante de la comisión de Salud, Torres defendió la libertad de conciencia de los militantes de la DC y se cuadró con la iniciativa de la Nueva Mayoría. También marcó una nota distinta dentro de la DC incluso, en la causal de violación, a la que votó a favor pese a generar más controversia al interior de la colectividad. Numerosas voces criticaron el proyecto, como los históricos militantes Gutemberg Martínez y Soledad Alvear, del sector más conservador del partido. En la votación, Torres criticó a sus pares que se cuadraron con la derecha y también a aquellos parlamentarios del Partido Radical que no asistieron ese día a la votación en la Sala.

Sobre el caso de violencia intrafamiliar que involucró al ex diputado Ricardo Rincón, Torres fue más bien cauto y se mantuvo en segunda línea, apelando a que una investigación judicial entregará las conclusiones.

También se ha deslizado como posible carta para presidir la Cámara el diputado Pablo Lorenzini, aunque sus votaciones han estado alineadas con las posturas del oficialismo y eso complicaría llegar a acuerdos con el FA que condicionó el pacto para este año legislativo de seguir con posiciones divididas en la bancada. Fue el caso de su respaldo al proyecto de Aula Segura, en octubre del año pasado.

El parlamentario por la región del Maule ha sido histórico presidente de la comisión de Hacienda y ya encabezó la Cámara en 2004.

Finalmente, se baraja dentro de las opciones el diputado Matías Walker, sin embargo, él mismo se ha alejado de la discusión política más dura y ha solicitado dejar la presidencia de algunas comisiones para destinar tiempo a sus asuntos familiares.

El camino hacia la crisis

La retirada de Silber se produjo luego de 24 vertiginosas horas, en las que los diputados y senadores del Congreso recibieron un correo electrónico anónimo –pero con remitente– en el que se acusaba al diputado DC de haber ejercido violencia intrafamiliar en contra de su ex pareja.

“Es un secreto a voces, pero muy controlado por la cúpula de nuestro partido que Cristina Orellana, nuestra vicepresidenta [actualmente ya no ocupa ese cargo] y esposa de Gabriel Silber, fue y seguramente seguirá siendo víctima de violencia intrafamiliar”, señala el texto.

La difusión masiva del mensaje entre los parlamentarios abrió una crisis al interior de la Falange y fue un comité de diputados el que abordó el tema durante la tarde de este lunes. Finalmente, Gabriel Ascensio se encargó de  transparentar la situación al resto de fuerzas de oposición en una reunión que se convocó durante la mañana de este martes.

Mientras, Silber se encontraba en Santiago, en el cuartel general de la PDI de la calle Vicuña Mackenna, acompañado del abogado Gabriel Zaliasnik para interponer una denuncia por la difusión del correo. El texto, firmado por el diputado y Cristina Orellana, aunque ella no se vio por el lugar, pide que la Unidad de Cibercrimen de la PDI investigue la IP desde la cual fue enviado el mail "para luego deducir las querellas criminales correspondientes”.

Ya pasadas las 13:00 horas el abogado y su cliente atendieron a la prensa. Zaliasnik indicó que se trata de “una operación política diseñada en relación a las aspiraciones del diputado Silber para presidir la Cámara”. Explicó que se trataría de “una conducta inusual en Chile” , pero que “hemos visto en EE.UU.”, y que se enmarcaría “dentro de los delitos de seguridad interior del Estado”. Según él, con eso se buscaría “alterar la decisión del acuerdo administrativo del manejo de la presidencia de la Cámara”.

Por su partre, Silber insistió en que en su vida pública y privada “no existe ni un reproche que instale un tipo de rumor relacionado con los hechos sobre los cuales mañosamente se me quieren vincular en este correo falso”. Luego, puso su cargo a disposición del partido.

Gabriel Ascensio recogió minutos después el guante de Silber y anunció a la prensa que será sustituido: “Ya no va a ser candidato Gabriel. Él ha tomado esta decisión”, dijo. Pese al anuncio, el jefe de bancada quiso mostrarle su respaldo y enfatizó: “No tengo razones para no creer que estamos ante una infamia”. También dijo que para el partido la situación es “impactante y dolorosa”.

[caption id="attachment_278165" align="alignnone" width="900"]gabriel ascensio / Agencia Uno[/caption]

Durante la tarde de este martes, entró en la polémica la presidenta de la Comisión de Mujer y Equidad de Género del hemiciclo, Loreto Carvajal. La parlamentaria PPD respaldó al demócratacristiano y, al ser consultada por una eventual relación personal con él, respondió: "Lo que se espera de esta institución es que seamos serios, que trabajemos en pro de lo que corresponde y en ningún caso, responsablemente, hacerse cargo de cuestiones ni menos de rumores".

Quien ha querido mantenerse alejada de la presión de la prensa desde que empezó a circular el correo ha sido Cristina Orellana. La ex vicepresidenta DC no habló en público durante todo el día y lo único y último manifestó fue a través de un tuit que posteó el lunes en la noche: “Todos los que me conocen, saben que soy perfectamente capaz de tomar decisiones y de defenderme. Sé hacerlo. No caeré en desmentir anónimos. Estas prácticas no van conmigo. Los anónimos son peligrosos y sin validez cuando no tiene rostro. Solo denigran. Mi primera prioridad siempre será cuidar a mis hijos”, escribió Orellana. Sus palabras se interpretaron de forma general como un desmentido a las acusaciones del correo, pero no evitaron que Silber se viera obligado a renunciar a sus aspiraciones dentro de la Cámara.