Iansa confirmó que la planta que posee en Linares no recibirá remolacha en 2019, lo cual podría significar su cierre definitivo.

Según la firma, han informado de manera constante a trabajadores, agricultores y autoridades sobre la situación por la que está pasando la industria azucarera mundial y en especial la chilena.

Desde Iansa indicaron que solo operara azucar en las plantas de Los Ángeles y San Carlos con el fin de mejorar la eficencia operacional del negocio y la competitividad frente a las importaciones.

Un posible cierre definitivo de la planta de Linares se decidirá el 26 de julio cuando se realice una reunión del directorio. Por el momento, sólo mantendrán la producción de subproductos y otras actividades ajenas a la operación de remolacha.

El cierre de la planta afectaría a casi 4 mil trabajadores, cuestión que ha sido calificada por el alcalde de Linares, Mario Meza, como la muerte de la comuna.

La empresa explicó que la delicada situación por la cual atraviesa la industria se debe a la baja sostenida en el precio internacional del azúcar, la reducción de la superficie de remolacha sembra en el país, además de la disminución en el consumo de azucar, el aumento de los costos de operación y la caída en el tipo de cambio, entre otros factores.

Ante esta situación, el ministro de Agricultura, Antonio Walker, afirmó a Radio Duna que desde el gobierno están concentrados y esperanzados en que Iansa no cierrre la planta en Linares".

“Si se cierra la planta quedarían muchos trabajadores y agricultores pequeños sin trabajo, esto afecta el empleo de una región que ya lo está pasando mal porque los granos no están pasando por un buen momento”, agregó el secretario de Estado.