Un informe de la Contraloría sobre la farmacia popular de Recoleta develó falencias en su gestión. En el texto se consigna que hay diferencias en el presupuesto, rebajas de inventario no justificadas y recursos utilizados para pagar deudas municipales.

El informe fue realizado el año pasado y analizó las cuentas del año 2016. Uno de los puntos que advirtió el órgano contralor tiene que ver con los recursos que entregó el municipio a la farmacia, según informa El Mercurio.

Según el escrito, estos ascendieron a $318,7 millones, monto que difiere del señalado por la directora del Departamento de Salud, María Eugenia Chadwick, que corresponde a $133,4 millones, y con lo aprobado por el concejo ($220,2 millones).

La Contraloría detalla que los $318,7 millones se distribuyeron de acuerdo a los requerimientos solicitados por Chadwick.

El 64% del total ($204,4 millones) fue solicitado para el pago de deudas con laboratorios, sin embargo, según el ente fiscalizador, estos "fueron utilizados para el pago de compromisos anteriores que tenía el Departamento de Salud Municipal". En el texto también se consigna una "dilatación en el plazo de pago a los proveedores de fármacos por hasta un total de 461 días", desde la recepción de los medicamentos.

Por su parte, Chadwick señala que están preparando un informe para responder a la Contraloría con toda la información."Para nosotros no hay duda de cómo se produjo, solo que la Contraloría no lo entendió", sostuvo.

La Contraloría también detectó que se produjeron "rebajas en el inventario de la farmacia popular, sin fundamento, ascendentes a $48.497.442".

"El alcalde (Daniel Jadue) instruyó un sumario a propósito del informe de la Contraloría para que quedara meridianamente clara la situación del inventario", agrega Chadwick.