Padres ausentes: En un 8,7% de los nacimientos de 2016 no hubo información del progenitor al momento de la inscripción
Este viernes fue presentado el último Anuario de Estadísticas Vitales que desarrolla el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Entre sus principales conclusiones, el estudio reveló una baja en la tasa de fecundidad y confirmó que las mujeres han tendido a retrasar la maternidad, así como las familias tienen menos hijos.
La tasa global de fecundidad (o número promedio de hijos o hijas por mujer) descendió de 1,8 a 1,7 en 2016, mientras que de un total de 231.748 nacimientos, un 50,83% fueron hombres y un 49,15% mujeres. La cifra evidenció una baja de 5,6 respecto a 2015.
A la vez, se hizo clara una tendencia a la postergación de la maternidad, ya que en 1979 eran las mujeres de entre 20 a 29 años las que contribuían con el 54,9% de la fecundidad total de mujeres en edad reproductiva, según consigna La Tercera. Sin embargo, en 2016, esa cifra bajó al 45,2% y creció el grupo de mujeres que enfrentan la maternidad entre los 30 y 39 años.
Una de las conclusiones más llamativas apunta a las cifras que demuestran que sigue existiendo un alto porcentaje de hombres que no se hacen cargo de sus hijos e hijas. Esto porque, del total de 231 mil 749 nacimientos registrados en 2016, se contabilizaron 20.138 casos (un 8,7% del total) con padres no comparecientes. De este modo, no existieron antecedentes del padre o progenitor al momento de la inscripción de los bebés.
Además, la mayoría de ellos (un 27,9% de los nacidos) fueron hijos o hijas de madres muy jóvenes, de entre 20 y 24 años. A la vez, la situación afecta aún más a las niñas que fueron madres menores de 15 años, ya que de los 649 hijos o hijas que dieron a luz, un 35,6% (237 nacimientos) tuvieron padres ausentes. En un 45% de esos casos, las mujeres tenían un nivel educativo básico incompleto.
En 2016, las cifras del INE revelaron que un 9,9% del total de nacimientos correspondió a hijos de niñas y mujeres de entre 15 y 19 años. Un escenario que ha sido denunciado por organizaciones como la Red Chilena Contra la Violencia hacia la Mujer como una muestra de la violencia que sufren las niñas en el territorio y de la falta de educación sexual.