La abstención: la hipócrita forma de legislar que volvió en la reforma educativa
La indicación que buscaba penalizar con cárcel a quienes lucren con recursos públicos en educación fue rechazada causando un gran revuelo. La propuesta fue de diputados de la Nueva Mayoría y había sido aprobada en la comisión de Educación, pero en la sala fue rechazada en la sala con 14 votos del oficialismo: siete rechazos, de la DC y el PR, y ocho abstenciones de diputados PPD y DC marcaron su baja.
Los parlamentarios que se abstuvieron fueron Pepe Auth (PPD), Iván Flores (DC), Jorge Tarud (PPD), Fuad Chahín (DC), Marco Antonio Núñez (PPD), Joaquín Tuma (PPD), Daniel Farcas (PPD) y Ricardo Rincón (DC).
El diputado y ex dirigente estudiantil, Gabriel Boric, señaló que esta votación “evidencia el desorden que existe en la coalición de gobierno, no estamos hablando de aspectos secundarios, si no de la discusión central” y agregó que “cada vez está mas claro lo ineficaz que ha sido la estrategia del Gobierno para alcanzar avances sustantivos en educación”.
Para el ex parlamentario Nelson Ávila, “las abstenciones revelan un espíritu pusilánime por un lado, o bien una forma de zafarse de ciertos compromisos e indirectamente apoyar algo que en definitiva se intenta ocultar para no ser objeto de cuestionamientos”.
“Una vergüenza, en la cámara se acaba de rechazar la tipificación del lucro como delito", publicó en sus redes sociales la diputada Karol Cariola.
Sin embargo, la abstención como herramienta en política es más que común en las salas del Congreso, una vieja usanza que sin establecer una opinión, favorecen a un interés e influye en los resultados de las votaciones. Nelson Ávila subrayó que “los que se abstienen apoyan pero de una manera hipócrita lo que deberían rechazar. En general, casi todos los partidos están perforados por ciertos intereses que en el campo de la educación, intentan mantener una modalidad de funcionamiento que implica lucrar con dineros públicos”.
Críticas generaron también importantes abstenciones, como la de los diputados Camila Vallejo y Giorgio Jackson al momento de votar o la comisión investigadora que indagará las responsabilidades del Partido Comunista en la crisis financiera que vive la Universidad Arcis.
Comúnmente, las abstenciones son una señal de desinterés o malestar para deslegitimar políticamente una propuesta. Para Gabriel Boric las abstenciones son herramienta de negociación, y consideró que “nuestro rol y lo que espera la ciudadanía de nosotros, es mostrar una posición sobre los temas relevantes para el país. No hay que usar el voto como una herramienta de negociación interna, que es lo que muchas veces pasa. Nosotros solo lo tenemos considerado para eventuales proyectos en que tengamos conflictos de interés”.
Por su parte, Nelson Ávila apuntó al financiamiento de la política como una causa importante en las abstenciones y evaluó que en la cámara alta la votación se va a dar de forma parecida ya que “muchos diputados y senadores nutrieron sus faltriqueras durante la campaña con aportes provenientes del mundo de la educación subvencionada”, aseguró.