[caption id="attachment_50764" align="aligncenter" width="612"] Foto: mariapazsantibañez.com[/caption]

La pianista chilena María Paz Santibáñez, recordada como la estudiante universitaria que en 1987 estuvo a punto de ver truncada su carrera tras recibir un disparo en la cabeza por parte de un efectivo de Carabineros en el frontis del Teatro Municipal, escribió una sentida carta pública en la que se declaró "estremecida" por la "generocidad infinita" de Carmen Gloria Quintana.

En el escrito, Santibáñez destaca la cruzada encabezada por la víctima del Caso Quemados por romper el pacto de silencio, y asegura que Carmen Quintana "no gana nada" con el llamado a la verdad y justicia.

"Ella ya reconstruyó su vida, tiene una familia, es exitosa en lo profesional, sabe lo que es la cordura a pesar de la locura que le tocó vivir, llama a la verdad, solicita lo que corresponde: que se entregue la información, que se haga justicia. Ya no para ella: en su generosidad infinita se encarga de un país, de sus heridas, de sus leyes y decretos no dictados, de los pactos que persisten. Toca a todas las puertas, cuando sabe que para sí misma ya nada será retorno, y su vida seguirá, como es y ha sido. Generosidad extrema, moral a toda prueba, decisión y valentía sin límites", destacó la pianista.

Actualmente radicada en Europa, Santibáñez asumió como Agregada Cultural de Chile en Francia durante 2014, se instaló en París desde 1999 tras obtener la Licencia de Interpretación superior mención Piano en la Universidad de Chile, y desde entonces desarrolla una prolífica carrera artística.

Santibáñez destacó que la búsqueda por romper los pactos de silencio no vino desde organismos oficiales. "Ningún organismo 'oficial' buscó ni encontró documento alguno, ni exigió verbalizar lo que ya se sabía a ciencia cierta. De la verdadera reacción a este hecho se hace cargo Carmen Gloria, una persona que dignamente se presenta y continúa, profundizando las demandas. Sin su accionar no hay seguimiento a la ruptura del pacto", indica la pianista chilena.