Este fin de semana un programa de TV Globo denunció que el senador electo e hijo del presidente de Brasil, Flávio Bolsonaro, estaría vinculado a pagos irregulares por unos 1.870.000 de dólares (1.250.000.000 en pesos chilenos aproximados).

Mediante un reportaje de investigación, el espacio "Jornada Nacional" informó que el Consejo de Control de Actividad Financiera (COAF) detectó que el ex asesor del hijo de Bolsonaro, Fabrício Queiroz, recibió depósitos que alcanzarían una cifra cercana a los siete millones de reales en tres años. 

El COAF detalló que los dineros irregulares se dividieron en 1,2 millón de reales (320.000 dólares apróx.) cursados entre 2016 y 2017 y otros 5,8 millones de reales (1.550.000 de dólares apróx.) entre 2014 y 2015. Durante ese tiempo Queiroz trabajaba en el gabinete de la diputación de Flávio Bolsonaro.

Estas cifras contrastan con los ingresos mensuales de Queiroz como funcionario público, que en ese periodo bordeaban los 20.000 reales (5.500 dólares).

Según el informe del organismo fiscalizador, el hecho de que los depósitos hayan sido realizados de forma parcelada despierta sospechas sobre una posible ocultación del origen del dinero.

En medio de esta polémica, el juez del Tribunal Federal Supremo, Luiz Fux aceptó el pedido de Flávio Bolsonaro para detener la investigación y estableció una medida cautelar en base al "fuero privilegiado" que tendría el hijo de Bolsonaro por sus funciones como senador que asumirá en febrero.

Este fuero permite que ciertos cargos de representación no sean juzgados por la justicia común como ocurre normalmente. El juicio del proceso ocurre directamente en uno de los Tribunales Superiores como el Supremo Tribunal Federal, el Superior Tribunal de Justicia o los Tribunales de Justicia de los estados y del Distrito Federal.

Igualmente, el programa de TV Globo indicó que entre junio y julio de 2017, Flávio Bolsonaro recibió en su cuenta 48 depósitos por dos mil reales (US$540), que fueron realizados desde un cajero en el palacio legislativo de Brasil.

Por su parte, la actual primera dama brasileña Michelle Bolsonaro también resultó envuelta en el caso, puesto que habría recibido 24.000 reales (US$6.300) desde la cuenta de Queiroz.