Alto Maipo: Negligencia y accidentes en el Cajón
El pasado 24 y 25 de enero, mas de 170 personas quedamos aisladas en el Cajón del Maipo, esto luego que el puente sobre el estero La Engorda que permite el acceso al valle de las arenas colapsara tras ser socavado por el agua proveniente de los deshielos propios de la época estival.
Este episodio que podría parecer común y corriente en una zona cordillerana, según un chofer de la compañía Proyecto Hidroeléctrico Alto Maipo (PHAM), no acontecía en el lugar desde hace una década. A su vez a este último se suman una serie de accidentes que, al poco indagar en las causas y responsables, nos llevan a un factor común: las faenas industriales, campamentos y el tráfico permanente de camiones de alto tonelaje que sobrecargan la infraestructura vial (puentes y caminos) y que son propiedad de la empresa AES GENER, titular del Proyecto Hidroeléctrico Alto Maipo (PHAM).
Como es de conocimiento público, la aprobación de este proyecto en el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), ha sido permanentemente cuestionada por el tráfico de influencias y las deficiencias técnicas que presenta. Lo que entre otras cosas, representa una afectación al medio ambiente, los ecosistemas y el agua de Santiago, mayor a lo que se informa y en algunos casos se oculta. Restando incluso la definición de importantes causas legales en los tribunales.
Actualmente AES GENER usufructúa de las obras publicas existentes en la comuna de San José de Maipo, sometiéndolas al tránsito de vehículos de alto tonelaje sin la fiscalización y el adecuado mantenimiento, transformándose en un grave peligro por su actuar y negligencia para la seguridad de la población local y los miles de turistas que visitan la comuna.
El accidente que nos afectó hace algunas semanas es uno de los tantos accidentes y negligencias del PHAM, que son más frecuentes de lo que se sabe e informa públicamente.
En este sentido, es posible señalar algunos hechos graves, como es el impacto vial donde el aumento de vehículos que acceden al Cajón, vinculados al PHAM: camionetas, camiones, maquinaria pesada y buses que trasladan a los empleados, superaría lo informado en el estudio de vialidad respectivo, que además no cuenta con una adecuada fiscalización. Esto evidentemente significa una sobre carga de la infraestructura vial por parte de una sola industria (PHAM) que ejerce supremacía en el territorio, en desmedro del adecuado desarrollo de otros sectores productivos de la zona (agricultura, turismo, entre otros) y deteriora la calidad de vida e la población.
Otros ejemplos críticos son:
- Hace un tiempo se informo que una broca industrial de un metro de largo, utilizada para perforaciones subterráneas salió desde el pavimento en el sector las lajas a plena luz del día. Lo cual podría haber provocado un accidente de proporciones.
- La instalación de campamentos ilegales y contaminación por vertido de lubricantes que acontece en la localidad del Volcán, también estaría afectando a otros tres sectores con vegas y bofedales de alta montaña, donde la empresa está trabajando.
- Sabido es que la empresa en sus estudios (EIA) no contemplo especies como el pato corta corrientes existente en los esteros del río Volcán. En materia de flora, persiste la corta ilegal de especies nativas y cuando la empresa ha replantado especies, en su mayoría, se han secado.
- En cuanto a la Arqueología del lugar, se están afectando sitios que no se consideraron en su EIA y los monitoreos no serian todo lo riguroso que se requiere. Según han informado los propios trabajadores, se les instruye para que “escondan cualquier cosa” que encuentren y así evitar denuncias y retrasos en las obras.
- En cuanto a uno de los argumentos que sostenía la ejecución del PHAM: que este era una oportunidad de crecimiento para la zona y que entregaría “más y mejores empleos para la comuna”. Por lo visto en la práctica, son varias las semanas de paros y huelgas de los trabajadores, donde acusan malas condiciones laborales y bajas remuneraciones.
- Han construido en lugares que no declararon en el Estudio de Impacto Ambiental y algunas obras son distintas a las que se evaluaron e indicaron originalmente, entre lo que se encuentran caminos, puentes, campamentos, faenas, etc.
Como podrán ver, la experiencia vivida el fin de semana donde quedamos aislados en el Cajón del Maipo nos puso en el camino del PHAM, debido a que se realizo un trekking de 16 km para 40 personas, con el fin de conocer la laguna El Morado y desde allí poder apreciar el glaciar San Francisco. Todo esto en el marco de una ESCUELA DE FORMACION VERDE dirigida a conocer los ecosistemas cordilleranos y glaciares de la Región Metropolitana, que como sabemos, a estas alturas son “especies en peligro de extinción" producto del cambio climático y acción inotrópica, entre otros, como la que se efectúa con la ejecución del proyecto ALTO MAIPO.
Los afectados por esta nueva negligencia de ALTO MAIPO fuimos rescatados finalmente, primero por la acción organizada y propia de quienes estábamos en el lugar, lo que fue complementado y dilatado de manera “cinematográfica” por la acción de bomberos y personal policial hasta las 02.00 am. Logrando llegar a nuestros hogares a eso de las 07.00 am del día domingo.
Lo anterior, no sin antes tener que lidiar, discutir y persuadir a personas como Alberto Alday, Director de Emergencia de la Municipalidad de San José de Maipo y Roberto Cabagnola, que se identifico como Responsable de Alto Maipo, para que nos trasladarán hasta Santiago, ya que su ofrecimiento inicial, fue dejarnos a todos, a las 03.30 am aprox., en la plaza de San Alfonso o San José, literalmente botados. Los argumentos de la empresa para prestar ayuda de manera parcial y deslindar responsabilidades, dice relación con que “esas obras no son de ellos”, un punto que se cae por sí solo, ya que este puente es el acceso al valle de las arenas que es un importantes puntos de faena, que actualmente se distingue por conteiner y maquinaria de la empresa.
De manera auto coordinada -y luego de lidiar con el sentido común de nuestros interlocutores- los afectados por este accidente logramos organizar rutas de acercamiento para dos buses (pertenecientes a “Municipalidad de Alto Maipo”) que trasladaron a todos los afectados a las proximidades de sus viviendas en Santiago. La semana siguiente al accidente, significo el retiro de los vehículos atrapados por parte de sus propietarios.
Luego de lo vivido en el Cajón del Maipo es posible que muchos turistas no vuelvan a visitar la zona, estos por el incidente en sí, pero también por la falta de una adecuada acción de las policías y del aparato gubernamental en el manejo de la emergencia, quienes en todo momento actuaron de manera obsecuentes y serviciales con la Empresa responsable del accidente y no con los afectados.
Esto sin duda refleja la falta de protocolos y seguridad ante episodios de esta naturaleza en la zona y da cuenta de la prevalecía que estas compañías logran, a punta de dinero, por sobre las autoridades locales y el sector publico.
Finalmente, agradecer que este hecho no tuviera consecuencias mayores para los afectados. Quienes con la experiencia vivida, solo reafirmamos nuestro parecer en relación a decir con más fuerza NO ALTO MAIPO!
* Cristian Villarroel Novoa es Ingeniero Ambiental y Vicepresidente del Partido Ecologista de Chile.