Matías Pérez Cruz, el presidente de Gasco que financia a Kast y que echó a tres mujeres del lago Ranco
El nombre de Matías Pérez Cruz comenzó a circular en horas de esta mañana en las redes sociales después de que 3 mujeres denunciaran que el presidente de Gasco las fue a encarar cuando descansaban en las orillas del lago Ranco.
Sin embargo, Pérez Cruz no es un empresario anónimo y no es primera vez que alcanza cierta notoriedad pública. El abogado tiene fuertes vínculos con la derecha y en específico con José Antonio Kast, a quien le aportó $1 millón para su última campaña presidencial.
Tal como consigna Radio U. de Chile, Pérez forma parte del grupo de personas que aportó la suma de $73.743.777 al ultraderechista, entre los que se encuentran personas como el abogado pinochetista Hermógenes Pérez de Arce y el director de Iansa, Patricio Claro Grez.
Además de esto, el presidente de Gasco también es partidario de la figura de Augusto Pinochet. Esto queda demostrado en un mensaje que le dedicó al dictador en el obituario de El Mercurio donde señaló que "lo recordamos con gratitud y acompañamos a su distinguida viuda y familiares con nuestras oraciones".
Pérez también fue un activo opositor a las políticas que impulsó el gobierno de Michelle Bachelet y sostuvo en su minuto que las propuestas de la ex Nueva Mayoría afectaron el desarrollo de la economía.
"En nuestra visión, el entorno para el desarrollo de la actividad empresarial se ha visto sumamente afectado en Chile producto de -a nuestro juicio- una muy mala modificación al sistema tributario, a cambios desafortunados en la legislación laboral y a un diseño de políticas energéticas muy negativo para el fortalecimiento del sector, unido todo lo anterior a un continuo, creciente y incertidumbre jurídica", sostuvo en mayo de 2017 a la Revista Técnicos Mineros.
No obstante, Pérez también se ha mostrado como un defensor de valores nacionales y repudió la quema de una bandera durante la marcha del aborto de julio de 2018 donde fueron apuñaladas tres mujeres.
"Extraña no haber escuchado ninguna voz de repudio por parte de nuestras autoridades ate el acto barbárico, intencional, ultrajante y violento de la quema de una bandera chilena - previamente rayada con groseras consigna y luego rociada con combustible- efectuado por mujeres manifestantes de la marcha por el aborto libre, realizada hace pocos días. De este hecho tan chocante existen imágenes veraces que han sido difundidas profusamente en redes sociales", señaló el empresario en una carta a El Mercurio donde ignoró los ataques que recibieron las manifestantes.