Una situación frecuente para los dueños de mascotas, y que se puede volver incluso una fuente de angustia para ellos, es que al abandonar su hogar –ya sea casa o edificio– su perrito se queda llorando durante largas horas y son sus vecinos quienes sufren las consecuencias.

Según explicó a Lun la veterinaria Moira Hechenleitner, creadora de un programa para tratar este tipo de problemas, existen dos razones que explican por qué las mascotas lloran al quedarse solas. La primera, es que puede tratarse de animales que no tienen entretenimiento en el hogar, por que lloran, hacen destrozos y orinan en cualquier parte.

La segunda tiene que ver con que son animales que sufren de ansiedad por separación, y son esos casos los más graves, pues se trata de animales que lloran todo el día y nadie los puede callar. "Es básicamente una crisis de pánico por miedo a quedarse solo. Es como que tuvieras miedo a las arañas o los terremotos, todo lo que uno hace en el momento que se presenta esa situación es involuntario porque estás en un estado en el que no puedes controlar tus impulsos", explicó.

Entre las soluciones para tratar a mascotas que sufran ansiedad por separaciones, está el darle actividades al animal mientras su dueño esté en la casa pero que se mantengan en lugares separados, como darle un hueso y que él se quede en una pieza mientras el amo está en la cocina. También se les puede dejar un juguete relleno con comida para que el animal pueda asociar el quedarse solo con algo positivo. "Ellos tienen el instinto de buscar comida. Si se la pones en el plato, le terminas la actividad de toda una mañana en dos segundos", señala la veterinaria.

Además, al momento de separarse la despedida no debe ser demasiado efusiva para que el animal no crea que su amo no volverá, y lo mismo al regreso, si se pone demasiado inquieto, esperar a que se calme para saludarlo.

Moria Hechenleitner imparte una terapia para perros que sufren ansiedad por estrés –en su sitio con su mismo nombre–, que se trata de un programa remoto en el que se acompaña a los dueños a través de la cámara del notebook y celular, y que consiste en que el perro no debe quedar completamente solo cuando se está realizando este proceso –que dura entre cuatro a seis sesiones– y hay que buscar alternativas para que alguien lo cuide durante el día.

"Estás trabajando un estado emocional del perro, al igual como si tomaras una terapia para dejar de tener alguna fobia", dijo.