El día en que Marcela Cubillos propuso aumentar los castigos para las mujeres que realizan abortos
Previo a su arribo como integrante del gabinete de Sebastián Piñera, la nueva ministra de Educación, Marcela Cubillos (UDI) –quien se trasladó desde su puesto como titular de Medio Ambiente–, fue diputada durante ocho años (entre 2002 y 2010), cargo en el que es recordada por haber votado en contra de ley de divorcio, y luego haberse divorciado de su primer matrimonio para casarse con Andrés Allamand (RN) en 2012.
Durante su paso por la Cámara de Diputados, la hija de Hernán Cubillos –el primer civil en asumir como ministro de Relaciones Exteriores durante el régimen de Pinochet– interpeló a los ministros Martín Zilic y Yasna Provoste durante el primer gobierno de Bachelet y firmó un total de 117 proyectos de ley, y en su actividad parlamentaria quedó patente su afecto por Jaime Guzmán y su postura en contra del aborto.
En total, fueron dos los proyectos que Cubillos presentó y que tienen relación con la interrupción del embarazo, según publica El Dínamo. El primero, con fecha 20 de junio de 2002, proponía aumentar las penas para “el que maliciosamente causare un aborto".
La iniciativa proponía penas de cárcel con presidio mayor y una multa de 100 a 300 UTM para quien "ejerciere violencia en la persona de la mujer embarazada"; una sanción de presidio mayor y multa de 50 a 100 UTM si es que se "obrare sin consentimiento de la mujer"; y presidio menor en su grado máximo y multa de 100 a 300 UTM "si la mujer consintiere.”.
Además, proponía que “la mujer que causare su aborto o consintiere que otra persona se lo cause, será castigada con presidio menor en su grado máximo a presidio mayor en su grado mínimo”.
En segundo lugar, la segunda moción presentada por la entonces parlamentaria, el 14 de julio de 2004, proponía levantar monumentos en memoria de las víctimas del aborto en las comunas de Santiago, de Valparaíso y de Concepción, cuyo financiamiento sería a través de erogaciones populares, obtenidas a través de colectas públicas, donaciones y otros aportes privados.
Sin embargo, pese al entusiasmo de Cubillos, ambas iniciativas no alcanzaron a ser discutidas en sala y fueron archivadas.